Crónicas Piratas. La historia que nadie supo...

Capítulo 13. Pérdida.

Nota autora: Fiiuuu... Perdón por la tardanza al subir cap T_T. Este cap ya vuelve a narrarlo Nick. A mayores, voy a subir otro capítulo para igualar a mi otra cuenta y que esta vaya a la par que la otra. Desde la última vez que he "uploadeado", Ace Attorney sigue sin pertenecerme, es de Capcom. Muchísimas gracias por leer, (decir esto es algo de lo que nunca me cansaré de decir/escribir), y un saludo, LPP.

Cuando terminamos de hacer los recados, Iris y yo regresamos al Saint-Várune. La verdad es que gracias a la charla que habíamos tenido, conseguí tener las ideas más claras.

A los pocos minutos de nuestra llegada al barco, la capitana hizo acto de presencia. No parecía la misma de siempre, parecía estar perdida en sus pensamientos, preocupada por algo. No recordaba haberla visto así nunca. Me acerqué a ella, quería saber qué era lo que le preocupaba.

-Ey, Maya. Conseguimos hacer el encargo que nos pediste-traté de dar pie a una conversación.

-Sí, ya he visto el carro con la madera y los obreros abajo-decía señalando el muelle.

-Ah, claro, claro-me rasqué la nuca avergonzado.- ¿Y qué tal estás?

-¿Yo? Bien y veo que tú también estás bien-me miró esperando que dijese algo.

-... Claro...

-Estás más callado de lo habitual, ¿te ha comido la lengua el gato?-preguntó con una sonrisa.

(Eso debería de estar diciéndotelo yo...)

-Qué va... Es solo que... bueno, da igual...

-Por cierto, ¿dónde está Pearly? No la he visto cerca de ti y me parece extraño cuando su trabajo era estar a tu lado...

-¿Pearls? ¡Cierto! Tras terminar de hacer lo que nos habías mandado, me dijo que aún tenía que hacer un último recado.

-¿Un recado?-repitió.

-Sí, algo que le habías pedido tú.

-Yo no le había pedido nada.

-¿Qué? ¿Entonces...

-¿A dónde se ha ido?-se alarmó al instante al saber que la pequeña aún no había vuelto al barco.

-Voy a buscarla, ha sido todo culpa mía-me estaba poniendo nervioso. No tenía que haberla dejado sola.

-Yo también voy, es mi primita al fin y al cabo-me siguió bajando a tierra firme.

(Ay no, ay no... ¿Dónde se puede haber metido?)

Nos separamos para así cubrir mayor terreno. El sol ya se estaba ocultando, cada vez me preocupaba más. Si bien era una niña bastante fuerte, aún era muy pequeña como para estar sola. Corría con todas mis fuerzas por aquellas calles, tenía que encontrarla. Había sido culpa mía.

(¿Por qué tendría que haberla dejado? ¿Por qué tendría que haberla dejado?)

Al cabo de un rato, me reencontré con Maya en la plaza del pueblo. Nada, ninguno de nosotros habíamos dado con ella.

-He preguntado a toda la gente, pero nadie parece haberla visto-decía Maya al borde de un ataque.

-Yo tampoco.

(Venga Phoenix, piensa)

-Si al menos pudiese saber a dónde quería ir...-murmuraba Maya pensando en dónde podría estar.

-A donde quería... ¡Ya lo tengo!-mi cara se iluminó cuando di con la respuesta.

-¿Sabes dónde está?