Treacherous2; Fragmentados [j.b]

Fuera de la ciudad.

Capitulo Veintidós

Treacherous Fragmentados | Justin Bieber FanFic

La lluvia sigue cayendo, pensé en tratar de llamarte antes de que te alejaras mucho de la ciudad y espero que recibas este mensaje que te estoy dejando, porque odiaría que te marcharas sin antes escuchar lo que tengo por decirte; Espero que encuentres lo que estás buscando y espero que sea todo lo que soñaste, tu vida será mucho mejor y espero que seas feliz donde quiera que estés.

Toque el timbre tres veces.

Enterré el rostro contra el cuello de la gabardina azul y miré a mi alrededor, alerta, en busca de paparazzis. Aquella era la primera vez que salía sola, había tomado un taxi a pocas cuadras de mi casa y a pesar de que todo el camino me sentí ansiosa finalmente lo superé y al llegar a mi destino, mordiendo el interior de mi mejilla había bajado del coche y me dirigí hacia la sencilla casa.

De momento, escuche como la perilla era girada y entonces la puerta era abierta. Contuve la respiración.

La chica frente a mí se sobresaltó al verme. Sus ojos verdes se agrandaron, halo las orillas de su suéter y cubrió su cuerpo para protegerlo del aire frio del día.

--¿_____? —susurró confundida.

Trague saliva.

--Hola, Nicky—fue raro pronunciar su nombre. Fue raro estar para ante su puerta y fue raro verla, a través de la delgada blusa de tirantes se podía ver el nacimiento de su barriga, donde su bebe se encontraba. Fruncí el ceño.

--Que...-- miro a mi alrededor, como buscando a alguien más, casi alarmada. -- ¿Qué haces aquí?

--¿Puedo pasar?

--Oh, claro- se apartó de la puerta y me dio el paso. —pasa. Disculpa el desastre

Me introduje en la propiedad, era un lugar pequeño, de mínimo lujo, la sala y el comedor eran el mismo salón, de paredes hueso y pisos ya gastados por los años. Nicky había vivido ahí desde que su madre se enteró que estaba embarazada de ella, yo había ido a ese lugar infinidad de veces desde que ella y yo nos volvimos amigos y a pesar de que había dejado de ir, nada había cambiado; la misma alfombra corroída por el tiempo, los mismos muebles verdes, los mismos retratos que mostraban el crecimiento de Nicky. Era como si el tiempo no pasara en ese lugar.

Cruce el salón hasta la reducida sala donde me deje caer en uno de los sofás. Nicky hizo lo mismo y tomo asiento frente a mí en otro de los tres sillones, una pequeña mesa de madera oscura nos dividía.

--¿Quieres agua? – cuestiono tomando el mando de la TV y apagándola.

--Estoy bien

--¿Algo de bebes?

Negué con la cabeza—estoy bien

--De acuerdo... hum...

--No sé qué hago aquí—confesé con un mohín constante en el rostro. —Yo...yo... pelee con mi mejor amigo, esta tarde fue a mi casa y... no sé porque vine aquí.

--De acuerdo—susurro Nicky después de unos momentos.

Asentí con la cabeza.

--¿De cuánto estas? —pregunté cambiando de tema, señalando con la cabeza hacia su vientre.

Ella lo rodeo con sus manos y una sonrisa leve curvo sus labios.

--Tres meses, casi cuatro.

--Vale—asentí un tanto perdía.