Destino o Casualidad... Capítulo 2

147 16 6
                                    

Son tantos los caminos que puedes tomar

y tantas las personas que no miraras

tal vez fuimos solo capricho solo del azar

y ahí los dos...

Siwon POV

Por fin he llegado a casa, extrañaba la intimidad de mi departamento. Hice malabares para subir todo de una vez, mi maleta y las bolsas con lo que pase a comprar. Vivo en el sexto piso del edificio donde vivo, el elevador es un poco pequeño y solo hay uno. Como estaba en el último piso, tuve que subir todo por las escaleras.

Coloco las cosas en la barra de la pequeña cocina, saco unos hielos de la nevera para ponerlos en una toalla. El golpe que me di en la cabeza me está pasando la factura, duele incluso cuando me río y la cabeza está comenzando a doler. En todo el camino he podido dejar de pensar en el chico de labios antojables, realmente era hermoso, es una lástima que nos hayamos conocido de esa forma.

Llego al pie de la cama y lanzo mi maleta sobre ella, me siento en la misma algo resignado con mi suerte, pongo la toalla con los hielos sobre mi cabeza. Estoy seguro que ahora no podré dejar de pensar en ese chico, ni siquiera se su nombre, que tonto soy.

- Aish mi cabeza, ¡¿Por qué no se lo pregunte?!

Cierto, comenzó a gritarme antes de dejarme hablar, aunque de verdad se veía muy lindo todo enojado. Me dejo caer sobre la cama molesto, ¿y ahora qué hago? No soy de los que se rinden, pero sin su nombre y sin saber si volveremos a vernos. Paso mi mano libre sobre la cama, si sigo pensando en esto mi cabeza estallara.

De pronto me doy cuenta que estoy recostado sobre la cama. Me levanto rápidamente como si mi cuerpo tuviera resortes, debo asegurarme que mi cama tenga sabanas limpias, recuerdo que mi amigo tuvo mis llaves y seguramente estuvo aquí.

- Quizás Donghae pueda ayudarme con esto... -murmuro.

Me distraigo un poco arreglando la ropa limpia que traje de casa de mis appas, cambio las sabanas de mi cama y coloco unas limpias. Meto a la lavadora las sabanas nuevas que traje, deben quedar suavecitas para poder usarlas. Y comienzo a arreglar los víveres que traje del mini súper en la nevera, al ver las bolsas, no puedo dejar de recordar al chico de labios antojables.

- Dios es tan lindo. Incluso cuando me gritaba. -me lamento.

Cuando termino de arreglar todo en la cocina me doy cuenta que ya debo prepararme algo para comer, con todo lo que hice las horas pasaron rápido y ya es más de medio día. Debo comer algo. Pero antes de hacerlo, me ducho rápidamente.

Como siempre, la ducha termina por relajarme por completo, la cabeza me duele menos y por ahora me concentro en mi estómago hambriento. Abro las puertas del balcón de mi cuarto, tengo la costumbre de secar mi toalla colgada en la baranda del balcón. Viviendo en el cuarto piso no se me hace problema.

Cuando termino de acomodar la toalla, escucho como alguien abre una puerta en el departamento de abajo. En este edificio todos los departamentos cuentan con balcón y si mal no recuerdo el de abajo del mío se encontraba vacío, seguramente ya se habitó. Me asomo por el balcón tratando de ver un poco, lo único que logro ver es un gato gris que me mira curioso y termina maullando delatándome.

Dejo de mirar y mejor me voy a prepararme algo a la cocina, después de todo lo que pasó merezco comer. Entonces por un momento me olvido del chico de labios antojables, el destino dirá si volveremos a encontrarnos. Suspiro resignado.

Destino o Casualidad...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora