Princess of the mafia. [EDITANDO]

Capítulo 11.

Él sentó a _______________ en su escritorio como la primera vez, de inmediato sacó un condón de su pantalón y se lo puso. Gruño al ver como ella lo esperaba lista con las piernas abiertas para él. Maldición, ella podría hacer con él lo que quisiera, nunca nadie lo había excitado de esa manera, y ella...ella tenía apenas diecinueve, joder.

Él era un hombre experto en el sexo, nadie nunca lo había podido seducir como ella estaba comenzando a hacerlo...era una pequeña zorra sucia, y le gustaba.

- Me encantas. – susurró él en su oído y entro en ella fuerte, escucho como ella gimió, alto, demasiado alto... - Agg, joder, te sientes tan estrecha, es como si fueras virgen... - gruño al volver a entrar en ella fuerte. Ella llevo sus manos hasta la espalda de él y clavó sus uñas en ella. Lo hacía maravillosamente perfecto. La hacía perderse del mundo y eso era lo que ella buscaba.. - ¿Te cuento un pequeño secretito? – dijo y volvió a entrar en ella más fuerte...y más fuerte aún. – El día que viniste a pedir el trabajo..Esa noche no pude dormir pensando en ti... - ella gimió al sentirlo entrar de nuevo en ella, una y otra y otra vez. – Te había quedado en mi cabeza de una manera no tan buena...joder, me excitabas tanto... - sonrío con ironía. Nunca una chica lo había dejado desvelándose por la noche...y ella, ella se había quedado en su cabeza la mayor parte de la noche, atormentándolo y haciendo que él perdiera la cabeza... - Esa noche tuve que hacer cosas sucias, porque tu no salías de mi mente....

- ¡Ahh! – volvió a gemir ella, pero esta vez un poco más alto. Él ahora salía y entraba de ella un poco más rápido...joder, ella iba a enloquecer allí mismo. Estaba por llegar a su punto máximo y él lo sabía, porque estaba acelerando sus embestidas. Él gruño. Ella se encontraba en medio de jadeos, su respiración era tan agitada...juraba que iba a morir. Maldición, él lo hacía bastante bien...

- ¿Te gusta cómo te follo princesa? – Ella solo asintió ante su pregunta. – Dilo...respóndeme. – Él esperaba que le respondiera con una sola palabra, un simple "si" era suficiente para él, pero en ese momento ella no era capaz de hablar, se encontraba fuera del mundo...estaba a punto de llegar y estaba segura de que iba a seguir un gran orgasmo... - Nena, respóndeme...ah, joder...

- Ahgg, sí, me encanta...me encanta. – Justin mordió su labio inferior al escucharla responder. – Me encanta como me follas.

Y esa fue su última palabra antes de explotar junto a él y gritar su nombre.

(*)

El agua seguía cayendo por su cuerpo, estaba en la temperatura perfecta en la que ella le gustaba. En ese momento se encontraba en su casa compartiendo un poco de tiempo con sus hermanas, les había llevado regalos una vez más...le estaba yendo tan bien en su trabajo...Y solo quería ver a sus hermanas felices, que no les faltara nada, sí, eso era lo único que quería...

Cerró los ojos mientras el agua seguía cayendo sobre su cuerpo. Eso la relajaba tanto. Recuerdos de la noche anterior llegaron a su mente y la torturaron... toda la noche había hecho el amor con Justin, o mejor dicho, habían tenido sexo y habían follado toda la noche ... pero él la había cagado hasta el fondo...había insinuado que ella era una puta y regalada por acostarse con él..eso a ella le había dolido en el alma.

Ella no era ninguna puta.

Y si él creía que ella se estaba acostando con él nada más por el dinero, él estaba muy equivocado. Ese hombre a ella le encantaba y la hacía sentir viva sexualmente, ¿Qué otra explicación necesitaba él? La primera vez le había encantado acostarse con él, eso la había sacado de tantos problemas mentales en los que se encontraba...

Y ahora se encontraba en peores.

La culpa estaba llegando a su mente y la estaba comiendo viva, joder...maldita culpa. Nunca lo hubiera creído, pero disfrutaba matando personas, pero después...después la culpa llegaba a su mente y la atormentaba de la peor forma.

Cerró el grifo de la ducha y puso sus manos en su cara. No quería llorar, no iba a llorar, tenía que ser fuerte, con suerte todo acabaría más rápido de lo que ella creía. Pero todo aquello apenas estaba comenzado.

Salió de la ducha y vistió su cuerpo con una toalla blanca de lana que había comprado. Enrollo su cabello en otra y se dispuso a salir del baño para vestirse en su habitación.

(*)

- ¿¡Te ha dicho puta!? – grito efusivamente mientras se sentaba al frente de ______________ y le entregó un refresco. – No lo puedo creer, Justin no es ese tipo de...

- ¿Qué sabes de él?

Daniela suspiro ante la pregunta de su mejor amiga, eso le pasaba por sobrepasar las barreras cuando se ponía a hablar. Ella había prometido no contarle a nadie acerca de Justin, a nadie, ni siquiera a su madre o a su familia, tampoco podía contarle a __________ de esto...

Pero ella era su mejor amiga, ella sentía que podía confiar en _____________ con toda su vida, porque ella nunca la defraudaría. Confiaba demasiado en ella.

- Él es mi mejor amigo, ___________. – comenzó con intención de contarle toda su historia con el. De inmediato los ojos de _______________ se abrieron como dos grandes platos por la sorpresa. Su mejor amiga era la mejor amiga de...oh por dios. Pero tenía que dejar de ser tan dramática, por dios, ella se había acostado con él ya dos veces, o más...y... - Lo conocí cuando el tenía apenas diecisiete años, era un joven que le gustaba divertirse, y ya sabes, las mujeres, como a todos los hombres de esa edad. Su madre se había muerto cinco años atrás y él se había quedado sin nadie, su familia no quiso hacerse cargo de él, así que como no era mayor de edad, tendría que irse...allí él encontró a su mejor amigo, Ryan.

- Nunca me lo hubiera imaginado.

- Yo lo conocí en una fiesta, a él le gustaba todo tipo de drogas, vivía de fiesta en fiesta, esa era su vida. – continuo y sonrió. No sabía porque sonreía al recordar esos tiempos...habían sido los peores de su vida, pero lo había encontrado a él, y le había ayudado tanto. – Él y yo tuvimos un tipo de aventura, no sabes, yo me enamoré de él como no tienes ni idea, yo estaba completamente loca por ese hombre y no solo era la forma en la que me...es que él era tan..Tan perfecto. – acachó su mirada. No podía esconder que todavía sentía un cariño incondicional por él...pero todo eso ya era pasado, al final él había sido un cabrón como todos los hombres. – Yo me ilusione demasiado con él, mientras él solo jugaba conmigo, maldito cabrón... - se echo a reír. – Decidí alejarme un poco de él porque yo había quedado en embarazo y sabía que si él se enteraba, me mataría, por decirlo de alguna forma. Dañaría su vida con un mocoso. Eso era lo que él me repetía, él tiene un maldito odio muy grande por los niños, a él lo trataron como mierda cuando era uno.

- Lo conoces más de lo que creía.

Daniela asintió.

- Yo soy cuatro años menos que él, entonces ya te imaginas, quedé embarazada de él teniendo quince años, maldita sea, había sido una completa estúpida... - hizo una pausa y miro a ___________ a los ojos. - ¿Ustedes se están cuidando?

________________ asintió ante su pregunta.

Claro que si, ella no era tan boba como para tener relaciones sexuales sin cuidarse...

- Bien, a los veinte el cambió, demasiado...las malas amistades suyas estaban por todos lados, su único buen amigo era Ryan y ese...ese también se volvió una mala influencia para él. Y cuando digo mala, es porque él se había vuelto realmente malo...Ryan fue el que incitó a Justin al mundo donde ahora se encuentra. – se paró de su asiento dando señas de que ya había acabado de contar su historia. – Lo otro te lo cuento otro día...ahora ve a seguir follando con él, señorita... - se echo a reír.