"No había duda, logré lo que me propuse en el momento correcto, mi cabeza me había dado destellos, uno de ellos cuando hablé con Victoria esa noche en la que pensé huir con ella, no estamos ni atrás, ni adelante, solo estamos a tiempo.
Somos guerra...
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Miraba el techo cuando la alarma sonó... miré a Diana...
- ¿qué pasa?
- nada bueno...
me levanto de la cama apoyándome en una muleta, nos asomamos hacia el exterior y lo que encontramos es toda una revolución en donde todos, se golpean contra todos.
la miro...
- Isaac...
- no, Mauro, no voy a dejarte ir...
- tengo que ayudar a Isaac...
- no vas a ir a ningún lado con esa pierna jodida, ¿quieres morir?
- no, ahorita no, gracias.
me pone la mano en el pecho...
- NO TE VAS...
elevo las manos mientras me apoyo en la muleta...
- de acuerdo, parece que te gusta mandar en tus relaciones...
entramos a la enfermería y cerramos las rejas, por lo menos acá no pasarán...
estoy preocupado, estoy preocupado por Isaac... ¿qué estará haciendo?
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La mirada de Irving cambió y supe que algo iba muy mal...
uno de sus hombres se acercó y me soltó un golpe en la cara que respondí con 3 golpes y un giro de cabeza que le quitó la vida...
- CREO QUE ESTÁN OLVIDANDO QUIÉN ES EL QUE MANDA ACÁ... ¿ALGUIEN QUIERE AVERIGUAR QUIÉN ES EL QUE MANDA?
Irving me aplaudió mientras se acercaba con un número considerable de hombres, los míos se pudieron a mi lado, Hatsu y mi primo en primera línea...
- Pacheco está muerta, Isaac, tu reino aquí termina...
dejé caer al tipo de manera escandalosa, Irving se lanzó contra mi y lo esperé con ansias, básicamente, era la mitad del penal que había tomado partido por él y la otra mitad había tomado partido por mi, entonces era la mitad contra la otra mitad, tomé a Irving del cuello y lo azoté fuerte contra la mesa.
