La Chica Del Manicomio

Capítulo 5

¡No, no, no!

No puedo creer que era ella, esto debe ser una alucinación, talvez estaba tan asustada que comencé a ver cosas que no eran lo que parecían... Era verdad. Era Carrie.

Me levante de la camilla en la que me mantenía acostada después de que Nathaniel me llevó al hospital.

Después de haber dejado escapar a Carrie -Cosa que por distraída hice-, Nathaniel me llevó al hospital el creía que me había ocurrido algo grave, en fin... Era hora de enfrentar esto, no voy a permitir que ella me arruine la vida intentando matarme.

Nathaniel entró al pequeño cuarto en donde estaba. Tenía una venda enredada, cubriendo el hombro lastimado. Se aproximó hacia mi con una pequeña sonrisa de oreja a oreja, probablemente querría hacerme un interrogatorio sobre lo que había sucedido anoche. Frunci el ceño e hice un gesto de "No voy a cooperar". En ese instante su sonrisa se desvaneció. Supongo que hablaba en serio.

-¿Cómo estas?-Preguntó, mirándome de arriba a abajo.

-¿Cómo esta tu hombro-Pregunté, ignorando su pregunta y haciendo que mirara su hombro sin mucha importancia.

-Te hice una pregunta.

-¿Me harás un interrogatorio?-Pregunté, ignorando a lo que decía.

-Por supuesto.-Contestó-Dejaste escapar al atacante, ¿Porqué?

-Estaba asustada.-Respondí.

Se quedo pensativo.

Minutos después una enfermera entró a la habitación, dándome precauciones y dejandome irme al colegio.

Caminé por las mismas calles de siempre, aún mirando esa residencia en donde fue asesinada una familia completa. Supongo que Carrie hará lo mismo conmigo.

Al llegar al colegio no me daba la gran impresión ver a mis únicos amigos esperándome en la entrada, aburridos o revisando sus celulares.
Aunque aún no entiendo algo... Mi estado de ánimo no estaba así hasta que salí del hospital, probablemente algo me estaba preocupando. Ahora estaba mirando todo obscuro y sin sentido.

Una pequeña sonrisa sin ánimo se formó en mi.

-¡Hola!-Saludó, Tyler, elevando una mano esperando su saludo de vuelta. Pero bueno, no tenía ganas de hacerlo. Solo lo ignore. Bajó su mano lentamente, indignado.-¿Estás bien?

-¡Claro, aún por el hecho de que anoche casi me asesinan!-Le grite, histérica.-¡Y claro, Carrie era la que intentaba hacerlo, ya que entro a mi casa a las 2 de la mañana!

-Me sorprende que aún recuerdes la hora en que fuiste atacada-Dijo, burlón, posando una mano en su barbilla.

-¡Todo eso sucedió anoche!

-¡Lo siento, no sabía que te pondrías haci!

-Tyler, esto no es una broma.-Interrumpió, Charlotte.

Entre al colegio, furiosa por el acto tan inmaduro de Tyler.
El es un chico mayor de edad, tiene una personalidad de un niño de siete años, no para de hacer bromas o de burlarse de los demás; si no tuviera un tornillo suelto juraria que sería perfecto. El es muy apuesto. Su cabello está teñido de rubio, sus ojos tienen un color gris, un gris que le queda perfecto combinado con su piel pálida y blanca.
Lástima que tiene que tener el cerebro de un niño pequeño.

Alex es mi novio, el es muy maduró a la hora de resolver algún caso como el que estoy pasando. Es todo lo contrario a Tyler, el tiene el cabello teñido de color caramelo, sus ojos tienen un color verde y su piel es aperlada.

Charlotte es una chica lista, ella esta al tanto de cualquier cosa, puede resolver problemas en un instante, pero, este no. Ella es una chica ni alta ni baja, tiene una buena estatura. Su cabello es largo, cafe claro con una extensiones rubias, sus ojos son negros y su piel es blanca.

Mientras que yo... Son una chica torpe, a la que le encanta leer y no meterse en problemas. Soy un poco baja pero mi estatura no me impide hacer la mayoría de las cosas que acostumbró. Mi cabello apenas me llega un poco más abajo de los hombros, es color gris, bueno, no naturalmente sino que ya me lo había pintado. Mis ojos son cafe claro, solo si estan expuestos al sol, mientras que mi piel es blanca. Todo esto sería una pequeña descripción de mis amigos y de mi.

Entre al salón de clases y me dirigí a mi banco, acomode mi mochila en el extremo y me sente en el, estirando mis brazos y pies.

La puerta se abrió lentamente, mostrando la silueta de la persona que estaba a punto de entrar... Carrie...

Tenía una de sus pequeñas sonrisas aterradoras, llenas de odio y del impulso a asesinar. O así lo veía yo.

No aparte mi mirada de ella, sentía un mal presentimiento en ese momento, ella podría intentar cualquier cosa para matarme. Carrie volteó a verme y rio. Sentí escalofríos por todo mi cuerpo. Se acercó hacía mi y se sentó a mi lado.

Su cercanía me tenía aterrada, ella cada vez estaba a un paso delante de mi y yo cada vez más atrás. Acercó su banco más cerca de mi, y una vez completamente pegada a mi, recargo su brazo en mi, riéndose con la misma psicopatía de anoche. Me abrazo por detrás con su brazo y susurro en mi oído...

-Tu casa es muy linda...

Me levante rápidamente, liberandome de ella, estaba decidida de salir del salón. Apuntó de abrir la puerta volví a escuchar su voz.

-Dime... ¿Cómo piensas acabar con todo esto si no tienes el valor de defenderte por ti misma?-Preguntó, sonriendo y levantándose del banco.-No me digas que pedirás ayuda a un simple detective que no puede hayar una simple pista para atrapar a un asesino.

-Claro que tengo el valor.-Dije sin pensarlo.

-No lograste defenderte anoche y, ¿Sabes que es lo peor?-hiso una pausa-Me dejaste escapar.

Sus palabras me dejaron muda. ¿Qué iba a decir? Ella tenía razón, soy una gallina que no puede hacer algo por si sola y si hace algo es porque le dieron una pequeña ayuda.

Molesta la tomé del brazo y la empuje con fuerza, pero no haciéndole daño alguno. Se detuvo en seco y me miró.

-¿Una lucha cuerpo a cuerpo?-Preguntó, estirando sus brazos.

-Esto será para demostrarte que puedo defenderme.-Contesté, con confianza en mi misma.

Carrie atacó rápido, con un golpe en mi mejilla, caí al suelo del impacto, cubriendo mi mejilla adolorida. ¡Soy una gallina!

No me dio tiempo de reaccionar a tiempo, que Carrie me tomo de las muñecas, apoyándolas en el suelo, subiéndose en mi y acorralandome por completo.

-Eres débil.-Me confesó.

-Gracias, la gente me lo dice.-Solté el sarcasmo.

-Así me será fácil quitarte todo lo que quieres y trabajaste en conseguir.-Sonrió-Primero tus amigos, luego tu personalidad y por último tu vida.

Me soltó bruscamente y se levantó.

-¡¿Porqué quieres arruinarme la vida?!-Pregunté, histérica.

Sacudió su ropa, limpiando un poco de polvo que tenía y se dirigió a la puerta, giro el picaporte y la abrió lentamente.

-Tu arruinaste la mía.

############################
Este es el capítulo 5
gracias por seguir leyendo.
Intentare subir los siguientes capitulos más a menudo.
Espero que les haya gustado^^
Dale una estrellita :3

Araceli :v