Capítulo 45 • La fiesta y el engaño

214 17 0
                                    


• Lea

El partido ya estaba por terminar, estaban ganando nuestro equipo 1 a 0. Todos estábamos literalmente comiéndonos las uñas de los nervios, ya estábamos en el final del segundo tiempo y cualquier cosa podía pasar.

- Creo que muero –Dice Beth.

- ¿Por qué? ¿Qué tienes? –pregunte preocupada, Beth se echaba aire con su mano.

- Zayn se ve tan jodidamente sexy todo sudado –ella se muerde el labio y yo suelto una carcajada.

- Estas loca.

- Lo se, gracias por recordármelo –Ella ríe conmigo y nos concentramos en el partido

El equipo contrario acaba de anotar un gol, todo el campo quedo en silencio, parecía que iban a ganar ya, pero, Harry se robo el balón, realizo varios movimientos y terminaron anotando un gol logrando que los tigres ganaran, el campo se lleno de gritos y vi como subían a Harry y comenzaban a gritar su nombre, baje corriendo junto a Beth hasta el campo, algunas personas estaban felicitando a Harry, pero me sorprendí al ver a Natasha hablarle a él en el oído cuando ella se aparto Harry la miro confundido, me acerque algo molesta haciendo que Harry me mirara, se veía confundido.

- ¿Qué quería? –pregunte.

- Nada, ignórala –respondió abrazándome por la cintura, algo trama Natasha y debo descubrir que es.


•••

Beth tenia razón sobre la fiesta, es la mas grande de todas comparada con la otra al cual asistí, esta es aun mas ruidosa, los chicos están entusiasmados, muy felices, hay cerveza por todos lados, en las paredes, piso, la música esta a todo volumen. Harry y yo estamos con los chicos en la sala de la casa de Zayn mientras él sostiene mi cintura.

-¡El mejor partido de mi vida! –grita Zayn, ya se nota que esta algo pasado de cervezas.

- La mejor de nuestras vidas Zayn –responde Harry quien tiene una cerveza en su mano, él y Zayn brindan con sus cervezas.

- ¿No tomaras nada Lea? –pregunta Beth, tiene un vaso rojo lleno de cerveza.

- No, yo no bebo –Digo frunciendo mis labios.

- ¿No beberás nada? ¿No tienes sed? –Pregunta Harry preocupado-, puedo ir a la cocina a ver si te consigo alguna soda ¿quieres que vaya?

- Por favor –le pido sonriendo.

- Ya vuelvo –él besa mis labios y se aleja hacia la cocina, Beth hala mi brazo y me lleva a la pista de baile ambas reímos y comenzamos a bailar.


•••

La pelirroja comenzó a moverse entre todas las personas que se encontraban bailando, al fin Harry se había alejado de su querida primita, ella halo a Dylan y le señalo a Harry que se dirigía a la cocina, así seria mas fácil su plan.

- Ve tras él cuando se distraiga agrega esto en su vaso.

Ella le entrego una pequeña bolsita, Dylan ya entendía cual era el plan, ella quería drogarlo.

- ¿Y luego que? –pregunto el rubio.

- Luego me encargo yo y cuando ambos desaparezcamos, lleva a Lea arriba, a la cuarta puerta, espero que hagas tu trabajo Dylan.

- Lo haré –responde el rubio y se aleja hacia la cocina, Harry tiene un vaso de cerveza y lo coloca arriba de la encimera, él de rizos se inclina en la nevera para tomar una soda y esa fue la oportunidad de Dylan para agregar el polvo blanco de su bolsa, lo movió un poco y se alejo hacia la puerta.

- Con esto bastara –susurra Harry con una soda en su mano, toma su vaso de cerveza sin mirar y se lleva un gran trago- wow, esto esta fuerte –dice apretando sus ojos para aclarar su vista – demonios, esto no parece cerveza.

La vista de Harry se volvió borrosa al instante, no veía nada bien, comenzó a moverse hacia donde se encontraba su novia, pero era tan pesado todo que hasta había olvidado hacia donde se dirigía, se inclino hacia abajo para tomar bocanas de aire y se sostuvo de una pared, sintió como alguien tomaba sus brazos y se acercaban a él.

- ¿Lea? –pregunto aturdido, se parecía su novia.

La chica lo guió por las escaleras y lo llevo a lo que parecía una habitación, lo tiro sobre algo suave y acolchonado acomodándose sobre él.

- Ahora me divertiré contigo –Susurro Natasha.

- Tú no eres Lea -dice Harry

- Shhh –la pelirroja coloco un dedo en su boca y luego comenzó a besarle. Su prima se llevara una gran sorpresa.


• Lea

Después de haber bailado con Beth estaba agotada, quería tomar algo pero Harry no había vuelto de la cocina, preocupada me dirigí allí, tal vez se entretuvo hablando con alguien, pero él no estaba en la cocina ¿Qué le habrá pasado?

- Hola Lea -Veo a Dylan detenerse justo al frente de mi, lo ignoro y doy media vuelta- ¿no piensas saludar?

- Hola Dylan –digo fastidiada- ¿Qué quieres?

- Hablar contigo, acompáñame –Dylan toma mi brazo y me lleva hacia la escalera ¿A dónde me lleva este loco?

- Suéltame, no quiero ir a ningún lado contigo –intento zafarme pero su agarre es fuerte, boto un gruñido – me lastimas.

- Vamos, se donde podremos platicar tranquilos.

Caminamos por el pasillo de las habitaciones, Dylan se detuvo en una puerta y la abrió de golpe, había una pareja en plena acción, la chica me parecía conocida.

- ¡Oops! Lo siento –dice Dylan riendo, él sale y yo veo por ultima vez hacia ellos mi vista se había adaptado a la oscuridad, casi mi quijada se sale de lugar, Natasha se encontraba allí arriba de un chico, ella solo llevaba sus jeans y su brazier. No pude evitar ver con quien se encontraba y mi rostro cambio totalmente, no se si era decepción, dolor o rabia lo que sentía.

- ¿Harry? –pregunte y me adentre mas a la habitación, encendí la luz y Harry cerro sus ojos de golpe, se sentó algo aturdido y me miro, su cara era de sorpresa, vio a Natasha que estaba arriba de él y frunció su ceño.

- Creí que no volverías a ser él de antes –pregunte cruzándome de brazos y apunto de llorar.

- ¿Lea? –Pregunta él, ve a Natasha y ella voltea a verme- ¡no es lo que piensas! –Dice rápidamente quitando a Natasha encima de él- Yo no...

- ¡Cállate! –Grite – ¡No quiero escuchar otra mentira Harry! ¡Nunca vas a cambiar!

Salgo de allí furiosa, creí que él había cambiado por mi, que ingenua soy, un mujeriego siempre será eso, un mujeriego detesto que me haya visto la cara de tonta.

- ¡Lea! –escuche la voz de Harry pero yo simplemente salí de allí, cuando estaba algo alejada de la casa sentí a alguien tomar mi brazo y voltee para encontrarme con Dylan.

- Lamento eso Lea -dice mirándome-. Te llevare a tu casa.

Asentí y deje que me llevara a su auto, en este momento no tengo fuerzas ni para pelear con Dylan me siento rota, te odio Harry Styles.

¿Marcel? ¿Y Donde está Harry? | Original |Where stories live. Discover now