Me acerque con cautela para sentarme en las piernas de Stefen minutos antes de robarle un beso, o al menos intentarlo pues el retiro su cara-
—¿Qué haces America? –digo con una cara de fastidio a la par que movía los papeles para que no se arrugaran-
—Pasar un rato con mi prometido ¿acaso está mal?
—Estoy ocupado
—Stefen ¿Qué pasa? –susurro con dulzura, quiero hacerlo sentir mejor nunca lo había visto tan nervioso y eso me preocupa-
—Pasa que tengo trabajo ¿es que no lo ves? –espeto molesto y yo lo mire con los ojos muy abiertos, él nunca me había hablado de esta manera y admito que no me gusta-
—Entonces déjame ayudarte
—No deseo tu ayuda America, solo quiero estar solo –yo me levanto-
—Sabes, el que sea tu prometida no te da el derecho a tratarme mal, si quieres estar solo perfecto, con decir eso bastaba –le digo dolida-
—Tratarte mal .... –susurra casi para si mismo, se le ve arrepentido-
—Iré a leer
—No, ángel espera –se acerca y toma mi mano- lo lamento, no quería lastimarte mi amor ¿me perdonas?
—Lo se Stef, y claro que te perdono –el suspira aliviado- te veo estresado y eso me preocupa
—No es nada solo aun no me acostumbro a que accederé al trono en unos pocos meses
—Cuentas conmigo para lo que necesites ¿Lo sabes cierto?
—Lo se ángel pero yo solo quiero adorarte y consentirte, no darte trabajo y preocupaciones
—Es parte del paquete, no hay relación sin peleas ni contratiempos
—¿Cómo eres tan sabia? –yo rio y lo abrazo-
—Solo observo mi amor, comprendo que no siempre estaremos juntos ni riendo pero no quiero que te cargues demasiado de trabajo y si puedo ayudar en algo así lo hare
—Sin discusión ¿no?
—Nop, eso está decidido, claro...si estás de acuerdo
—Más que de acuerdo ángel –beso mi nariz- ¿Te he dicho alguna vez cuanto te amo?
—Si...pero me gusta escucharlo –bromeo-
********
—Despierta ángel mío
—No –me quejo y escucho su risa-
—Cariño, ya llegamos a Suiza –besa mi frente y yo sonrió sin abrir los ojos- ¿Quieres que te cargue?
—No –rio leve- peso demasiado cielo –abro los ojos y me estiro- ¿dormí demasiado?
—En realidad no –me levanto y lo abrazo- ¿Lista?
—Solo es trabajo ¿no?
—Sí, pero ya comenzaron a llegar los invitados para mañana
—Bien, habrá que hacer sociales –reímos pero su risa no es sincera- ¿Qué ocurre?
—Debo ir ya mismo a trabajar
—Iré contigo
—Preferiría que no cielo, no dudo de tus conocimientos pero es realmente aburrido y no tan importante, lo relevante pasara después de la fiesta
—De acuerdo –digo con un mohín-
—Adoro que hagas eso –sonríe-
—¿Por qué me veo tan tierna?
—Aja, y porque puedo hacer esto –me roba un beso-
—Tramposo
—Hermosa
—Guapo
—Sexy
—Yo no soy sexy –me quejo entre risas-
—Es verdad, eres la mujer más sexy de todo el mundo
—¿Del mundo mundial? –bromeo-
—Tu si sabes lindura –vuelve a besarme antes de agarrar mi mano para bajar juntos del avión.
********
Después de presentarnos con el presidente suizo y decirnos cuan encantado con nuestra llegada se encuentra y cuan triste esta por la pronta muerte de su esposa decide mostrarnos nuestras habitaciones, la mía esta junto a la de Stefen y me encanta aunque a la vez me hace sentir presionada porque le pedí a Stef no hace nada de nada hasta después de la boda, nunca he estado con nadie y quiero que mi primera vez sea especial.
Luego de dejar mis cosas sobre la camino salgo decidida a encontrar la biblioteca pero después de perderme cada vez más busco alguna puerta para salir al jardín pero nada, todas me llevan a alguna habitación y termino en el lugar contrario a donde quisiera, el salón principal, veo a algunas mujeres y supongo serán invitadas de mañana,
—¿America? –no puede ser, me volteo rápidamente y ahí está, Maxon Schreave mirándome con una sonrisa que derrite mis entrañas-
—Maxon –susurro y me acerco un poco sin saber porque- no sabía que vendrías –miento-
—Desearía decir lo mismo pero no- ¿Qué?- ¿Has venido sola?
—No, vine con mi prometido ¿y tú?
—No, Kriss está platicando con alguna joven, ¿Dónde está tu prometido?
—Trabajando
—Qué responsable, y ¿lo amas mucho?
—Pues no estas para escucharlo ni yo para decirlo, pero si, lo amo más que a nadie –digo haciendo énfasis en ello-
—Me alegro –espeta molesto-
—Oh por Dios ¡Maxon! Que gusto –esa voz chillona de nuevo, ¿Por qué a mí?-
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Y si algo fuera diferente?
أدب الهواة¿Que pasaría si los rebeldes no hubieran atacado a palacio? ¿Qué pasaría pasado si Maxon no hubiera recapacitado? Maxon se habría casado con Kriss y America hubiera vuelto a su casa con una nueva casta pero el corazón roto. Ella tendrá que rec...