† Pigeon Attack | SeXing

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     ➝ Miedo: Palomas

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     ➝ Miedo: Palomas.

     ➝ Autor(a): csalve

     ➝ Género: Humor.

     ➝ Advertencias: No.

     ➝ Resumen: Es bueno que tus amigos conozcan tus miedos. Que los sepa Sehun, no lo es tanto.

     ➝ Palabras: 1,1K



PIGEON ATTACK.


Sol, la brisa del viento y los colores vibrantes del césped y el cielo que resplandecían ante la ausencia de nubes. Sin pretenderlo todos soltaron un suspiro de alivio ante aquel panorama. Luego de semanas de estrés por el trabajo y la universidad, un picnic en el parque los alegraba más que tres jarras de cerveza. En especial porque no tenían para pagar las cervezas a esta altura tan avanzada del mes.

La gente con style, como Suho y Kris, caminaron lentamente inspeccionando el lugar buscando el sitio apto para tirar la manta de picnic. Los anormales como Chanyeol, Baekhyun, Kai y Sehun comenzaron a correr por todo el lugar. Lay los seguía, tratando de adivinar cuál era la meta de esa carrera para así poner primera y pasarlos a todos. Kyungsoo venía último cargando una canasta con sándwiches y kimbap, una heladerita con bebidas para todos y una mochila con la manta y un botiquín por si alguno de los salvajes de sus amigos se hería o lastimaba a algún niño inocente.

Al final los salvajes terminaron llegando al pequeño espejo de agua al centro del parque y comenzaron a arrojarse agua, espantando a la familia de patos que pasaba por ahí.

—Ah, ¡me siento tan vivo!

—Recuérdenme que no vuelva a anotarme a seis materias— Suplicó Chanyeol a sus acompañantes

—Te lo recordaré con mi puño — le respondió Baekhyun agitando el puño para luego llevarse las manos detrás de la espalda como ahjussi con problemas de cadera —. Ahora dejemos de hablar de la U y comamos que ya me dio hambre.

Pasaron la tarde entre risas, protegiendo su almuerzo de los perros y patos que se acercaban a tomar lo que pudieran con sus hocicos y huir. Pasaron exitosamente dos horas en las que comieron, hablaron, bromearon y volvieron a comer sin que ningún animal les robara su comida. Claramente tenía que ser Lay el que rompiera la racha, muy distraído viendo como Sehun contaba acerca de sus prácticas de magisterio, era una presa fácil hasta para el cerebro de un pato, que tomó su sándwich de pollo y se fue a toda velocidad de vuelta al lago.

Todos se rieron de la cara de desconcierto de Lay cuando trató de comer su sándwich y terminó mordiendo su propia mano. Y rodaron por el piso cuando este muy afligido que no se rieran que él todavía tenía hambre.

—Es una pena Yixing porque ese era el último sándwich.

El chino se lamentaba y sobaba su pancita como si quisiera aliviar a la fiera hambrienta que habitaba en su estómago. Que le daba mil vueltas y lo hacía temblar, pero lo hacía sentir Yixing...

—Vamos

El chino levantó la cabeza y se encontró con la mano de Sehun frente a su rostro.

—Tengo algo de dinero. Te compraré un hot dog o algo.

Lay saltó emocionado y tomó a Sehun de la mano, arrastrándolo hacia el otro lado del parque dónde había una fuente enorme y a su alrededor carros de comida.

Lay se pidió un hot dog con mostaza, kétchup, mayonesa y salsa tártara con papitas pie encima. Era una monstruosidad de salsa que se escapaba entre los dos panes cayendo sobre el piso, su sudadera y uno de los tenis de Sehun.

El alto quería golpearle por sus preciados tenis, pero algo en la imagen del chino con la cara toda embarrada de salsas de muchos colores hizo cosas raras con su mente. Plus que recordó que sus tenis ya estaban sucios por los juegos en el lago. Pero eso no cambiaba nada.

Carraspeó tratando de alejar la incomodidad de su mente, pero esta se desplegó por el resto de su cuerpo la muy maldita. Para cagarla más todavía, Lay ya se había terminado su salchicha y ahora lamía sus dedos y trataba de limpiar la salsa alrededor de sus labios con la lengua.

Sehun presuroso tomó como seis servilletas del carro y se las tendió al chino con brusquedad. El alto no era de las demostraciones de afecto en público y mucho menos de esas cosas cursis de telenovelas de limpiar la boca del otro.

Incómodo revoleaba los ojos tratando de no ver la forma en que Lay se limpiaba. En uno de sus múltiples revoleos, descubrió a una familia alentando palomas a unos cinco metros de ellos y se le ocurrió una increíble idea para reciclar el exceso de energía en sus huevos.

Sehun fue corriendo y compró una bolsa de alimentos para palomas. Regresó caminando feliz, tarareando en su cabeza la canción One del chenbaekxi, hasta que vio a Suho presumiendo su inflada billetera con SU CHINO.

—¿Sigues con hambre Lay? ¿Quieres que te compre una hamburguesa?

Y aunque el plan original era tirar el alimento alrededor de Yixing, terminó por tirarlo entero sobre su cabeza atrayendo a un palomar que se abalanzó sobre esta.

Lay comenzó a correr por todos lados mientras gritaba incoherencias acerca de picos, garras y plumas, mientras que él más alto se descosía de la risa. En algún momento de la corrida al chino se le ocurrió que quizás las palomas le temieran al agua como las avispas y así se tiró de cabeza a la fuente. Sehun lloraba de la risa al ver la emoción de Lay al haberse deshecho de las aterradoras palomas. Él único que no parecía entender el chiste era Suho que lo fulminaba con la mirada.

—No es gracioso Sehun. — Suho se acercó a la fuente y ayudó a Lay a salir de esta tomándolo de los hombros con firmeza y lanzándole una mirada al menor de padre acusador. —¿No eres lo suficientemente adulto como para meterte con los miedos de los demás?

Sehun agachó la cabeza, repentinamente avergonzado por la expresión del mayor.

—No lo hagas sentir mal, Junmyeon—ah. —Lay sólo podía mirar sonriente a Sehun a través de la cortina de pelo mojado. —Si no me molestara no sería mi novio.

Y aprovechando que Sehun seguía apenado le clavó los dedos en el trasero, con su saludo separa nalgas chino—Zhang patentado. Y mientras el otro se sobaba le robó el sweater que llevaba sobre los hombros, se quitó su playera mojada y se lo puso.

—Vamos, todavía quiero un algodón de azúcar.

Y sin más se colgó del brazo de Sehun y juntos se fueron caminando hacia el carrito de dulces que había a medio camino del lago donde seguían sus amigos. Ignorando el trauma que podía causar a los niños y sus madrecitas el pantalón mojado de Lay que se pegaba y transparentaba su ausencia de calzones.



†Funny & Fluffy Fear † | RP#1 EXODonde viven las historias. Descúbrelo ahora