¿ MI MUSA?

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No se cuando es que el se percató de mi, tal vez cuando empecé a hacer ejercicio para ser mas bonita a su vista, o tal vez cuando pidieron una obra de un desnudó y le dije que seria  su modelo.

Siempre que iba,el era tan pudoroso como para prestarme una bata y dejarme cambiar en otro cuarto pero así no era mi plan, pues yo quería otra cosa mas que  solo que me mirara.

Desde  que vamos a la misma universidad, no eh podido dejar se verlo, de admirarlo y también de enamorarme cada vez más.

Cada día trataba de que perdiera el aliento y la razón para que me tomara, pero no funcionaba, aquel artista era difícil de descontrolar.

Pero hoy, no espere a que me guiara al cuarto pues llegue algo tarde para que no pusiera pretexto que había tiempo, y enfrente de sus ojos me quite la ropa poco a poco dejando que mirara y que me comiera con este simple hecho.

Esa noche pude notar su mirada, por primera vez sentía que era la que deseaba, caliente, impura y solo era para mi, algo que hizo mi cuerpo reaccionara, mis pechos tan sólo de imaginarlo se pusieron un poco duros, apretando mis piernas un poco mas de lo usual para que no se percatara que me estaba mojando.

Aquel ojos turquesa que me miraba con deseo,  lamia sus labios a cada momento para que no se secaran y como no mirar su pantalón que hacia notar su erección que estaba volviéndose pronunciada, hoy seria ese día.

Desgraciadamente después de un momento recibí la llamada de mi amiga que deseaba verme y aunque por dentro estaba más que furiosa, tan solo comencé a vestirme rápido, poniéndome la ropa que encontraba que bote al suelo; primero mi ropa inferior como mis bragas, mis medias y mi falda pero  mis pechos al estar  firmes no me percate que mi brasier  se me olvidaba, saliendo de ahí apenas y despidiéndome  bajando por el ascensor.

Mientras estaba esperando, me di cuenta de mi faltada prenda y Sonreí por lo menos eso haría que lo viera otra vez  y aún a consecuencia de llegar tarde y recibir un regaño de parte de mi amiga, para mi era mas importante cada segundo que estaba con aquel de ojos turquesa.

Sin percatarme ya estaba  regresando por las escaleras; el vivía hasta el 6 piso y al llegar entre con una llave que  me dio para esas veces que el salía a comprar su comida y yo llegaba antes.

El cuarto estaba solo y entre buscando a mi dulce pelirrojo, ¿acaso salio?

Algo curiosa por estar en el departamento ajeno comencé a ver todo, desde la forma de como tenia tan limpia su cocina, hasta el lugar cercano a su habitación donde me pintaba.

De repente escuche un sonido extraño del dormitorio de el, acercándome y quedándo impresionada por lo que veía.

Una sonrisa se formó en mis labios, ahora todo estaba claro, aquel pelirrojo no era el ángel que aparentaba ante ella

Sin ninguna clase de pudor lo miro cual joya que era, esos  músculos que eran remarcados por loa movimientos que hacia en  sus manos, aquellas expresiones que ponía eran la lujuria en vida, aquel miembro que jamás imaginó tan grande estaba tomando una erección más pronunciada, ella se estaba mojando con aquel espectáculo y mordiendo sus labios para no hacer un ruido que perdiera la concentración del joven

- marinette- .......

Escuchó la joven sorprendida; al parecer el estaba fantaseando con ella y eso no le molestaba, sintiendo como cada que repetía su nombre sus pechos se endurecían y ella los  masajeaba necesitada de atención, pensando en que eran las manos de aquel  hombre de cabellos rojos.

Pero algo hizo sonrojar a la joven y perder la concentración de lo que hacia; notó que el tenia aquel brasier que ella dejo, no sólo oliendolo si no también frotándolo entre su miembro, esto era nuevo para ella y aun sorprendida su cuerpo rogaba por atención y aun mas en su parte baja que estaba más que húmeda.

NOCHES ROJASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora