La campana castigada. La catedral de Santiago es uno de los orgullos de Saltillo, esta catedral fue construida en el siglo XVII, en su época fue edificio que se hacía imponer por su belleza.
La leyenda cuenta que una de las campanas de esta catedral fue castigada por el sacerdote que ocupaba la iglesia, esto ocurrió una mañana cuando dos monaguillos subieron a lo alto de la torre a tocar las campanas para llamar a los habitantes a misa, pero cuando uno de los monaguillos tocaba la campana, esta golpeo al otro monaguillo y este de inmediato cayó muerto. El sacerdote que ocupaba la catedral subió hasta donde se encontraba la campana, hay el sacerdote decidió removerle su badajo de la campana para que esta no volver a tocar nunca más y así fue durante muchos años, hasta que un hombre se atrevió a subir la torre y hacer tocar la campana con un badajo de otra campana, al hacerlo no se escuchó el sonido común de una campana, sino un ruido algo extraño el cual se entendía que era un sonido de tristeza. Muchos dicen que esta era la tristeza de la campana por haber sido privada de su badajo y haber quedado en silencio.
