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En algún lugar de Japón, se encontraba una casa no muy distinta a las otras a su alrededor, era un verdadero lujo

-Soy Hatsune Mikuru, tengo 5 años, soy alumna de danza y canto, y es un honor conocerlo- Dijo una niña de cabellos color verde marino atado a dos largas coletas de forma firme y con una encantadora sonrisa formada en su rostro

-Oh! Es un placer señorita- Dijo un hombre uniformado haciendo una reveréncia ante la niña para luego besarle la mano

La niña rió ante su acto -Jaja hace cosquillas padre-

-Mi linda princesa, no hay una señorita más bella y talentosa que tú-

-Me alagas- Dijo con una carita angelical

-Querido! Se nos está haciendo tarde!- Dijo una mujer muy nerviosa entregandole du maletín a su esposo. Acto seguido por un vistazo a su hija -Pequeña, lo siento, pero hoy no llegaremos tarde, la mucama llegará en dos horas, no vayas muy lejos, Simón está afuera si quieres compañía, te vemos luego!- Twrminó para luego irse

-A-adiós...- Dijo Miku saludando con su mano

Pasaban los minutos y la niña estaba en el jardín persiguiendo a su mascota riendo alegremente como la inocente jovencita que era

-Simón! Espera! Mamá dijo que...- La niña no logró terminar su oración al ver a su perro salirse hacia el jardín de la parte de atrás donde más allá había un río subterraneo que más hacia la ciudad se encontraba más visble, donde había un puente.

-Simón! Mira que linda es el aguaa- Dijo la niña admirando su reflejo en el cristalino azul de ese río -Jeje, me veo muy graciosa jaja-

Miku en un instante se pone a observar su alrededor al notar una sensación en su cuerpo, sentía que alguien la observaba

-¿Hola?- Ella inconsientemente se encaminó hacia el puente el cual le daba suma curiocidad como para adentrarse en él.

La luz del sol se reflejaba en el agua produciendo que su reflejo se viera en los ladrillos de piedra se su interior. Con gran sigilo se adentró en su interior sintiendo el aire fresco en su cuerpo

-Que bien se siente-

-Uhm!!- Se ojó un ruido o una voz asustada en el interior del lugar

Sin más que decír la pequeña dama se adentro con entuciasmo de saber de donde, de qué o de quién provino ese sonido

-¿Hola?- En ese mismo instante divisó del otro lado un mechón de cabello moverse hacia el otro lado

Sin más que decir la aguamarina se fue con más ganas y velocidad donde ella juraba ver visto algo y giró hacia la derecha para ver a un niño asustado escondido entre algunos escombros de un par de ladrillos

-Q-q-¿Qué quieres?- preguntó tembloroso el muchacho viendo la silueta de Miku

-No tengas miedo, no te haré daño- Dijo acercandose

-C-¡¿Cómo estás tan seguro?! Alejate!-

-S-sólo vine a ver.....¿Tú me estabss observando?- Dijo con todo calmado

-¿Siguiendo? No.....espera...¿Tú eras la niña elegante?-

-¿Elegante? Sólo es un vestido...- La niña no comprendía que era lo que veía de elegante en ella, para ella sólo traía un vestido común, ¿O tal vez si era elegante? No lo sabía, simplemente ella había crecido en el lujo y no sabía muy bien cómo se veía la gente corriente.

-Si....la niña linda de las coletas...- Dijo con un poco menos de miedo el jóven

Miku automáticamente se sonrojó inocentemente -Me alagas- Dijo con un tono lleno de seremidad

-¿Qué es "alagas?- Preguntó el niño lleno de curiocidad lo que hizo que Miku volviera a la situación

-Es...em...alagar es...hacerle cumplidos a las personas para que se sientan bien-

-Ahhh ya veo...- Dijo acercandose a Miku y viendola más de cerca

-Vaya, eres un muchacho algo...em...- Miku no hallaba las palabras para describir a su contrario, Miku estaba biem peinada con un pequeño vestido rosa que resaltaba un poco su cuerpo, lo único es que era una niña de corta edad y no se notaba mucho la forma de su cuerpo ya que aún no se había desarrollado. En cambio él, tenía ropa sucia y algo desgarrada, cabello desalineado y algo polvoriento al igial que su ropa.

La niña al no completar su frase sólo intentó compensarla con una cálida sonrisa algo forzada

-No necesito pena....y menos de alguien como tú....- Dijo el niño algo molesto

-¿P-por qué me hablas así?-

-Ya sé lo que piensas, creía que eras una de esas niñas lindas que no dicen mentiras, pero al parecer eres como todas las de tu clase, glamorosas y groseras-

-No! No quería lastimarte! Sólo quería responder pero no hallaba las palabras correctas! Por favor no te enojes- Dijo poniendo una carita suplicante.

Miku no podía ver bien al chico pero él a ella sí, lo que hizo que sonriera un poco y se calmara

-Está bien, te creo....-

La niña sonrió y no pudo evitar abrazar al chico, lo que hizo que el niño mostrara un pequeño rubor en sus mejillas, el cual no fue notorio debido a la oscuridad en la que se encontraban

Creo que ya es suficiente, no quiero dejarlo muy largo.
Espero que les haya gustado el primer cap, he tratado de hacerlo lo más infantil posible, palabras acordes a su edad. Aunque Miku es un poco más sofisticada en su forma de hablar. Y se preguntarán por qué en la portada Len es un neko, pues eso lo sabrán muy pronto.
Gracias por tomarse el tiempo por leer :3 bye bye~♡

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