37•°

2.5K 194 47
                                    

-Vamos Arely, tu puedes- Ykhar animaba a la pequeña chica a darle el regalo que tenia en sus manos a Ezarel.

El elfo estaba en la sala de alquimia contando el material que tenía, ellas desde un pequeño hueco de la puerta lo observaban, mas que nada Arely era la que lo observaba ya que se debatía mentalmente si darle el regalo o no.

-No lo se Ykhar, ¿y si se ríe de mi?, no quiero que todos se rían de mi de nuevo- Ykhar puso una de sus manos en el hombro de la chica para darle apoyo, las dos dejaron de ver a Ezarel

-Ezarel puede ser un cascarrabias, una persona muy sarcástica y malhumorada, pero si de algo estoy segura es que jamás se reiría de ti- Arely soltó una pequeña risa y sonrió

-Yo no estoy tan segura de eso- las dos rieron por lo bajo.

-Emm... ¿chicas?, saben que las escucho ¿no?- Ezarel abrió mas la puerta y se encontró de frente con las dos chicas, la cara de Arely se coloreó de un tono rojizo claro.

-¡Hola Ezarel!, ¿por casualidad no haz visto a Nevra?, lo estamos buscando- Ykhar fue la primera en hablar, y la tranquilidad con la que hablo impresionó a Arely.

Ezarel miró a las dos chicas que estaban frente a él, las dos tenían una cara de haber visto un fantasma, el elfo se cruzó de brazos.

-¿A nevra?, no, no le he visto- sin mas dio media vuelta y sin dejarlas decir algo más les cerró la puerta en la cara

-Maldito elfo- susurró Arely para ella misma.

-Tranquila, ya tendrás otra oportunidad- trató de darle ánimos a la chica lo cual no resultó mucho, Arely negó con la cabeza.

-No, mejor dejemos las cosas así- antes de dar un paso la puerta de la sala de alquimia se abrió, en un rápido movimiento Ezarel sacó una mano y adentró a la chica a la sala, dejando a Ykhar impresionada y completamente sola, la puerta se cerró y ella con una sonrisa en la cara se alejó del lugar.

Por su parte, Arely estaba recargada en la pared, Ezarel estaba frente a ella con los brazos cruzados.

-¿dejar las cosas así?, ¿A que te refieres?- ladeó la cabeza con una sonrisa en el rostro.

-¿Estabas escuchando?, ¿ sabias que el escuchar detrás de las puertas es una falta de respeto?, le diré a Miiko sobre tu comportamiento- se cruzó de brazos desafiando al elfo con la miríada, Ezarel dirigió su vista a la pequeña bolsa que traía Arely en una mano, sostenía una bolsa color azul claro de tela con un pequeño moño color dorado que mantenía cerrada la misma.

La miró curioso tratando de descifrar que podía contener aquella bolsa.

-¿Que miras elfo?- inquirió con una ceja alzada, después comprendió que estaba mirando el pequeño obsequio, lentamente escondió su mano con el obsequio mismo detrás de su espalda y su cara se coloreó de un tono rojizo.

-¿Que es eso?- preguntó el elfo con un sonrisa, Arely puso los ojos en blanco

-¿que puede ser tonto?, es una bolsa- lo dijo con un tono obvio y puso los ojos en blanco.

-Eso lo se, lista, lo que yo quiero saber es que contiene la bolsa- Arely sonrió y se acercó al elfo, Ezarel la miró con una ceja alzada.

-Adivina, si aciertas te daré lo que contiene- lo miró con una sonrisa inocente en el rostro

-No estoy para adivinar Arely, mejor dejemos los juegos de lado y acabemos con esto lo antes posible, tengo trabajo- la chica negó con la cabeza.

-No, si lo quieres tienes que adivinar lo que es- Ezarel con una mueca de fastidio siguió el juego de la chica.

Eldarya [One-Shots] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora