Capitulo 30

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Deny:

De todas las personas de la clase ¿tenía que ser el gilipollas de Scott el que se sentara con ella?

Cuando los he visto agarrados de la mano los celos han podido conmigo.

Y si, me he comportado como un gilipollas, o como lo que ha dicho Lara...no sé qué ha dicho pero seguramente tenga razón.

Me he sentado en la mesa al lado de la de Ariel y...¿a que no sabéis con quién? Con Scott, mi amigo del alma.

-Deja de mirarme así-salgo de mis pensamientos y miro a Scott, el cual me mira cabreado

-¿Cómo te miro?-ilumíname genio, porque lo último que haría sería mirarte

-Como se hubiera matado a tu perro-una carcajada sale de mi boca, ¿pero este de donde ha salido?-O bueno, como si te hubiera quitado a Ariel-la risa se me corta y mis puños se cierran.

-No me toques los huevos Baker

-Es que no lo pillas ¿verdad?-este tío me saca de mis casillas-La cagaste mucho

-Ya lo sé gilipollas-le digo a regañadientes, este tío no va a decirme algo que ya se.

Sé que la cague y llevo arrepintiéndome de ello los casi dos meses que llevo sin Ariel

-La destrozaste, la hundiste y justo en el peor momento de todos-no quiero que sus palabras me afecten, pero joder lo hacen, y mucho-Pero ella te quiere y tú a ella-levanto la cabeza, porque sinceramente me he quedado flipando-Yo solo la quiero como amiga Deny, nada más. Así que deja de comportarte como un capullo y vuelve a ser el Deny del que Ariel sigue enamorada

-¿Por qué me dices esto?

-Porque quiero ver a Ariel feliz y contigo lo era y tú dejabas de ser tan idiota-me río, joder este tío me va a caer bien y todo

-Genial, pues vamos a hacer las cosas bien-sonrió y Scott levanta una ceja-Primero me tienes que ayudar con Liam y Lara

Ariel:

Odio estudiar, de verdad lo odio no me entra tanta información en la cabeza.

Llevo casi una semana llena de exámenes, y os juro que no sé cómo mi cabeza aguanta.

Ahora mismo estoy encerrada en mi cuarto, un viernes a las 8 de la noche estudiando historia.

-Cariño-levanto la cabeza y me giro a la puerta, donde está mi tío apoyado en el marco de la puerta

-¿Si?-lo miro con mi cara más angelical, aunque estoy segura que parezco un ángel con ojeras y un moño mal echo

-¿Qué estudias?-miro al libro que tengo delante y le levanto la tapa

-Historia, o en mi idioma, cosas que hicieron gente idiota del pasado y que ahora tengo que estudiar-mi tío se ríe y yo sonrió

-Yo también tuve que estudiarla

-Si claro pero seguro que en tu época había menos cosas que estudiar

-¿Me estas llamando viejo?-mierda, una sonrisa aparece en mi rostro al ver a mi tío con una ceja levantada mirándome con la típica mirada de "como me vuelvas a llamar viejo te tiro un cubo de agua encima que estoy muy bien para mi edad"

-Puede pero no me mates que yo te quiero-antes de darme cuenta un cojín aterriza en mi cara-Me lo he ganado-los dos nos reímos

-Nos vamos ¿estas segura que no quieres venir?-yo asiento.

Mis tíos y mis primos se van todo el finde semana a una casa rural, a mí me encantaría irme con ellos pero tengo una cita con historia, filosofía, mates y economía.

En otras palabras el infierno de toda adolescente

-Me encantaría ir pero ya sabes los idiotas del pasado me esperan-mi tío se ríe

-Vale llámanos si necesitas algo-mi tío sale de la habitación y yo vuelvo a centrar mi vista en el libro de historia.

Media hora más tarde oigo la puerta de casa cerrándose signo de que estoy sola en casa.

Cierro el libro, me pongo unos pantalones de pijama con una camiseta que me cuelga de un hombro, me pongo unos calcetines y vuelvo a centrar mi vista en el libro.

El sonido del timbre me saca de mis pensamientos.

No sé quién será, Marcus y el resto se fueron del pueblo hace unas semanas, aún seguimos hablando casi todas las semanas. Pero está claro que ellos no son.

Bajo las escaleras y voy hacia la puerta, cuando la abro veo a Deny con dos bolsas de comida china en las manos

-Necesito tu ayuda ¿tienes hambre?-yo le sonrió y hago un gesto con la cabeza para que entre.

Los dos vamos hasta la cocina, yo me siento en la encimera y Deny en una silla

-Te escucho-Deny me pasa la comida y yo la abro y empiezo a comer con los palillos chinos.

¿Alguna vez os han dicho lo jodido que es comer con estos cacharros?

Pues os lo digo yo es muy jodido

-Últimamente he sido un gilipollas-y que lo digas, no sé qué coño le ha pasado en las últimas semanas pero desde luego no era el mismo Deny del que yo me...eh ¿hice amiga? No te lo crees ni tú. Cállate conciencia-¿Me estás escuchando?

-Me he quedado en el he sido un gilipollas-Deny se ríe y yo sonrió-Lo siento estaba perdida en mi cabeza, te escucho

-Bien como te he dicho he sido un gilipollas y quiero arreglar eso-dejo de comer y lo miro a los ojos-y lo primero que tengo que hacer es arreglar a Liam y a Lara-una sonrisa aparece en mi cara, esto es lo mejor que podía haberme dicho Deny-Y necesito tu ayuda

-Cuenta conmigo-Deny me sonríe

-Ariel creo que te debo una explicación-todo mi cuerpo se tensa-Por favor escúchame-Dejo la comida cuando Deny se acerca a mí y me coge las manos-Cuando llegaste al instituto fue como una sorpresa para todos. Cuando intente ligar contigo y me mandaste a la mierda fue algo nuevo para mí, nadie me había mandado a la mierda y menos una chica-yo sonrió-Cuando te vi con Travis en la carrera de coches sentí celos, muchos celos y le pedí que se alejara de ti. Travis me reto, me dijo que si te conquistaba en dos meses me daría el Ferrari pero que si no lo conseguía le dejaría el camino libre a él. Al principio me decía en mi cabeza que lo hacía por el coche, pero la verdad era que no lo hacía por el coche lo hacía porque no te quería compartir con nadie más. Nunca te mentí acerca de lo nuestro, me enamore de ti como no lo he hecho de nadie, cuando estaba contigo no necesitaba toda la mierda que necesitaba antes, solo necesitaba tu risa-mis ojos se cristalizan-Cuando adivinaste lo de la apuesta me pegue semanas sintiéndome fatal, estaba perdido, muy perdido. No puedo vivir sin ti Ariel y sé que ahora no puedes perdonarme ni estar conmigo pero voy a estar ahí para ti. Porque quiero estar en tu vida pase lo que pase

ahora mismo mi estomago está lleno de mariposas revoloteando, me limpio las lágrimas y lo abrazo.

Rodeo su cuello con los brazo y el me envuelve en su pecho, he echado mucho de menos sus brazos y no estoy dispuesta a perderlos.

Yo de ciudad tu de campoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora