Capítulo 29 - Plan 'B'

2.1K 154 111
                                    

Narra Usagi

Miré a Misaki, quién seguía jugando con el cachorro tiernamente, esto iba a ser algo complicado.

—Pequeño —dije para llamar su atención—, tengo que decirte algo importante.

Cerré mis ojos, concentrado en hacer desaparecer el pequeño nudo en mi garganta que cada vez se hacía más grande.

—¿Te vas a ir verdad? 

Tragué saliva, nervioso.

Pude notar como lentamente acercaba más al perro contra su pecho, abrazándolo fuertemente. De un momento a otro, toda el aura de felicidad y calma que nos rodeaba se había esfumado.

—No es algo que pueda evitar Misaki, sabes que si fuera por mí...

—Usagi —susurró mirándome con los ojos cristalizados—, no quiero que te vayas, no ahora que estábamos tan bien.

—Amor... —dije con la voz un poco quebrada, volví a tragar para intentar mejorar un poco el tono— yo tampoco quiero irme, pero ya sabes que es trabajo...

—Dices que es trabajo, pero... pero tu nunca te tomaste en serio nada que tuviera que ver con eso, siempre faltabas a tus reuniones y premiaciones para estar conmigo, y me duele ¿sabes?, me duele que ya no sea así, porque siento que... que ya no soy lo suficientemente bueno para ti. Quieres abrir tus horizontes, y eso lo entiendo, pero cada vez me siento más una carga que una ayuda Usagi... ya no sé... no sé que me pasa.

Tomé el volante con fuerza, intentando no debilitarme por las lágrimas que podía ver correr por las mejillas de Misaki, ¿por qué esto es tan difícil? Ahora recuerdo por qué me fui sin despedirme correctamente la primera vez, esto era de lo que estaba huyendo, de esa terrible despedida que hace que una parte de tu alma se desprenda de ti. Esa clase de despedida, que te hace creer que nunca podrás volver a reunirte con la otra persona.

Porque después de todo, la distancia es uno de los obstáculos más grandes para el amor.

Apoyé mi cabeza en el respaldo de mi asiento, ¿qué tan grave sería que mandara todo a la mierda y me quedara con la persona que amo para siempre? ¿realmente valía la pena alejarme de él por el mes y tanto que quedaba?

  —Misaki... —susurré. Acerqué mi mano a la suya, que reposaba sobre la cabeza del perro y la tomé con firmeza—, por favor, no me hagas esto más difícil.

—No es que lo quiera hacer difícil —admitió—, solamente que... no lo sé...

—Escucha mi amor, iremos a buscar las compras que le dejamos al guardia hace unos minutos, y vamos a ir al departamento, ¿está bien? 

Misaki asintió con la cabeza, mirándome de vez en cuando.

—Y me ayudarás a prepararme para el viaje —continué—, no quiero que sea como la primera vez, el sólo pensar en lo estúpido que fui al dejarte una estúpida nota bebé... me hace sentir terrible.

  —¿Te iré a dejar al aeropuerto esta vez? —preguntó, con un poco de brillo esperanzado en sus ojos.

—Por supuesto —susurré.

—Entonces, creo que no será tan malo después de todo.

Sonreí, e inclinándome sobre él, le di un largo beso.

Encendí el motor, y mientras nos poníamos los cinturones no pude evitar pensar, en lo mucho que extrañaría a mi pequeño.

      










Luego de recoger las cosas del supermercado y pagarle a un camión para que nos siguiera y las dejara en nuestro departamento, nos pusimos a trabajar de inmediato.

No me dejes solo [Junjou Romantica] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora