Han pasado dos semanas desde el beso, dos semanas desde la última vez que las chicas se encuentran a solas en una habitación.
Y el ambiente es un tanto incómodo.
Las dos chicas se encuentran en casa de Harriet, acostadas en la cama, una justo al lado de la otra.
Una canción suena de fondo y sus respiración son agitadas, sus manos sudorosas y sus estómagos llenos de mariposas, hipotéticamente.
Ninguna de las dos sabe como actuar, o que decir y sólo, están muy nerviosas.
Hasta qué Harriet toma valor y dice, "besas bien" mientras se gira para ver el perfil de Nayell.
La rubia se sonroja y dice, "creí que no recordabas nada" y luego también se gira, rozando su nariz con su amiga.
"Mentí, sorpresa" susurra la castaña, y después todo son lenguas rozándose y manos tocando.
Se besan esa noche y se susurran, "me encantas" entre cada beso y luego, piensan, que sí, esto funcionara.
O al menos eso creen.