Dulce aroma
Tenía que hacerlo...
Ordene a Rubén y a Alejandro que llevarán a Luzu y a Samuel a donde pertenecían. Si se quedaban más tiempo, seguramente Miguel y Frank los mataría, o incluso algo peor.
Se que son testigos de que soy un asesino. Pero lo tengo todo controlado. Samuel y Luzu ahora son míos, y nadie lo podrá evitar.
Cuando los dos regresaron, les di las gracias y se retiraron.
Frank entró a mi habitación, no quería hablar con él. Estaba enfadado, por su principal culpa tuve que dejar ir a Samuel, su sangre olía deliciosa...-¿Guille?- lo ignore.
Fui a un armario, lo abrí y tomé el bajo que se hallaba adentro. Fui a mi cama y me senté en ella, comencé a afinar mi bajo. Oi pasos acercándose a mi.
-Guille por favor...-
-¿Sabes lo que en verdad era Samuel?- dije sin mirarlo, aún afinando mi bajo.
-Si... Pe...-
-No. Frank. Deje ir una gran oportunidad. Sólo por que tu tienes ganas de matarlo. Creí que te gustaba Alejandro...-dije interrumpiendo.
Lo mire fijamente.
-L-LO siento...- bajo la mirada.
-Vete de mi vista. No quiero verte ni hablar contigo.-
El hizo una reverencia hacia mi.
-Perdone. Señor Díaz.- y salió de la habitación.
Odio ser el Señor Díaz, pero a veces es necesario, para que la gente me tomé enserio.
Por unos minutos, extrañaba a Samuel. Suspire. Poder respirar el dulce olor de su sangre. Rubén entró a la habitación.
-Señor. Su padre pide que baje a cenar.- lo mire.
Deje ni bajo a un lado, y baje de mi cama
-Si. Ahora voy.- Rubén asintió y salio de la habitación.
A los pocos segundos baje para cenar. Por suerte, Miguel no estaba ahí, y su plato no tenía comida. Se me dibujo una sonrisa en mi rostro. Mi padre lo noto y ne miró.
-¿Ahora que te pasa?- dijo alzando una ceja.
-Hm. Nada.- dije aún sonriendo.
Comenzamos la cena. Como siempre silenciosa. Pero en mi mente, aparecían los deseos más preciados de Samuel, y uno de ellos, me inquieta van y me ponía la piel de gallina.
-¿Guillermo?- escuche llamarme mi padre.
-¿Si?- dije sin mirarlo.
-¿En que piensas?- lo mire
-En unos deseos padre.- me miró curioso.
-¿Que clase de deseos?- hice una mueca.
Odio cuando utiliza mi promesa para que le diga lo que sea.
-En una... Que, es la vida eterna padre.- me miró preocupado.
-¿Y se lo vas a cumplir?-
-No. O bueno, si estuviera vivo si.- mi padre se sobresalto.
-¿Como?-
-El hijo. El hijo tiene ese deseo, pero, el deseo es el de su padre, no el de él.-
Mi padre se quedó callado, y así estuvo toda la cena, en completo silencio.
Subí a mi habitación. Rubén entró a mi Habitación.
-Hola señor. ¿Necesita algo?- lo mire
-No. Gracias Rubén...- me sentía un poco melancólico.
-¿Esta bien?- sonreí con un poco de esfuerzo.
-Si... Sólo. Quiero estar solo.-
El suspiro y se fue. Me sentía tan... Deprimido. Hacia tiempo que no miraba atrás, que no recordaba a los muertos, que no recordaba mi pasado.
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Nuevo!!!!!
Apoyais está historia, os vigilo siempre 0.0
Los quiere TheSomejuma y nos vemos en la próxima chachao :3
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"VIDA ETERNA" FANFIC-WIGETTA
FanfictionLa vida eterna no es un regalo... es una tortura... Ver cómo mueren, cada uno de tus seres queridos... Repetir lo mismo una y otra vez. No quisieras tener esta tortura...