《 We are only friends.》

05.

-¿Que escucharon? -preguntó Nathan en un hilo de voz. Yo estaba conteniendo las lágrimas, no iba a permitirme mostrarme débil de esta manera, no soy así, no.

-¿Que escuchamos? ¡Que ustedes dos van a ser padres, par de tontos! -grito la señora Cawley con el rostro rojo y sus facciones tensas.- ¿Que tu no tienes novia, Nathan?

-¡Mamá basta!

-Creí que Jeffrey era una buena chica pero al parecer resultó ser una cualquiera.-dijo la señora Cawley mirándome con asco.

-Dove...

-No, ya basta, intenté contarles pero si van a insultar a Jeff entonces me largo, vamos niña.-dijo Nathan tomando mi muñeca con fuerza y arrastrandome a su habitación.

Gire a ver a los padres de Nathan y el señor Cawley me miró con disculpas.

Nathan abrió la puerta de su habitación y prácticamente me lanzo al interior antes de cerrar la puerta detrás de el. Me lleve las manos a la cabeza, mirando su habitación. Había venido aquí millones de veces, sus padres confiaban en nosotros porque sabían que entre nosotros no había nada, pero ahora estamos en su habitación mientras el golpea la pared mientras gritaba maldiciones.

-Nos metimos en un jodido problema..-murmuró Nathan recargado en la pared, me dediqué a mirar su espalda, me alegro de haberle dicho que se metiera al gimnasio hace 3 años, le ah dado una buena forma a su cuerpo.

-Nathan..

-No, Jeffrey, nos metimos en un problema grande, mamá te odia ahora, no estamos listos para ser padres, somos tan idiotas..-dijo dandome la cara, frunci las cejas y abrí la boca para decir algo.

-¿Y que vamos a hacer entonces? -pregunté un tanto molesta.

-No lo se, ¿cuánto tiempo tienes de embarazo?

-2 meses y medio, ¿porque? -dije sentandome en la cama. Nathan camino hacia mi y trato de sonreír, tomó mi barbilla y acercó nuestros rostros.

-Hablaremos con los chicos cuando el embarazo se empiece a notar..-susurro mirándome a los ojos, de pronto toda oración con sentido se me borró de la menta y me encontraba sin nada que decir.- Mientras, vamos a guardar este secreto, ¿okey?

-Nathan, ¿te das cuenta? Es probable que te quedes sin pareja, sin amigos, sin nada, estamos perdidos..-susurre entrando en una crisis nerviosa.

-Shhh..-me calló sosteniendo mi mirada.- nada de eso, eres mi mejor amiga, y si te tengo tengo a ti nada me pondrá más feliz..-dijo contra mi rostro.

-Tu más que nadie sabe que no es asi, mi querido Nathan Cawley, te mueres por Eimy y si ella te deja estarás gritando, siendo brusco y diciendo 'No la necesito' -dije imitando su voz varonil y este rodó los ojos.- Te conozco, la necesitas..

-¡Callate niña que conoce perfectamente todo de mi! -grito poniéndose de pie y mirándome molesto.- Cierra la puta boca, cierra la maldita boca, ¿porque no cerraste las piernas cuando debiste?

Entonces, me quedé callada, por primera vez no tenía respuesta para eso, mi mente estaba en una gran disputa sobre que debía hacer, irme o gritarle de vuelta, decidí sólo levantarme y caminar a la salida.
El silencio se estaba apoderando de mi, el dolor golpeaba mi corazón y un vacío se sentó en mi pecho, por un momento se me olvidó las náuseas, se me olvidó que vomite toda una semana, que estaba presentando los síntomas comunes de un embarazo. Tome la perilla y la gire dandome paso al exterior, se que Nathan esta gritandome para que regrese, pero no me detengo, no quiero escuchar otra palabra de su parte, sólo quiero irme. Eh llegado a las escaleras, mis piernas se sienten débiles, sin embargo no tengo miedo de bajarlas, voy poco a poco hasta llegar al primer piso, una lágrima resbaló rápidamente hasta llegar a mi barbilla, otras 2 la siguen por el mismo camino y no me molesto en secarlas, trato de esconder mi rostro cuando me encuentro cerca del señor y la señora Cawley, se que no funcionará, sin embargo lo intento.