1•°- Amiga

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Bueno antes de iniciar tengo algo que decirles, yo se que tendrá faltas ortográficas y les pido disculpas, eso lo corregiré al terminar el "libro" si es que se puede llamar así.
Soy nueva en este tipo de cosas, soy humana y cometo errores, eso está mas que claro, pero prometo que con el tiempo mejoraré
Gracias por su comprensión.

→Kathe♡

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La chica de cabello cenizo y raros ojos violetas caminaba en dirección a la biblioteca en busca de Kero, al estar enfrente de la puerta la abrió lentamente y recorrió con la mirada todo el lugar sin encontrar rastro de él, en su lugar se encontró con una cabellera azul perteneciente al jefe de la guardia Absenta.
Sin pensarlo dos veces se acercó a él y lo abrazó por la espalda, el elfo se sobresaltó un poco pero al mirar las pequeñas manos supo al instante de quien se trataba, de la pequeña molestia que lo seguía a todas horas.

-¿Qué haces aquí?, ¿no deberías estar ayudando en tu guardia?- agarró las pequeñas muñecas de la joven y la separó lentamente de él, después giró para verla a la cara.

-No, terminé con mi trabajo por hoy, Valkyon me dejó la tarde libre gracias a que ayer le ayudé hasta tarde con unas cosas- Gardienne no sabía que hacer, miraba en todas direcciones.

-Bien, entonces ayudame a llevar estos libros a la sala de alquimia- colocó varios libros en los brazos de la joven y se dispuso a caminar en dirección a la puerta, salió y se dirigió a la sala de alquimia, al entrar todo estaba completamente ordenado y muy bien colocadas todas las cosa en su respectivo lugar, a ella se le hacía impresionante el sitio, los contenidos de los frascos llamaban su atención, ya que eran de distintos colores y tonalidades.
Además de la variedad de plantas y objetos que estaban en los estantes y frascos.

-¿En dónde los dejo?- Ezarel le dirigió una rápida mirada y señaló un pequeño estante en la esquina de la habitación, ella con paso torpe caminó al lado de él y se dirigió al estante colocando cuidadosamente los libros en donde ella creía conveniente.

Con una sonrisa de satisfacción por haber acomodado los libros perfectamente bien, se dio la vuelta chocando con el abdomen de Ezarel que se encontraba detrás de ella muy cerca para su gusto.

Ezarel se acercó a ella un poco más haciendo que Gardienne chocara con el estante de libros, él la aprisionó contra el mismo poniendo ambas manos a los costados de la cabeza de ella.

Ella por su parte estaba petrificada y su reparación se había cortado de golpe, su corazón latía a una velocidad que ni ella creía que fuera normal.

Los dos se estaban mirando a los ojos y Ezarel lentamente se estaba acercando al rostro de ella, ya a unos escasos sentimetros la imagen de Nevra declarandose a Gardienne lo hicieron pararse en seco, eso no estaba bien, estuvo apunto de besar a la novia de su amigo.

Sus labios se dirigieron a la mejilla de la joven que seguía en transe y depósito un casto beso en ellos para después susurrar en su oído - gracias por la ayuda, puedes irte - se retiró inmediatamente de ella y se dio la vuelta apresurado dirigiéndose a la salida.

Antes de que saliera, Gardienne se armo de valor y detuvo a Ezarel - ¡Espera!... Quería saber si esta noche te gustaría ir a caminar conmigo, Nevra no está y no quiero estar sola, así que... Qué mejor que pasar tiempo con un amigo, ¿no? - le dedicó una amplia sonrisa al elfo que tenía el ceño fruncido y una mueca de disgusto.

-Está bien, paso por ti a tu habitación en eso de las nueve, sabes que no me gusta esperar así que se puntual- ella sonrió un poco más de lo emocionada que estaba.

-¡Gracias! Y sí, seré puntual - le guiñó un ojo y él con una sonrisa de lado salió de la habitación, ella por su parte se deslizó por la fría pared hasta chocar con el frío suelo, agarro sus piernas con ambas manos y escondió su cabeza entre ellas.

Eldarya [One-Shots] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora