¿Marcel? ¿Y Donde está Harry? | Original |

Capítulo 51 • Buenos momentos

• Lea

-¿Me dirás que haces aquí?

Harry vuelve a preguntar y yo suspiro, bien, aquí voy.

- Vine a hablar contigo.

- ¿Y de que quieres hablar? –pregunta caminando hacia la sala mirando los adornos.

- Sobre nosotros.

Harry suspira y luego me ve fijamente, yo vuelvo a pasar mis manos por mi jeans limpiando el sudor que volvió a causar mi nerviosismo.

- Bien, te escucho.

Creí que Harry me iba correr de su casa, pero él quiere escucharme.

- Bueno, amm, yo, Harry esto que esta pasando me esta hartando, tu y yo nunca estamos bien, cualquier cosa estúpida se atraviesa y es injusto que los dos siempre nos dejemos llevar por eso, yo no quiero que sigamos así me siento patética diciéndote esto porque tu me odias, ya que crees que no confió en ti y yo...

Subí mi rostro y note a Harry sonriendo.

- ¿Te estas burlando de mi? –pregunto molesta.

- No, no, no me burlo.

- ¿Entonces porque te ríes? –me cruzo de brazos.

- Por nada –Harry se acerca a mí y toma mi mano-. Yo también pienso lo mismo Lea, te amo y lamento como me he portado contigo, pero, lo siento, no quiero que nadie te lastime.

Veo sorprendida la seriedad con la que Harry me dijo eso, ¿Qué nadie me lastime? Natasha debe estar atrás de esto.

- ¿Natasha te mostró la fotografía? ¿Cierto?

Él me ve sorprendido.

- ¿Lo sabes?

- Claro, Natasha me dejo una nota amenazándome, diciendo que me alejara de ti y que le mostraría la fotografía a todo el colegio, pero sabes que, al diablo con ella estoy harta, estoy segura que si aparece ahora mismo le patearía el...

Fui interrumpida por los labios de Harry sobre los míos, estuve tan sorprendida que mantuve los ojos abiertos solo un pequeño momento, para luego seguir el beso, extrañaba tanto sus besos, ambos nos separamos al mismo tiempo y Harry volvió a regalarme un corto beso.

- ¿Qué fue eso? –pregunte un poco aturdida.

- Eso ¿Qué eso? –Yo lo mire con los ojos entre cerrados- Solo bromeo, me alegra que ahora nos estemos entendiendo.

- Yo igual, desde un principio debimos hablar.

- Lo se y respecto a lo de Natasha.

- No quiero hablar de Natasha.

- ¿No? -pregunta extrañado- ¿Y de que quieres que hablemos?

- No quiero que hablemos -digo sonriendo y a la vez sonrojándome, a Harry se le vino una gran sonrisa a su rostro y se acerco a mi rostro.

- Hubieses empezado por esa parte.

Yo río y Harry termina de acercarse a mis labios regalándome un dulce beso, al principio fue lento pero luego, fue tomando velocidad, hace tanto que no estábamos así que parecía casi un sueño, el sonido de una garganta aclarándose hizo que me separara de los labios de Harry, él gruño aun con su frente junto a la mía, mire atrás de él para encontrar a una Anne sonriente.

- Lamento interrumpirlos chicos pero, la cena esta lista y me preguntaba si Lea le encantaría quedarse a cenar.

- ¿Que dices Lea? -me pregunta Harry, él aun me sostiene de la cintura y me sentí apenada porque su madre nos esta mirando ahora mismo.

- Me encantaría -les regalo una sonrisa y Harry toma mi mano dirigiéndome al comedor. Él se sienta a un lado de mi y su madre al frente de nosotros, la mesa era de solo cuatro sillas y no creo que los únicos que vivan aquí sean ellos dos.

- Amm Harry -susurro a su dirección y él me ve atentamente.

- ¿Que pasa cariño? -me sonroje al escuchar que me llamaba cariño ¿no puede ser mas tierno?

- ¿Cenaremos solo nosotros?

- Gemma esta por venir -se adelanta a decir Anne y yo arrugo mi frente.

- Gemma es mi hermana -dice Harry.

- ¿Solo ella? y tu padr...

- Si solo Gemma Lea, no te preocupes.

Sentí curiosidad por saber mas de la familia de Harry me he dado cuenta que no se nada de su familia, ni donde nació, absolutamente nada y me pareció muy curioso que él me haya interrumpido cuando estaba por preguntarle por su padre, tal vez se sentía incomodo al respecto, así que decidí no preguntarle.

La puerta delantera fue abierta y cerrada supuse que Gemma la hermana de Harry ya estaba aquí.

- Hola familia... -ella me ve y frunce su ceño-, y chica que no conozco

- Hola Gem -dice Harry- Ella es Lea, mi novia.

- ¡La famosa Lea! -dice emocionada-, me alegra conocerte ¡Tu hiciste que mi hermano se convirtiera en un idiota enamorado! ¡Te admiro!

Harry ve mal a Gemma y Anne y yo soltamos algunas risas.

- Creí que ustedes... -comienza a decir pero Harry la interrumpe.

- Todo esta bien entre nosotros -me mira fijamente y hace que me sonroje una vez mas, él besa mi mejilla y Gemma hace un sonido gracioso.

- Ew, no espectáculos por favor.

- ¿Te molesta? si es así besare a Lea ahora mismo solo para que te vayas - Harry se voltea hacia mi y acerca su boca en forma de pico y yo rió.

- Ya basta de molestar a tu hermana Harry -dice Anne-, mejor comamos se enfría la comida.

Los tres le hacemos caso a Anne y comenzamos a comer, estaba delicioso, su madre sabe lo que hace. Espero que ahora todo este bien y también espero que Natasha no se le ocurra aparecer ahora.

Luego de una agradable cena Harry y yo fuimos a su habitación, era algo grande y muy bonita, tenia una cama matrimonia y algunos posters de jugadores de fútbol en la pared, tenia una computadora en un rincón y a un lado un televisor de pantalla plana. Me senté en la cama mientras que él caminaba hacia una mesa y colocaba su teléfono allí. Comencé a sentir curiosidad por lo que paso hace unas horas en la cena, cuando Harry me evadió cuando iba a preguntar por su padre.

- Harry –lo llame y él volteo a mirarme.

- ¿si? –pregunto sentándose a mi lado.

- Quiero hacerte una pregunta y espero que no te incomode, ¿Dónde esa tu padre?

Él mira hacia sus manos entrelazadas.

- Él y mi madre se divorciaron cuando tenia siete años –voltea a mirarme-, dejo de visitarnos con el tiempo y solo nos enviaba cartas a Gemma y a mi junto a dinero, aun lo hace, ha venido de visita un par de veces pero yo lo he evitado. Estoy molesto con él, sabes lo difícil que es para un niño que su padre lo abandone. Es terrible.

- Lo siento mucho –le digo y él voltea a verme con una sonrisa.

- Tranquila, estoy mucho mejor sin él.

Le sonreí y coloque mi mejilla en su espalda, comencé a recordar aquella vez cuando platique con Harry cuando era Marcel, en aquella primera cita, cuando contaba un recuerdo de su padre y se mostró muy sentimental, él me estaba contando algo real. Harry podría haber sido alguien distinto físicamente, pero sentimental, seguía siendo él mismo.