Capítulo 2

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Es mi día de descanso, me refiero a descansar de mi escuela; hoy tengo una fiesta con mis amigos y sorpresivamente mi mamá no se encontraba en casa y para terminar mis hermanos se habían comido todo el desayudo, así que decidí omitir esa comida porque bueno no soy diestra en la cocina y supongo que si no como una vez no me pasa nada, aunque mi estómago empezaba a exigirme el desayuno preferí darle un cigarrillo, he escuchado a algunos amigos decir que eso calma el hambre y de verdad que espero que lo haga porque no soy muy fanática de su sabor, yo en realidad prefiero la hierba. Y aunque yo no puedo consumir grandes cantidades de marihuana aun así lo hago; todo es culpa de este corazón y este estúpido problema que lo aqueja, mas hay veces en las que me resulta difícil creer ¿cómo algo que amas te puede herir tanto?, se que no debería hacerlo pero hay que sincerarnos ¿a quién le importa lo que me pasa? Estoy consciente, y sé que no soy la hija que mamá esperaba y también sé que he hecho cosas terribles, pero también he hecho cosas buenas como ayudar a perritos de la calle o darle marihuana a un vago que no tiene para comprarla, eso es algo ¿no?

Lo sé soy una porquería de persona por eso siempre mantengo mi distancia con todos para no herir a nadie.

Me acosté de nuevo y sin saberlo me quede dormida, mas tarde dieron las 5:00 pm y me fui con mis amigos. "Mis amigos" son del tipo de personas a los cuales sus padres les dan dinero para que desaparezcan, suena algo cruel pero para mí es una ventaja (normalmente ellos siempre pagan todo)

Empezamos con algo ligero en realidad yo deseaba ir a comer, pero ellos ya habían comido así que tomamos unas cervezas, mas tarde supimos que a dos cuadras de donde estábamos había una fiesta.

"Nota: Lee este fragmento mientras escuchas escuchas música electrónica (así tu también entras en ambiente) esta es mi sugerencia"

La casa era enorme había muy buena música y abundaban los chicos; un montón de adolescentes brin coteando al ritmo de la música, bebidas alcohólicas por todas partes, colillas de cigarrillo regadas por el césped que conducía a una alberca. Algunos jóvenes se besaban excesivamente, a tal grado que uno no puede distinguir si esa clase de besos es sensual, hay pasión o simplemente producen asco; tomé una bebida que nos dieron pero no tenía ni idea de que era, cuando la tome percibí un sabor algo amargo pero lo ignore ya que creí que era por tener el estómago vacío, pero a medida que transcurrían los minutos comenzaba a marearme mucho. Aun así no me importó, seguí tomando y de pronto recuerdo a verle marcado a Alan, pero no estaba muy consciente que digamos

- Hola All.- Dije exaltada (con tono difuso)

- ¿Carla? ¿dónde estás? ¿por qué hablas así?

- Estamos... ¿Dónde estamos wey?

- ¿Carla?

- Qué estamos por la escuela pero no confío mucho en sus referencias.

- Pero Carla que...

- Shhhh... Alan te quiero mucho amigo

- Yo también, ¿quieres que vaya por ti?

- Pues si topas sí; porque All me siento un poco mal.

- Voy por ti Carla, no te muevas.

Colgué, aquel lugar comenzó a dar vueltas: escuchaba preguntas en tono difuso: "¿Wey estas bien? ¿Necesitas otra cerveza? Wey no mames, esta hasta el tope" las luces incandescentes segaron mi vista y juro por mi vida que no recuerdo nada más... solo como se disipaba la música electrónica en mis oídos hasta entrar en un mi inconsciente total.

Dos semanas para enamorarme de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora