Sólo Una Flor [Flowerfell]

Últimos Ecos.

     Talló sus ojos con los puños, se había quedado dormida quizás por cuanto tiempo... Abrió los ojos; estaba recostada en el césped,un par de Flores Eco repetían: ''Espero despierte pronto...Ha estado tan cansada, merece un descanso. Dulces Sueños, Sweetheart.'' 

Sonrió con dulzura... Se preguntó donde estaba Sans, trató de ponerse de pie, sin embargo algo pesado en su torso se lo impedía. Se giró, ahí estaba, nunca le había visto dormir... Curiosamente seguía teniendo la misma expresión seria que de costumbre, pero esta vez era aún más tranquilo. Le pareció adorable que se haya dormido seguro luego de un buen rato cuidándola, ya que aún corrían peligro del ataque de Undyne, hasta la había abrazado antes de dormirse.

-No vas a despertarlo?- Le preguntó una voz aguda e inquisidora.

-No aún, debe estar tan cansado como yo...-Respondió la chica, girándose y correspondiendo al abrazo de su acompañante.

-Insisto en que no me da buena espina.

-Primero; Te dijo el mismo que cuidará de mi, y segundo; No tienes espina, tienes tallo.- Respondió ella entre risas.- Deberías descansar también, Flowey.

-Así como ustedes? -La flor hizo una mueca de desaprobación que Frisk no vio, estaba muy ocupada acurrucándose entre los brazos ajenos para dormir otra vez.- No. Son demasiado dulces y empalagosos entre ustedes.

     Aún temía después del repentino ataque de la Líder de la Guardia Real, si con un par de ataques pudo acabar con ella, no quería ni imaginarse el qué podría hacerle en una verdadera batalla. De todos modos, se sentía segura pese a no saber qué haría Sans exactamente contra Undyne, seguro le preguntaría cuando despertase.

-El Jefe va a matarme...-Escuchó sobre su cabeza una voz somnolienta.

   Trató de aguantar la risa, pero ya había pasado un buen rato ahí acomodada como para atrasar el viaje, así que... Qué mejor manera de despertar a un esqueleto gruñón con una carcajada? Efectivamente, lo despertó de golpe, haciendo que él se sentara rápidamente y la cubriese con ambos brazos.

-Frisk!-Dijo en un tono alto y desesperado. La chica solo reía a carcajadas, hace mucho no reía tanto.- Oh dios mio... No hagas eso, por dios!

-Losiento, pero...-Habló con dificultad.- Dijiste dormido ''El Jefe va a matarme''.

-Y vaya que va a hacerlo.-Correspondiendo al chiste, sonrió.- Si solo se enterase de todo esto seguro que me haría picadillos. Pero mientras la loca de Undyne no le cuente nada; lo cual dudo que no haya hecho ya, todo estará bien.

     Siguieron el paso hasta un puente de madera, bajo este, había solo vacío, sostenido por unas débiles columnas del mismo material, Sans insistió en que la muchacha cruzara primero la construcción, a lo que ella se negó por el miedo de caer. Tras una larga discusión no llegaron a ningún acuerdo.

-Confías en mi?

-Claro que sí, no es momento para hablar de ello, tomemos otro camino porque no pienso pasar.

-Bien.- Ignorando su opinión, prosiguió, tomándola de los hombros y ubicándola frente a la estructura.- Cruza el puente.

   Una adorable riña de ''Cruza el puente!'' respondidos de ''No!'' continuó largo tiempo, terminando en risas y demasiada dulzura acompañado obviamente de quejas de Flowey de por medio. Finalmente, Frisk accedió a caminar con exageradamente mucho cuidado, como si la madera hubiese sido reemplazada por delgados paneles de vidrio. El esqueleto que estaba del otro lado simplemente no podía suprimir la risa por los pasos delicados de la chica al cruzar hacia el otro lado, insistiendo en que era de madera y no de papel, a lo que ella solo no prestaba atención por lo asustada y concentrada que estaba al caminar. Luego de un rato, logró pasar; como era de esperarse.

-Y ahora qué, cabeza hueca!?- Gritó del otro lado.-Como planeas pasar!?

-Mira y aprende! Por esto tu raza nos tenía miedo!- Rieron por el mal chiste algo ofensivo para ambos.

       En un dos por tres, literalmente la chica ni pudo ''Mirar y aprender'' como se le había dicho, Sans había aparecido a su lado, dejándola boquiabierta. 

-Qué demonios fue eso!? Sans! Si solo lo hubieses hecho antes, podríamos haber escapado de ese pulpo asesino, de Undyne, y prácticamente saltarnos todo y llegar hasta el punto de encuentro en un dos por tres!

-Soy demasiado flojo para usar este poder, además, fue mejor caminar juntos, verdad, Sweetheart?- Le sonrió dulcemente.

-Que asco!-Resonó una voz chillona desde atrás, haciendo que ambos rieran.

         Lo siguiente fue un corto trayecto en tierra y el resto lleno de pantano que la joven tuvo que cruzar -Obligada y a regañadientes- En los hombros de su acompañante. Las flores Eco crecían hasta en el agua, mientras que los insectos que parecían ser luciérnagas revoloteaban aquí y allá en todo el lugar.

-Cuanto falta? -Dijo cansada.

-No has caminado tanto como yo.- Le reprochó el mayor.- No mucho. Te dije, Waterfall es grande en comparación a Snowdin, incluso hemos tomado el camino corto, así que no has visto una buena parte del lugar. No es muy interesante de todos modos.

-Qué pasará cuando lleguemos con Undyne?- Se decidió a preguntar por fin, no iba a esperar a ver lo que ocurría si no estaba segura de que eso era lo que enserio quería.

-Pues sé que planeas hacer, pequeña; y te dejaré hacerlo.- La chica celebró con un grito de entusiasmo.- Pero no estés tan segura de que te dejaré ahí luchando mientras yo miro, Undyne no es como te la imaginas, ella no dejará que escapes, así que si las cosas se ponen muy feas y le da rabia y se vuelve loca como siempre, intervendré. 

-Esta bien, me aseguraré de usar la piedad y la amabilidad. Así no tendrá nadie que salir lastimado. Siempre se amable, nunca lo olvides.

       Al fin algo de tierra firme, frente a ellos se cernía una enorme montaña en la que una figura brillante y plateada estaba en la cima de esta. Parecía no haberlos visto, así que Sans resguardó a la chica tras el, asegurándose de seguir desapercibidos.

-Es ella?- Susurró la muchacha.

-Si... No se si esto sea buena idea, Sweetheart. Confío en ti, esta bien?

-Siempre se amable...- Dijo para si misma en un susurro.

       Dio un paso al frente, con algo de inseguridad, hasta las faldas de la montaña, tenían una entrada que seguía en un túnel, seguro Undyne quería alejarla de esta. La había visto ya?

La alta silueta se giró, parecía sorprendida ante una criatura tan pequeña y débil. Dos ojos dorados brillaron en la penumbra, el viento aullaba revolviendo con brusquedad los pétalos de las flores doradas en el cabello castaño de la muchacha, quien con una mirada apacible dirigida al ser con armadura reluciente estaba quieta, esperando algo que ni ella misma sabía lo que era. 

-Pensé que la protegerías.- Fue reprochado burlona y duramente.

-Cállate, pétalos. Confío en ella, y si algo se sale de control, me haré cargo.

     Ambos, escondidos de la mirada de Undyne, continuaron viendo lo que ya casi parecía un concurso de miradas bastante tenso. Sans volvió a recordar la sangre manchando la nieve, los gritos de agonía...Realmente algo que no estaba dispuesto a ver otra vez sin antes hacer lo posible por evitarlo, Undyne era fuerte, pese a que nunca lo habían hecho fácilmente podrían tener un enfrentamiento en el que ni idea quién sería el ganador, pero de que se mantendría un buen rato en pie; era seguro.

-Porfavor, mi flor... Sigue floreciendo para mi...- Dijo, viendo como finalmente una de las lanzas aparecía en la mano de la oponente mayor.