Solo tengo un problema, dos o quizas tres, como lo llama la gente normal un pequeño "trastorno" nada más.
A través de una mirada veo a todos ellos pero excepcionalmente a esas "personas" en cualquier lugar, gritando, llamando y buscando la forma de...
Salgo de casa, eran casi las 7:30 tomo el autobús y me dirijo hacia nuestro lugar de encuentro.
Luego de un par de minutos.
Llego a mi destino. Bajo y sigo caminando derecho, subo por una calle y lo veo.
Estaba Noah en nuestro banco de una casa abandonada que daba vista hacia toda la ciudad.
Subí casi corriendo por solo la emoción y ansias de verlo después de tanto tiempo.
Nos abrazamos largo rato y comenzamos a hablar sobre nuestras anormales vidas.
–Vamos suéltalo, conozco tu cara Cassie, pasa algo y se que esperas respuesta..—dice Noah.
-¿Me sigues queriendo?— dije sin más que decir.
Hubo un silencio aterrador. Ninguno de los dos habló.
Y nos quedamos ahí, en aquel banco observando nuestra pequeña ciudad.
Juraría que las luces de los edificios me susurraban; «Tu puedes» y la pequeña luna me pedía a gritos; «abrázalo».
Yo sonreía y el sonreía..
Porque estar a su lado me bastaba para ser feliz.
Aun sabiendo que quizás no lo volvería a ver.
Recuerdo la luz del sol que se desvanecía a medida que charlábamos. Y que sólo un farol alumbraba un poco a nuestro lado, ademas de nuestras amigas estrellas que aparecían de a poco.
Después de un rato de apreciar las estrellas él hablo.
–Necesito que sepas algo muy importante cassie.. Puede que sepas de que trata todo esto, pero..—lo interrumpo.
–Para.. se lo que quieres decirme. No hace falta, se que te iras de la ciudad y no te podre ver mas..—dije contuviendo una lágrima que caía por mi mejilla.
–No llores! Te vendré a ver. Lo prometo.—aseguro Noah.
– Tu y yo sabemos que no será así, tu padre no te permitirá jamás estar con una niña trastornada, todavía piensa que soy tu mala influencia..—dije seriamente.
–Pero mi mamá no! Ella sabe que somos amigos y lo acepta. Además tú ¿mala influencia? Si claro.. jaja esto no sería al revés? Soy mayor que tu eso me hace ser tu mala influencia querida amiga.
–Si comprendo, pero promete que podré verte una vez más— Dije al pararme cruzándome de brazos, dando la espalda a Noah.
No sabia como actuar en ese momento, solo de pensar en eso, haría que se me escaparan un par de lágrimas.
No pude contenerme, tenía que abrazarlo. Y lo más rápido.
...
Fue el abrazo más fuerte y largo que he tenido, realmente pude sentir ese cariño que me tenia y él lo mucho que lo extrañaría.
–Siento honestamente que es mi culpa, Noah—hable.
–Cassie, no es culpa tuya, además me enviaran con mi hermana no te preocupes, estare bien. Yo me metí en esto.. será como siempre, Noah causando problemas, causando un infierno solo que no a tu lado... Esta vez.
No era mi intención hacerte pasar por esto, pero ¿puedo decir lo último? Cassie eres mi mejor amiga, y te amo! nuestra amistad es más que siete letras y una canción ¿Y tú me preguntas si todavía te quiero? Como si yo pudiera dejar de amarte, nunca antes me atreví a dar mucho de mí a nadie(..) pero Cassie, lo sé ahora sí lo sé! Eres mi mejor amiga. Y que nada ni nadie llenará ese puesto, pero sólo ten presente que es para mí ponerle fin a esto, cariño, no quiero. Y se que encontrarás a alguien que te de el tiempo que yo no te di, esas semanas interminables sin hablar, gracias por darme algo tan real, te extrañare.— Dijo Noah mirándome directo con lágrimas en los ojos.
–Noah también eres mi mejor amigo, nunca creí decir adiós, pero te amo! Te extrañare y nunca te olvidaré..— rompi en llanto, no pude continuar mi discurso.
Último abrazo.
–Lo siento pero tengo que irme— respondió.
—Adios mejor amigo—.
—¿Por siempre?—.
—Por siempre—.
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