Amor al Arte.

Obsesión.

Al subir al coche que esperaba por nosotros, Leandro estaba dentro, nos miramos unos segundos y sin saber porque, me arroje a sus brazos y lloré como nunca, derramando más lágrimas que la a ya derramada en toda mi vida y ¿porqué lloré?  por que el hermano de este hombre que me tenía entre sus brazos me dejó, aque que nos veía sentado a unos centímetros.

Según recuerdo, pasaron unos cinco minutos y me separe de él para veré aquellos ojos que también me enamoraron, eran hermanos pero esos ojos eran gris, aquellos que miré con rencor, mi mirada cambio cuando pude ver las lágrimas a punto de derramarse.

Le tome la mejilla con una mano y lo mire de cerca. -¿porqué lloras mi querido Marc?- no pide evitar preguntarle aún que tal vez sería por ver a la que pudo ser su esposa en brazos de su hermano.

-me duele saber cuánto pude haberte lastimado si te hubiera hecho mi esposa- su respuesta me confundió, creo que no sabe el por que de mis lágrimas.

-yo no lloro por verlo, me da gusto verlo de verdad, pero yo lloro por que me lastimaste Marc, de ver da quería cansarme- mi respuesta fue esa, tal vez no con las mismas palabras o algunas más pero el punto era ese.

-de verdad creí que le amabas Mila-
-si lo hago- pude ver sorpresa en todo lo qué podía ver de Leandro-pero no a él Marc, perdón si te he lastimado pero quiero aclararlo, amó a Leandro pero al Leandro que me inventé, al Leandro del que no sabía su nombre, al que pinte de día y soñé de noche al que me obsesióno por las diferentes estaciones del año pero ese no es tu hermano, es el que vive dentro de mi cabeza, de tu hermano apenas se su nombre, sin embargo, a ti aprendí a quererte aún que no te amo Marc, quería cansarme contigo hoy y me heriste, por eso las lágrimas Marc-.
Después de eso, salí del coche y camine ridículamente entre la gente con un vestido de novia y el maquillaje por todo mi rostro, al llegar a un pequeño parque Leandro se sentó junto a mi.
-así que, obsesión¿ he?-