Capitulo 5: confiaste en mí

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- ¿Sobre que?-pregunte confundida.

-Stephen quiere matarte.

-No puede-digo segura.

-Busca la forma.

-No puede, ni siquiera yo he podido descifrarlo. Debe buscar una bruja lo suficiente buena e inteligente para eso.

Me mira dudoso.

-Tal vez no, pero puede atraparte.

-¿Por qué te preocupa? Yo no me preocupo por ello, no hay nada que pueda hacerme que no haya sufrido-respondo con una sonrisa de lado.

-Vale, está bien. ¿Cuál es el plan?

-Borrarle la memoria, Fácil.

- ¡¿Que?! No puedes, Es mi hermano.

-Un hermano que sabe cosas que no debería saber.

Max se queda pensativo.

-No debes, sería otro...

-¿Me contaras?-indago e intento averiguar más.

-Perdóname Julieta, pero no puedo.

-Entonces te pido de la manera más amable que te vayas y olvides que existo por que si no, te borrare la memoria o voy a cambiar tus recuerdos.

-No me harías eso.

Suelto una risa.

- ¿Por qué crees eso? Te conozco hace apenas días.

-Lo hubieras hecho en el momento que te conocí.

-Ajá... ya te puedes ir-desvío la mirada.

-No-niega.

- ¡Que te vayas!-grito exasperada.

-Me voy pero regresaré.

Se levanta y sale de la pieza, cuando veo que cierra la puerta me voy a la ducha. Cierro los ojos disfrutando el agua caer por mi cuerpo, abro los ojos y veo sangre caer. Me sobresaltó y sigue cayendo.

No por favor.

Que no sea lo que imagino.
Me acerco a tomar el agua y efectivamente:

Volvieron.

Salgo de la ducha cautelosamente, estoy alerta por si intentan atacarme.
Me pongo ropa y tomo mi mochila.

-No debe preocuparme-me digo a mí misma.

Al salir, respiro hondo y camino hacia la universidad. Ahora más que nada necesito mi amuleto, llego y todos se me quedan viendo ¿que tengo? ¿Nunca habían visto un cabello así?
Me apresuro a buscar a Emily, buscaba pasillo a pasillo, cuando la veo tomó su brazo y ella forcejea.

- ¡Suéltame!

-Cállate, me debes una.

Salimos de las instalaciones y bebo un poco de su sangre para que esté inconsciente, la llevo a un sótano abandonado, espero a que despierte pacientemente, después de dos horas ella va entreabriendo los ojos.

- ¡¿Que me hiciste?!-pasa la mano por su cuello goteando de sangre.

-Vas a hacerme un amuleto, ¿está claro?

- ¡No!-niega.

-Ay, no seas tonta-me siento en una silla.

-Stephen vendrá por mí.

-Me tiene sin cuidado, tu maldito Stephen.

Se da cuenta que esta encadenada.

-Como verás, hay un hechizo de no localización aquí, que ni tú ni otra bruja pueden deshacer, así que yo te doy las indicaciones de cómo hacer el amuleto y te vas a los brazos de tu amado. Fácil ¿no?

Ella me mira con odio y baja la mirada.

-Ahora vas a poner tus manos entrecerrándolas y vas a hacer este hechizo, sé que es algo difícil, me tomó 20 años en aprender ese idioma, yo lo voy a decir primero y tú después ¿Entendido?

-No-niega.

Su celular comienza a sonar, no me di cuenta de eso, ella rápidamente va a tomarlo pero le gano.

- ¿Diga?

-Deja en paz a Emily-exige Stephen del otro lado de la línea.

-¿Qué te hace creer que haré eso?-cuestiono algo divertida.

-Le quieres hacer daño por que llegaste a confiar en mí y te falle, cosa que ella tiene, toda mi confianza-dice, y suspira al final.

Cuelgo y la observo con una sonrisa, definitivamente me voy a divertir.

Madelina: Una condena por siempre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora