Namjoonnie♡ [DADDY KINK]》NAMJIN

Capítulo 03

El auto iba tan silencioso que se podía escuchar a la parfección las tres respiraciones. Namjoon a pequeños ratos miraba al concentrado Seokjin, el pelirosado miraba por la ventana mientras golpeteaba con sus dedos suavemente sus muslos al ritmo de la música.

Namjoon había pasado una mala noche, sus ganas se habían quedado dentro de sus pantalones y el sueño lo había abandonado por completo. Borró las tres imágenes que poseía del menor y arrojó lejos su celular, maldiciendose lo prohibído que estaba el muchacho para él.

-Antes de llegar... -Habló con su suave voz la señora a su lado -... ¿es posible que podamos pasar a un supermercado para comprar un par de snacks para mi pequeño?

Namjoon pensó por unos cinco segundos ladeando la cabeza y miró por el espejo a Seokjin, quien miraba a su madre con el ceño fruncido y una mueca de disgusto.

-Claro que sí, no se preocupe -Asintió el de cabellos grises.

Seokjin tragó grueso y pasó su mano por su cabello. Era un chico muy inteligente y, si al conductor se le pasaba por la cabeza lo que él estaba pensando, probablemente moriría en ese instante, tanto de vergüenza como de placer.

Sin notarlo sus mejillas se tornaron levemente rojas y se cubrió el rostro con sus blancas manos, soltó un suspiro estresado y cerró sus ojos fuertemente, debería dejar de pensar en aquellas cosas.

Namjoon dobló en una esquina y bajó al subterraneo del supermercado más cercano al destino de la señora y su hijo.

-Hijo, espérame aquí, volveré en veinte minutos.

La señora se bajó del auto y cerró la puerta despacio, se colgó la cartera al hombro y ambos la vieron caminar hasta desaparecerse subiendo las escaleras que llevaban al primer piso del supermercado.

Seokjin y Namjoon se miraron a través del espejo y éste último le propinó una sonrisa.

-¿Dormiste bien, Seokjin? -Preguntó el mayor con la voz grave, haciendo que el pelirosa se estremeciera levemente en su puesto y asintiera mirando el suelo -, yo no, por tu culpa no pude dormir.

Se desabrochó el cinturón de seguridad y en un movimiento rápido pasó entre los asientos delanteros y se sentó al lado del más joven. La mueca de éste cambió a una de miedo y nervios, se mordió el labio inferior y empuñó sus manos.

Sí, Namjoon había adivinado sus pensamientos.

Éste le miraba con una sonrisa ladina, digna de un pervertido profesional que acosa a sus víctimas en un callejón.

-Te pregunté algo...

El peligris pasó sus dedos por el mentón contrario, haciendo presión hacia abajo para ver sus gruesos labios.

-S-Sí...

Namjoon hizo un brusco movimiento. Apoyó al contrario contra la ventana y abrió sus piernas posicionándose entre ellas, se acercó a su rostro y volvió a susurrar, pero ésta vez más grueso.

-¿Sí qué?

-S-Sí, Namjoonnie...

El menor cerró fuertemente los ojos al sentir los labios del contrario rozar los suyos, no esperaba que el conductor se lobtomara tan literal, era sólo un juego.

Namjoon lo besó de forma un poco brusca, pero, cuando el menor accedió, fue algo más suave.

Deboraba aquellos gruesos labios como si fueran un dulce caramelo infinito, nunca se aburriría de ello aunque la cárcel estuviera entre ambos. Seokjin se agarró del cuello contrario mientras su rostro adoptaba un leve tono de color rojo.

El peligris abrazó el cuerpo contrario con su diestra y con su mano libre desabrochó sigilosamente botón por botón de la blanca camisa contraria.

-N-No... -Susurró el menor sugetando la zurda del contrario

-Susurras tan bonito.

Namjoon mordió algo fuerte el labio carnoso inferior de Seokjin, haciendo que éste soltara un gemido que hizo que sus pantalones se sintieran más apretados. No podía follárselo ahí, su madre llegaría en cualquier momento y sería su pase V.I.P a la cárcel por pedofilia y violación a menores.

Volvió a deborar sus labios con ganas, Seokjin rodeó las caderas del contrario y soltaba leves suspiros entre sus labios.

Con su zurda abrió la camisa del mejor, dejando su torso a la vista. Pasó tortuosamente suave sus uñas por su suave abdomen, provocando que el pelirosa arqueara su espalda y echara su cabeza hacia atrás. Namjoon aprovechó el cuello libre y pasó su lengua por todo el largo.

-N-No... -Gimió con una suave voz. Namjoon bajó su mano hasta el formado bulto del pelirosa y lo apretó algo fuerte -¡A-Ah!

-Sólo gime mi nombre, pequeño.

-Namjonnie...

Desabrochó los pantalones contrarios y hundió su diestra para masajear el miembro de Seokjin sobre la tela de su rosada ropa interior, bajó dejando un camino de besos y se distrajo dejando chupones sobre la blanca piel del menor. Seokjin soltaba amplios suspiros y algunos tiernos quejidos ante las marcas y el placer que recibía en su parte baja.

-Namjoonnie...

Seguía susurrando el nombre contrario. Podría acostumbrarse a decirlo toda su vida a cambio de éste momento si era necesario.

Y tenía miedo, claro, había llegado hasta un poco más allá de este punto, pero seguía siendo virgen. Le gustaba jugar con sus novios, pero prefería reservarse para alguien mejor aunque sonara estúpido.

Namjoon se sentía en el cielo, la piel contraria era tan suave y con olor a fresas, se haría adicto a besarla cada vez que tuviese la oportunidad.

Bajó un poco más, hasta el borde de la ropa interior del contrario y pasó su lengua por el contorno, le dedicó unas cuantas miradas al pelirosa y sonrió triunfador. Seokjin estaba completamente rojo, del mismo color que las marcas que le durarían unas cuatro semanas.

Le besó por encima de la tela el glande, haciendo que nuevamente el contrario se arqueara. Soltó una leve risa y se sentó en el asiento formalmente, abrochó los pantalones contrarios y depositó un corto beso en los húmedos labios contrarios.

-Me encanta cuando gimes mi nombre.

Seokjin se incorporó y cubrió su rostro sonrojado entre sus manos.

El mayor abrochó la camisa contraria con cariño, como si fuera una madre vistiendo a su pequeño niño.

-Nada de ésto pasó.

-Me gustaría verte de nuevo.

El pelirosa lo había dejado loco, y si tuviera la oportunidad de follárselo, lo haría.

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Perdón por demorarme tanto:c Estuve ocupada ayer:c
Espero que les haya gustado
Fui un asco relatando el momento porque no podía inspirarme con mi madre roncando al lado mío
Bai ✌