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Hola a todos, lamento la demora del capítulo, ustedes saben que escribo de noche y publico pero antes de ayer perdí a alguien muy especial para mi y algo me dice que no va a volver pronto...asique por tanto llorar me dolía la cabeza y me dormí temprano pero amanecí muy mal y no quería hacer nada... Bueno aqui esta el cap...

Pasaban los días y los niños seguían adaptándose a sus nuevas vidas: Len con su nueva familia y Miku sin él, aún no podían visitarse ya que asuntos que atender y sus padres no podían acordar horarios.

Pasaban las semanas, meses hasta ser años y las cosas ya no eran iguales. La familia Hatsune se encontraba en quiebra, los padres habían quedado desempleados debido al cierre d ela fábrica, ellos tuvieron que vender su casa y comprar una más sencilla reduciéndo los gastos. La mujer que venía a encargarse del mantenimiento ya no trabajaba para la familia pero en sus días libres le gustaba visitarlos, eran muy importantes para ella al igual que ella para ellos, sería bienvenida cuando quisiera a la casa.

Cuando ya su pequeña cumplió los 16 años se encontraban en un pequeño departamento de no muy buenos recursos, pero eran aceptables, su padre trabajaba en una cosmética y en una florería; debía trabajar doble para mantenerse él y a su hija quién se ocupaba de las tareas del hogar y también era mesera por las noches.

Los antiguos acontesimientos no le habían permitido continuar con sus estudios asique desde los 12 dejó las clases particulares y comenzó a ahorrar el dinero que ganaba junto a la ayuda de sus padres para poder pagar las clases en una escuela privada. Ellos deseaban que su hija tuviera la mejor educación posible para que su vida fuera exitosa en el futuro. Mientras tanto Miku se dedicaba a sus labores y en su tiempo libre complementaba sus estudios faltantes con libroa que tenía de su antiguo y primer hogar. Desgraciadamente la mujer de la casa en una noche lluviosa habia tenido un accidente automovilístico de regreso a casa, lo cual provocó el fallecimiento de la mujer dejandolos a Miku y a su padre sólos para continuar. Desde entonces el hombre no se habia casado ni relacionado con otra mujer por respeto a su amada y a su hija, sin olvidar que él era demasiado orgulloso para cargar las responsabilidades a alguien que apenas ingresara a la familia.

Al llegar el gran día Miku desayunó y se fue lo más rápido que pudo esperando a su padre en la entrada de la casa a un costado del auto que pertenecía a su madre.

-Miku vamos!- Exclama el hombre colocándose su chaqueta mientras se acercaba al auto después de echarle llave a la casa limitándose a llevarla a su insyitución, lastimosamente era la primera vez que se encontraba en un instituto provocándole algo de nerviosismo, pero ella había visto muchas películas y programas anteriormente que le han informado bastante sobre  las cosas ahí.

Tomó sus cosas, bajó del auto, se despidió desde el lado de afuera del veículo y se adentró en el lugar viendo distintos alumnos convivir entre sí provocándole algo de emoción opacando levemente su nerviosismo. Recordó las indicaciones de su padre y fue a la oficina del director viéndolo instalarse en su despacho.

-Disculpe....¿Podría ayudarme?- Dijo lebemente la chica aprovechando la puerta entre abierta para ingresar y así acercarse llamando la atención del hombre.

-Oh, buenos días, Señorita....-

-Hatsune, Hatsune Miku...- Completó con una sonrisa leve en su rostro mientras era devuelta

-Claro...¿Eres nueva no?-

-Si, me podría decir donde es el...- No pudo acabar su duda debido a que el director se distrajo con la presencia de alguna de sus estudiantes.

-Ah, hola señorita IA- Dijo observando a la chica detenerse frente a la puerta cargando ciertas cosas en sus manos.

-Hola....- Dice con una sonrisa algo incómoda debido a la carga que llevaba.

-Tengo algunas cosas que hacer, ¿Podrías mostrarle a Miku la escuela?- Preguntó el hombre para que la chica hiciera más fuerza con sus brazos y guiñara un ojo alegre -Además, sería bueno que se hicieran amigas-

-Claro, será un placer- Dijo mientras la peli-agua salía y cargaba algunas de las cajas que tenía la mayor.

-¿Necesitas ayuda?- Preguntó ya con el cargamento adqiirido.

-Si, gracias dulzura, ven, acompáñame. A medida que cargamos ésto te enseñaré el lugar- Dijo para comenzar a caminar junto a ella enseñándole cada aspeco d ela institución.

Al acabar se encontraban caminando por los pasillos viendo cada vez menos alumnos.

-¿Qué es todo ésto?- Pregunta la novata curiosa mientras aún cargaba el material.

-Es utilería para el Club de Teatro y algunos materiales para el de arte- Explica doblando en una esquina hasta dejar las cajas sobre la mesa de un salón -Listo, déjalas aqui, los estudiantes se llevarán lo que necesiten- Dijo mientras su acompañante dejaba las cajas junto a ellas.

-¿Pero los del otro club no buscarán después sus pertenencias?-

-Si pero....está todo mezclado detro asique lo que no les sirva lo dejarán en las cajas y se los llevarán- Aclaró saliendo del salón -En éste pasillo podrás hallar todos los clubes que tenemos, las inscripciones acaban en dos semanas asique no habrá problema en que te unas-

-Graciss IA, em...nos vemos!- Dice para tomar sus cosas e ir de prisa hacia donde creía que se encontraba su salón.

[Mientras tanto en otro lado]

Len se encontraba vistiéndose con el uniforme optando por correr a la cocina, comer su cereal con leche sin siquiera sentarse a comer con calma e irse de prisa al instituto en bisicleta seguido de su hermanastras, quién cargaba una tostada con queso en su boca.

-Que asco Rin, se te va a llenar de tierra!- Exclama mientras se alcanzado por la rubia.

No tardaron mucho hasta poder llegar y correr a su salón correspondiente.

Demonios, no puedo creer que me sienta mal justo ahora, me la aguantaré... Pensó el rubio logrando así ingresar al aula y atender la clase.

-Como que se me antojan unas costillas aumadas...- Murmura el chico siendo regañado por su acompañante.

-Ay Len! Siempre pensando en comer, son las 7 de la mañana y ya quieres almorzar!- Regañó la pelirroja completamente frustada, dandon a entender con su expresión facial que no había desayunado.

-Jeje..nerd- Burló bajamente aún siendo escuchado por la chica.

-¿Qué dijiste?!-

-Nada...-

-Ah...-

-Dije que lo unico que comes son libros, por eso te la pasas con hambre- Continúa con una sonrisa desafiante.

-Ash!!-

-Señorita Kasane y Señor Kagamine! Si tienen algo que charlar háganlo en el receso o fuera del salón!-

-Si maestro...- Dijeron al unísono con algo de temor en sus rostros.

-Nunca cambian...- Dijo por lo bajo algo harta la del moño

-Y que lo digas...- Respondió su acompañante del cabello mostaza.

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