Todo estaba bien.
Mi vida era "normal"
O bueno,
Era una vida llena de mentiras.
Hasta que simplemente pasó.
Todo cambio.
Mi vida se convirtió en una experiencia sobrenatural sin sentido.
Y entonces yo cambie,
Personas murieron,
Otras salieron herid...
Imágenes borrosas aparecían en mi cabeza, podía ver un lugar, no sabía exactamente donde era hasta que varías voces comenzaron a susurrarlo, era un banco abandonado.
Después vi a dos chicos, un chico afroamericano y una chica rubia. Después 2 nombres.
Erika y Boyd. Erika y Boyd. Erika y Boyd. Erika y Boyd.
Se repetían miles y miles de veces, después comencé a escuchar gritos y gritos, muchas voces hablando a la vez. La desesperación me consumía como si no pudiera respirar, todas las imágenes eran aspiradas por alguna fuerza cansada, mi visión se volvía cada vez más oscura, no podía moverme, quería salir. Salir de donde sea que me encontrara, resistir no era fácil.
Grité, no sabría aguantar más. Pero mis gritos eran inaudibles, como si estuviera en el fondo del mar y atrapada en lo que fuera.
No iba a resistir. No iba a resistir. No podría.
Me senté de golpe --afortunadamente-- en mi cama, tomé un muy profundo respiro, jadeé... me costaba tranquilizarme, las lágrimas no querían parar de salir, me retorcía en las sábanas como si intentara salir de aquel trance.
--¡Cálmate Hailey! --gritó mi padre entrando a mi habitación--. ¡¿Dios mío, qué te sucede?!
Me sostuvo de los brazos, intentando tranquilizarme. Me di cuenta de que hasta ese preciso momento dejé de gritar y lagrimear.
--¡¿Qué demonios te pasa?! --cuestionó él mientras me acercaba para abrazarme. Me sostuve a él fuertemente y sollozaba, me sentía un poco pequeña cuando me abrazaba así, me recordaba cuando corría a su habitación en las noches y me acurrucaba entre él y mamá aún llorando; esa memoria me hizo sonreír un poco y soltarme más...
Nos quedamos así un rato, hasta que el sol ya empezaba a asomarse.
--Papá --dije con la voz un poco ronca--, debo de prepararme ya...
--Claro... --me besó en la cabeza y se fue a preparar el desayuno, no habló el resto de la mañana, ni una sola palabra.
Salí de casa con mi mochila en mano y la mirada perdida. ¿Por qué había tenido ese sueño?, ¿Y por qué era tan importante?; esas preguntas pasaban por mi cabeza una y otra vez. Después de unas cuantas cuadras más, por fin llegue a la preparatoria.
Camine aun con la mirada perdida hacía mi casillero, lo abrí y comencé a sacar lo que ocuparía las primeras 4 clases, estaba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta cuando Stiles y Scott comenzaron a hablarme.
--¿Hailey?, ¿Te encuentras bien?. --di un salto cuando Stiles toco mi hombro.
--¿Q-qué? --Mi oído comenzó a agudizarse, haciendo que los pequeños ruidos fueran mas estruendosos; Tape mis oídos y cerré mis ojos con fuerza, tratando de no soltar otro grito. Después de unos momentos los ruidos cesaron, destape mis oídos, voltee hacía Scott y Stiles, quienes me miraban preocupados.--Yo, yo tengo que ir con Violet. --Comencé a correr escaleras abajo, buscando a la chica ojiazul.
--Lovelis, ¡Por dios!, ¡Estas muy pálida!. ¿Qué te pasó? --tome su brazo y la estire hacía la cancha de Lacrosse.
--Okey, en la noche tuve un sueño muy raro. --Hable mientras jadeaba.
--¿Qué soñaste?... --Violet puso su mano sobre mi frente, la cual estaba helada.
--Fueron imágenes borrosas, pero supe donde era, el Banco de Beacon Hills. --Poco a poco me fui calmando, y volviendo a mi palidez normal.
--Ese banco esta cerrado desde hace más de 3 años.-- Mi amiga me miraba más que confundida.
--Y no solo fue eso, eran dos chicos. Uno afroamericano y una chica rubia, después escuche dos nombres, Erika y Boyd.
Violet me miro preocupada, su mirada era diferente, una de miedo y terror.
--Hailey ve a clases... --Vio hacía una dirección y devolvió su mirada hacía mi.
--¿Por qué?, quiero que me ayudes a descubrir de que se trata esto, y todavía no he acabado; después desperté gritando y llorando, y antes de buscarte comencé a escuchar muy fuerte los pequeños sonidos. -- Me miraba enojada y a la vez confundida.
--Hailey, solo ve a clase. --Me saco la vuelta y se fue de la cancha.
Stiles:
--¿Qué están diciendo? -- Le pregunte a Scott, quien escuchaba la conversación de Violet y Hailey.
--Ella tubo un sueño... -- Rodee los ojos al pensar la tonteria que estuviera escuchando.
--¿En serio?, ¿Es todo?, ¿Por esto vinimos hasta aqui a escucharlas?... --bufe y estire a Scott del brazo.
--Callate Stiles, no fue cualquier sueño. --Lo mire confundido, ¿A qué se refería?.
--¿De que hablas? --
--Tenemos que ir a ver a Deaton
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