7 Sueños.

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Narra Christian.

Se encontraba inconsciente, tumbada en la camilla de la enfermería.
No pude evitar mirarla allí tendida.

- Joder Christian contente! - dice mi voz interior.

Intento alejar mi mirada de su precioso rostro dormido, cuando empiezo a oirla susurrar. Me acerco para entender lo que dice.

- Oh... Christian... sigue... Ummm.... - Susurraba con placer.

Mientras, yo sonreía al saber que no la habia perdido, que todavia tenia una oportunidad con ella.

- Nena, nena, ¿Estas bien? Creo que estabas soñando. -decido despertarla.

Narra Laura.

Abrí mis ojos algo aturdída. Recuerdos borros pasaban fugazmente por mi mente a gran velicidad. Tirones de pelo, algún que otro puñetazo y después un fuerte dolor de cabeza y la luz se apagó.

Cuando decido abrir mis ojos los recuerdos de lo que parece a ver sido mi sueño erotico con mi profesor de gimnasia hacen que decida volver a cerrarlos.

- Oh nena, ¿sabes que lo he escuchado todo verdad?- dice entre carcajadas.

Yo mantego mis ojos cerrados intentando hacerle ver que estaba dormida.

- Vamos nena, se que estás despierta...

Creo que estoy perdida cuando un fuerte grito hace que abra los ojos sin dudar.

- Nenaaaa!! Que tal vas!?!?!? Yo solo vi estirones de pelo y puñetazos.

- Mmmm... quien eres tu?- Comenta Christian

- ¿Yo? El amor de tu vida, ¿cuando quedamos? - Dice bromeando.

- Hostias Rafa! - digo jartandome de  risa. - Es mi profesor de gimnasia - continuo la frase.

- Da igual, el monitor de aquí me mola más. Es el monitor de aquí, está...😏 - dice Rafa

- Uy profesor, ¿nos podrías dejar solos? - Digo yo

- Claro, avisame cuando tengas que ir a la habitación para que te lleve.

Me pasé toda la tarde hablando y riendo con Rafa, era muy buen amigo. Después vinieron Alba y Cristina, pasamos casi toda la tarde noche en la enfermería y cuando decicieron irse les dije que avisaría a Christian para que me ayudara.

Como no pienso llamarlo lo intento yo sola.

Narra Christian.

Miro la hora, son casi las once de la noche y Laura no ha llegado todavía, así que decido ir a ver como está.

Estoy acercando tranquilamente hasta la enfermería cuando oigo un grito que me hiela la sangre.
Corro hasta la enfermería y me encuentro a Laura en el suelo cogiendose el tobillo con dolor.

- Joder nena, te dije que me avisaras - digo sin pensar

- Creí que podía sola - me disculpo

-Dejame a mí anda. - acontinuación me agacho y le cojo en brazos como una princesa, ella enreda sus brazos en mi cuello y deja caer el peso de su cuello contra mi pecho.
Dios se siente bien tenarla así de cerca.

La dejo sobre mi cama y ella me mira estrañada.

- Creo que te has equivocado, mi cama es la otra - me dice

- Oh no nena, ahí estas bien - le contesto.

- Vamos llevame a mi cama Christian.

- ¿O si no que? - La reto.

Empiezo a desnudarme a los pies de la cama mientras ella recorre mi cuerpo con su mirada, atenta cada uno de mis movimientos. Me pongo unos pantalones de pijama y dejo mi torso al aire.

- Nena, estás mala. Yo te voy a cuidar, te guste o no. Así que haz hueco en la cama, por que te aseguro que no vas a conocer a mejor enfermero que yo.









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