Algunos lo llaman amor... Otros piensan que es despecho, pero al final, una cosa es la que nos une sin importar las habladurías de la gente.
Pov marinetteAveces no entiendo como llegue a este lugar, pero la verdad era que me sentía sola como cualquier mujer ama de casa que pasa esmerándose por su esposo para que al final este jamas la atienda.
Arta de la rutina, de la soledad de la casa y de la frialdad que adquirió mi esposo tras los años, decidí por mi bien, tramitar el divorcio, algo que a el no le gusto, y que aun no me a firmado; pero aun así yo ya no podía volver con el, porque ahora algo hacia latir mi corazón.
-++ flash back+----+++
Entre telas finas y de color negro con toques rojos, cuadros de buen gusto y un decorado excelente, fui a meterme a eso que algunos tachan de inmoral, un burdel pero diferente a otros, pues este era para mujeres.
Entre tantos jóvenes galanes y especiales estaba la estrella de este lugar, un joven de cabello rojizo y ojos turquesa que se movía en el escenario siendo codiciada por todas a su alrededor.
Al verlo, el noto mi presencia y sonrió, dejandome en claro a donde ir, saliendo y pasando a las habitaciones, llegando a la mas arrinconada de aquel lugar que desbordaba placer.
Cuando lo vi entrar, no pude decir nada al ver como se me abalanzaba de inmediato comiendo mis labios, sabiendo como me encantaba que me los mordiera, soltando el primer suspiro.
-- nathaniel..- susurré algo melosa y acariciando aquellos pectorales que me hacían pecar
- ahora no mi bella musa, solo dejate llevar- susurro el pelirrojo mientras me acostaba suavemente en la cama
Sabia donde tocarme, aquellas manos comenzaron a quemar mi piel una vez que se metieron por el vestido que traia, tatuándose como marcas de aquel joven que hacia sentir a mi cuerpo amado.
No podía dejar de soltar suspiros con sus caricias que comenzaron a ser mas calientes poco apoco, con aquellos besos que arrastro hasta mi cuello dejandome ciertas marcas pequeñas que podía esconder con mi cabello, pero no obstante con eso, lamia este como si fuera un caramelo con aquella lengua que me hacia humedecer en las noches que pasaba lejos de su lado.
Tocando con sus manos mi cuerpo hasta hacerme delirar, quitándome aquel vestido caro que no me servía para nada, dejándome con aquella lencería negra con encajes finos, notando su mirada de deseo que el sentía por mi
-¿te gusto?- susurré suave y algo intimidada, sabiendo que la respuesta que quería oír no iba a ser dicha.
- mas de lo que te imaginas- susurro el de ojos turquesa acercándose a mis labios - ahora no pienses y deja que mi cuerpo te diga lo que siento.
Ante aquella respuesta no pude evitar sonreír y dejarme llevar por aquel joven que apenas y conocía hace unos meses.
Sintiendo ahora su boca encima de mi brasier que comenzaba a lamer de ambos lados haciendo a que soltara un quejido agudo, notandose mis pezones que comenzaban a sobresalir.
- nath... Se siente bien- susurré suave mientras me acomodaba para acariciar sus finos cabellos apasionadamente.
Pov narrador
La azabache comenzó a enloquecer con el tacto de aquel pelirrojo que no hacia mas que hacerla gozar como nunca a cada momento.
Sin mas bajándole el brasier y comenzando a lamer uno de sus dos pechos mientras que su mano acariciaba el otro haciéndola gemir como la diosa que era para el, acurrucandose en esos finos pechos que eran devorados uno tras otro de forma consecutiva.
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NOCHES ROJAS
Randomhola a todos de nuevo !! me presentó con pequeñas historias sobre dos personajes que amo que son marinette y nathaniel de la serie prodigiosa las aventuras de laidybug y bueno que tiene de diferente estas historias? pues bien serán pequeñas histori...