Capitulo 10 Viviendo la desilucion

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Al día siguiente de haber vivido todo eso con Bryan y tener oficialmente novio, no puedo evitar sonreír, al pensar que hay alguien ahí afuera que me quiere y que quiere compartir momentos especiales conmigo, siento excitación, emoción, alegrías, pero sobre todo entusiasmo.

Sin embargo no puedo evitar pensar en el que dirán, no puedo dejar de pensar en la cara que va a poner mi familia cuando lo sepan, sobre todo mi madre, no sé qué pueda decir, toda alegría esconde una tristeza de fondo.

Agobiado por mis pensamientos, me paro de la cama, y me dirijo a la cocina, ya estando en el sitio me dispongo abrir la nevera y saco los ingredientes necesario para realizar sándwiches, tengo tanta hambre que me preparo 5, después de eso preparo un gran vaso de Milo, y me dirijo de nuevo a mi cuarto con una bandeja llena de comida.

Ya ha pasado casi toooodo el día, y no he hecho más que hacer oficio y tener la casa limpia para que a mi madre no le toque llegar de su trabajo a realizar las labores domésticas, sería muy desconsiderado de mi parte, una vez todo limpio, dispongo a limpiarme a mí mismo y me dirijo a la ducha para darme un buen baño de agua fría.

Me encamino a la panadería, para comprar la torta favorita de Bryan que es la de oreo y así poderle hacer una visita y compartir tiempo con mi novio jajajaja cada que digo esa palabra siento cosquillas por todo el cuerpo, estoy muy feliz de verdad.

Siento que nada puede arruinarme esta felicidad.

Me encuentro ya con la torta entre mis manos, frente a la puerta de Bryan, algo agitado y sudoroso por haber subido esos cinco pisos, por las escaleras, insisto en que en este conjunto residencial debería haber puesto ascensores, pero bueno por mi chico hago esto y más.

Estoy tocando la puerta y nadie abre debe ser que ha salido con su familia, pienso en voz alta, me dirijo a mi casa dejándole un mensaje de que me busque en cuanto pueda, y me dispongo acostarme en mi cama.

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Han pasado ya dos días desde que Bryan me propuso que fuera su novio, pero no se digna a venir a verme ni siquiera se ha conectado en el Messenger, para hablar tan siquiera por chat, que estará pasando ¿será que se arrepintió?

No creo el se veía muy feliz el día que estuvimos en la colina, a no ser que sepa actuar muy bien pues y su actuación digna de un Oscar me hiciera caer en su trampa, basta Felipe (me reprendo) deja de pensar tantas bobadas, mejor vete a su casa y espéralo en la puerta hasta que llegue o salga en algún momento tendrá que hace, no entiendo porque no aparece pero tampoco entiendo porque siempre que quiero entrar en razón me hablo en mis pensamientos en tercera persona, ¿ seré un psicópata? Hay no Dios mío mejor me voy de una vez hahahhaa.

Pálido, así era como estaba.......

Al llegar a la casa de mi "novio" veía como unos señores extraños, estaban sacando sus pertenencias, muebles, cama, entre otras cosas que se encontraban, de repente puedo distinguir a alguien, que me resulta algo familiar me dirijo hacia él

- bue... Bu buenas tardes señor, ¿usted es el tío de Bryan cierto?- le digo a señor alto y canoso que se encuentra en la sala de la casa, estando yo parado en la puerta sin entrar a esa.

- oh claro que si, por supuesto- me responde con una sonrisa amable.

- Vera usted, resulta que Bryan no me contesta y estoy algo preocupado, yo soy su mejor amigo- respondo algo inseguro

- Ah tranquilo, no sé si sabrás pero apenas se están instalando y no creo que tengan internet, primero deben descansar de su viaje tan largo, ya sabes que de aquí a España son como 10 horas de vuelo si no es más dale tiempo y te responderá, si no te molesta estoy algo ocupado ellos me dejaron sus pertenencias y debo llevarlas a casa.

Yo asentí sin mostrarme sorprendido para no pasar por sorprendido en frente del señor y que no crea que en realidad fui su mejor amigos.

Esto no puede ser cierto, sencillamente no pudo haberse ido así de mi lado, sin ni siquiera despedirse y decirme lo que sucedía, como fue capaz de hacer eso sabiendo el amor que le tenía. Si me lo preguntan, hace 2 días decía que esta felicidad que sentía por Bryan ¿nadie me la podía arrebatar?, jumm que equivocado estaba el mismo me la arrebato, y en su paso hizo añicos mi corazón, sueno como una quinceañera devastada por su primer, soy chico lo sé pero eso no evita que tenga sentimientos.

No quería llegar a casa, me sentía de nuevo solo, vulnerable, no me debí haber ilusionado con un imposible, como puede ser tan tonto y no ver lo diferente que éramos, o bueno lo vi pero jamás quise admitirlo, me creí único y especial, cuando en realidad soy corriente y ordinario, estaba caminando sin darme cuenta llegue a un parque enorme que queda un poco retirado de casa, la verdad no sentí que hubiera caminado todo esto.

Miro a lo largo del parque se ve tan hermoso, recuerdos de Bryan vienen a mi cabeza, aquellos momentos que vivimos juntos, lo que yo creía que era tan real, fue solo un montaje de circo, que tonto fui.

En eso recuerdo el día en el que le dije te amo, su voz retumba en mi mente como si estuviera en carne y hueso a mi lado

-¡wau!- exclamo este con los ojos muy abiertos –no me esperaba venir esto Felipe.

- lo siento Bryan discúlpame en realidad se me salió, solo pensé en voz alta no tiene importancia- exclame corriéndolo hacia una lado y sentándome mirando hacia el norte.

- Relájate no hiciste nada de malo, es solo que me cogiste por sorpresa, yo te diría te amo para corresponder lo que me dijiste pero sinceramente no estoy seguro de que sea así, sin embargo es lo más cercano- dijo con una sonrisa educada.

Que estúpido fui, dije cambiando mi recuerdo, jamás me amo, el mismo me lo dijo y como fui tan estúpido de no verlo, como fuiste tan ciego, me reprendía, como no pudiste ver que si nadie te quería y nadie se acercaba a ti ¿porque lo iba hacer un chico como él?

Estoy tirado en el césped justo atrás del parque, el lugar está solo, soy el único ahí, cuando me dejo caer y cierro los ojos, aparecen en mi mente unas palabras del tamaño de un edificio de color azul oscuro, que dicen LASTIMA, ahí creí entender todo, esa fue la excusa que dio mi mente y mi corazón para mitigar el dolor causado por este chico.

A caso ¿tan patético me veía? Como para ser la obra de caridad de un chico popular, ¿me veía tan necesitado de compañía?, ¿notaban mi desespero por encontrar alguien con quien compartir? , siento un líquido tibio que baja por mis mejillas, siento que mi respiración se hace dificultosa, un nudo en la garganta se forma, me siento muy débil esto es una manifestación física del dolor.

No me importa estar en este parque tirado como un indigente, pero no quiero estar en casa y mucho menos tengo las fuerzas para pararme de aquí, solo pienso en todo como si fuera una escena que repite sin parar sobre mi mente, siento algo en mi pecho pero no identifico que es esta sensación.

No es justo, que me abandonen dos veces, no es justo que lo hagan de la misma forma, como si se hubiesen puesto de acuerdo, ¿A caso tan malo soy?

:\%

El Comienzo  de Mi Historia (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora