Hablar con Michael me había hecho bien, habíamos hablado de cosas sin importancia como nuestro color favorito o lo que mas nos gustaba hacer. El color favorito de Michael era el azul y amaba tocar la guitarra y cantar.
-¿Podre escucharte cantar algún día?- pregunté caminando por el borde de la banqueta y haciendo equilibrio con mis brazos extendidos.
-Nunca- dijo él esquivando mi brazo que estuvo a punto de golpearlo.
Había momentos de completo silencio y me agradaba por que podía jurar que él escuchaba mis pensamientos, lo se, es estúpido y cursi. Cuando le conté aquello a Calum soltó una carcajada y me dio con la palma en la frente para después yo arrojarlo al suelo y comenzar a golpearlo con los puños cerrados mientras me gritaba "golpeas como niña".
La prima de Ashton llego días después y se sentaba con nosotros en el almuerzo ya que no conocía a nadie. Natalia nos había dicho que su novio también seria trasferido una semana después; y así fue.
Estaba sentada en la cafetería como hace dos semanas, parecía que todo volvía a ser exactamente como aquel día.
-Oye cuidado- grito Calum cuando por poco lo pico con el tenedor por querer robarse mi pudín -. Haré una colecta de firmas para que ya no te den pudín, pinche agresiva.
-O tenedores- agregó Ashton abriendo su pudin.
Reí bajo por su comentario cuando los demás se sentaban en la mesa. Natalia llego acompañada de un chico alto y rubio.
-Ellos son amigos de mi primo- nos presentó y el chico nos saludó con la mano.
-Valla una jirafa-dije tomando unas uvas del plato de Calum.
Iba a reír pero cuando Michael llego a la mesa y vio al chico alto lo miro con odio, dejo caer la charola con fuerza y se fue mal diciendo. El rubio solo puso los ojos en blanco y se sentó.
-Soy Luke Hemmings- nos dijo y abrazo a Natalia por la espalda.
Le hice una seña con la cabeza como de saludo y pude escuchar a Fernanda susurrar "Tenias que ser chola de Valles". Una carcajada salió de mi boca y la jirafa... digo, Luke Hemmings me miro de manera extraña.
La campana sonó y Calum y Fernanda me esperaban para ir a una de las tantas clases que teníamos juntos. Nosotros íbamos por los pasillos como siempre, diciendo nuestras típicas estupideces y burlandonos de los grados mas bajos. Un chico de primer año que al parecer se llamaba Eliud le regaló a Fernanda una bolsa de gomitas, unos panditas. Ella solo le sonrio hacíendolo sonrojar y regreso con nosotros donde abrió la bolsita y le quite un puñito. No me había dado cuenta de que la jirafa nos seguía hasta que Calum le hablo.
-Ya se que te gusté- dijo en broma -, pero no tienes por que seguirme-. Fernanda y yo nos reimos y miramos al chico.
-No encuentro el aula 404- nos dijo riendo bajo y mirando su papel -. Tengo clase con el profesor Humberto.
-Pinche viejo culero- dije caminando hacia el chico y viendo su hoja -. Tienes 4 clases conmigo, otras 2 con Fernanda y compartimos los cuatro 4 materias más- eso era una ayuda para la jirafa, así no batallaría en encontrar los salones o en estar solo todo el día -. Acostúmbrate a llegar un poco tarde- añadí mientras caminaba.
La campana había sonado hace mas de 10 minutos y al llegar al aula solo abrimos la puerta.
-Otro retardo jóvenes- dijo el profesor caminando a su escritorio y llenando un papel de reporte.
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El chico Punk-Rock
AcakDos caras de la moneda... Dos almas distintas... Dos corazones muriendo... Dos errores: amarte y odiarte... Una sola razón, un solo poque... Tenemos un destino en común.