"La ultima vez que tuve una reunión con Dromocket me confeso que El diablo lo había buscado, quería acabar con todos nuestros negocios. Pero eso no fue lo que sorprendió" empieza Santiago, yo estoy tratando de no concentrarme en el buen sexo que ese hombre italiano me dio, y que aunque fue por compromiso, me gusto mucho "Lo mas sorprendente fue la cantidad de armas que le compro después del rechazo a la oferta. Esto me alarmo, y creo que lo mejor seria salir por un tiempo del negocio, y cuando llego ese cargamento tan raro supe que era el momento de fingir la muerte, para dejar que las aguas se calmaran y ya después volver con todo " dice sin dar muchas exclusivas, respira profundamente, se que aquí va la confesión que mas trabajo le costara "sin embargo, no contaba con que.... con que"
"Santiago penso que me iba a arrastrar entre los rincones estos años, y no iba a meterme en esto. Santiago no contó con que iba a mejorar y expandir el negocio" Santiago rueda los ojos, pero no lo niega, pues sabe que es la verdad "Y ahora su plan perfecto se fue a la basura y tenemos que crear uno nuevo"
"En fin" trata de romper el silencio el Gato "¿cuál es el nuevo plan" Santiago suspira y me deja de ver para volver a vr al frente
"Ustedes sigan, y no vayan a decir que estoy vivo, voy a trabajar con ustedes, pero de lejos. El propósito principal es que yo sea el arma secreta cuando necesitemos deshacernos de el, al final, el jamas me va a matar"
"¿Cómo está tan seguro jefe? Si ya lo intento"
"No lo hizo, de hecho, el me llevo al hospital" Santiago mira a un punto fijo, y tengo la necesidad de tomarle la mano para darle mi apoyo, y aunque s que me voy a arrepentir, lo hago. El me voltea a ver sorprendido, pero después me da una sonrisa sincera y no suelta la mano, un gesto que me incomoda, porque me vuelvo a sentir vulnerable "Es tan cobarde, no me podría matar de verdad"
"Algo tiene de razón Santiago" me muevo hacia adelante como excusa para soltarme de el, me cuesta trabajo por su fuerte garra, pero al final lo logro "desde que no has estado, el diablo se ha vuelto un pobre hombre, triste y encorajado consigo mismo"
"eso es cierto" dice Lalo "Pues yo en lo que pueda ayu..."
"Tu mantenete alejado de mi chica" interrumpe Santiago "es en lo que mas puedes ayudar, porque si no tendré dos muertes pendientes, no solo la del Diablo, ¿entendiste?" Lalo asiente aterrorizado. Volteo y fulmino con la mirada a Santiago para después decir
"Lalo, necesito que revisemos esa carga que viene de Marruecos" me siento y abro la computadora "ah, y también Iñaqui me dijo que el dinero ya estaba transferido y limpio, mañana pasen por mi oficina a las 11 de la mañana para que le pueda dar el dinero"
"Reina, el cargamento ha pasado sin ningún impedimento, está en la Panama, en aproximadamente dos días ya estará aquí distribuida y lista para vender"
"Perfecto. Ratas, ya hiciste lo que te encargué"
"Si reina, ya todos están muertos" dice con una sonrisa radica. Volteo los ojos por su humor
"Gracias muchachos, ya se pueden retirar" todos se paran o estoy a punto de hacer lo mismo, cuando siento un apretón en el hombre
"No podemos seguir así mi reina, tenemos que hablar" yo suspiro y veo Pote que me esta esperando en la puerta
"Pote, dile Vitaminas que acompañe a los chicos, tu espérame afuera, que mi socio y yo tenemos que discutir unas cosas" trato de molestar a Santiago, pero obvio que hablo con Pote
"Si Reina" dice con esa sonrisa que aunque respetuosa, burlona "oh, y Jessica" se acerca para susurrar en el oído aun con esa sonrisa que molestaría a cualquiera "trata de no ensuciar la mesa" Suelto una carcajada y ruedo los ojos "permiso" dice retirándose
"Cierra la puerta" digo aun riéndome, el chifla y la cierra después de salir. Sigo riéndome de nuestros chistes hasta que siento una mano en la parte baja de mi espalda. volteo tratando de enojarme, aunque en el fondo se que ese y mas gestos me gustan.
"Ya estamos solos, ¿Qué es lo que necesitas?" Trató de sonar lo más seria que puedo, aunque el y yo sabemos que lo único que quiero es hundirme en mis brazos, pero no puedo, tengo que tener un poco de dignidad.
"Jess yo ya te dije todo, pero tú nunca me hablaste de lo que sentiste" suspire y trate de hacerme la desentendida
"No entiendo de que hablas, tuve que hacer muchas cosas tomar las riendas del negocio y pues estuvo pesado..." quería guiar esta conversación hacia otro lado pero el no me dejo
"Me refiero a lo que sentiste hacia mi cuando fingí mi muerte" yo estaba de espaldas a el, con una silla en su camino. Con cuidado quito las silla y me tomo la mano. Me volteo lentamente y me tomo de la barbilla para que lo viera a los ojos "dímelo princesa" me solté con fuerza de el y empecé a hablar
"¡¿Que como me sentí?! Pues de la chingada Santiago. Sentía mi vida vacía sin ti. Eras mi vida entera y sentí que te arrebataron de mis brazos, llore patalee y maldije a todo el mundo y me escondí en el trabajo, porque no podía y no quería acordarme de ti. Porque sabía que si lo hacía en ese momento la pequeña cordura que tenía se iba a acabar. Y después llegas tú, con esa cara bonita Fresca y como si nada, no se vale" respire
Profundamente para continuar "Santiago, te amo pero me rompiste el corazón, y no sé si podamos volver a ser como antes"
"Vamos a ser como antes nena, te lo prometo, te voy a volver a conquistar y me vas a volver a amar"
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La Reina De La Mafia
RomanceLo pasado no me mató, más me hizo más fuerte y me ayudó para convertirme en la mejor y la única Reina