Una buena madre.

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Capitulo 18: Una buena madre.

Logan y James están cara a cara a pocos centímetros de distancia, misma distancia que fue vencida por James al darle un beso a Logan, esta vez el moreno no lucho por liberarse, más bien correspondió el beso.

James al sentir que Logan lo estaba permitiendo poco a poco fue metiéndose a la cama del listo sin dejar de besar sus labios, en un movimiento apresurado James se quito la camisa dejando ver su cuerpo tan bien trabajado haciendo sonrojar a Logan con solo mirarlo.

El castaño se encimo a Logan quedando arriba de este y besándolo de nuevo, Logan abrazo la fuerte espalda de James y fue acariciándola sintiendo por primera vez el cuerpo de su "amigo".

-Logan- Dijo James separándose levemente del rostro de Logan.

-¿Qué sucede?-Pregunto Logan sin dejar de acariciar la espalda de James.

-Tú eres mi poema- Fue lo único que dijo el guapo antes de volver a besar los labios de Logan.

Mientras tanto en un hospital de una ciudad desconocida...

-¡Logan!- Grito cierto rubio sentándose despertando a su madre.

-¡Kendall despertaste!- Dijo Jennifer Kinght.

-Mamá ¿Qué paso?- Pregunto Kendall confundido tocándose la cabeza con su mano derecha.

-Hijo eso no importa en este momento, debes recuperarte por completo.

De nuevo en la mansión Diamond, la luz del día empieza a entrar por la ventana de la habitación de huéspedes, misma que en este momento está siendo ocupada por Logan Mitchell y James Diamond.

James esta recostado del lado junto a la pared abrazando a Logan que está del lado opuesto, pasaron la noche juntos, ambos cubiertos por unas sabanas blancas, ambos semidesnudos, Logan solo tiene puesto el pantalón con el que durmió mientras que James solo tiene unos bóxers rojos, no tiene camisa ni pantalón.

Logan tiene su cabeza sobre el brazo izquierdo de James, mientras que su acompañante solo juega con su cabella con la mano libre.

-¿Logan?- James rompió el silencio.

-¿Si?-Respondió Logan sin voltear a mirarlo directamente.

-¿Quieres ser mi novio?- Pregunto el castaño dejando de acariciar el cabello del inteligente y con esta tomando su mano.

Logan no respondió nada en ese momento, se sintió culpable por haber pasado la noche con su amigo. El nombre de Kendall aun le dolía con solo pensarlo, sin embargo James había hecho todo lo posible por cambiar su actitud a algo positivo y eso parecía una buena señal para un nuevo romance, un nuevo inicio.

-¿Logan?-Insistió el castaño esta vez dándole un beso en el cuello.

-Si-Respondió Logan volteándose para mirar a James- Si quiero.

Hubo una sonrisa que parecía podría ocupar todo el espacio en el rostro de James, este volvió a besar los tan deseados labios de su nuevo novio.

-Gracias Logan-Dijo separándose levemente del beso, pero al terminar la palabra volvió a unir sus labios.

La mañana paso entre besos y caricias, esta vez ninguno lamentándose pues ahora que son novios no hay nada de malo en estar juntos de ese modo.

Así pasaron un buen rato hasta que dieron las 9:00 de la mañana.

-Voy a ducharme- Dijo James alejándose del rostro de su amor y dándole una sonrisa amigable, se levanto de la cama y busco su ropa en el suelo.

-Adelante-Respondió Logan sentándose en la cama y abriendo el cofre que dejo en el mueble la noche anterior, observo el contenido que era la tan preciada y odiada medalla de plata.

Kogan: La medalla de plata// TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora