Hoy, Mañana, Siempre (Clexa AU) (pausada)

Capítulo 1 - Un nuevo comienzo

LEXA

Después de dos horas de viaje, he llegado a Connecticut. Dentro de una semana empezará mi vida de universitaria y estoy bastante nerviosa.

- Oye pequeña, estas bien?- me dice Lincoln.

- Si tranquilo, solo un poco nerviosa- digo suspirando. Lincoln y yo nos conocimos en el orfanato, cuando yo tenia 5 años y el 7. El es mi mejor amigo pero es como un hermano para mí, no se lo que haría sin él, siempre está cuando lo necesito. El es mi grandullón y yo, soy su pequeña.

- Todo va ha salir bien, además, nos tienes a Anya y a mí- dice Lincoln sacándome de mis pensamientos.

-Lo se- digo sonriendo- estoy deseando que empiece mi etapa universitaria. Venga vayamos al apartamento que Anya se estará impacientando.

Indra y Gustus me adoptaron a los 15 años de edad. No es muy común que te adopten a esa edad así que supongo que tuve mucha suerte, aunque Anya también influyó en la decisión ya que, gracias a Lincoln, la conocí a mis 8 años y los tres nos volvimos inseparables. Cuando Anya supo que sus tíos querían adoptar a una niña no tan pequeña, hizo todo lo que estuvo en sus manos para convencerles de que me adoptasen a mí. Gracias a ella tengo una familia que me quiere y le estaré eternamente agradecida.

Mientras nos dirigimos a casa de Anya, veo a un angel. Está ahí parada a unos 10 metros de distancia y yo estoy tratando de observarla, como un cazador observa su presa. Es demasiado perfecta. No se si es producto de mi imaginación por el cansancio y estoy soñando o es real. Lincoln me esta hablando pero no le puedo prestar atención a lo que dice, solo tengo ojos para mi angel. Si, he dicho MI, pero no puedo evitarlo es lo más hermoso que he visto en mis 18 años de vida. Ella esta ida, sumergida en sus ideas, pensando quién sabe qué pero se la ve preocupada y lo único que me apetece es acercarme y protegerla de cualquier cosa que le aceche.

Es preciosa... tiene el cabello dorado, ojos azules e intensos, no me importaría mirarlos más de cerca... Entonces, ella me mira y me sonríe con la mirada y me ha hechizado, porque sé, que a partir de ahora seré esclava de su sonrisa.

No se cuanto tiempo llevo observándola cuando Lincoln, se pone delante mío para que le preste atención.

- Lexa, ¿ocurre algo? llevo un rato hablándote y no me estas escuchando.- Presto la atención a Lincoln olvidándome momentáneamente de mi angel.

- Si...No...- agacho la mirada apenada- lo siento es qué estaba sumergida en mis pensamientos. Lo siento mucho.

- No pasa nada peque, venga sigamos que ese es el apartamento de Anya- dice señalando a los pisos de enfrente.

- Claro- le suelto prestando otra vez toda mi atención a la rubia pero... no está, a desaparecido, ni siquiera la conozco y me siento apenada por no poder seguir contemplando su belleza.

¿Como se llamará?¿Estar estudiando en la misma universidad que yo? Entonces, un pensamiento cruza por mi cabeza: A lo mejor Anya la conoce. Y si es así... ¿Podría presentármela?Aunque... ¿Y si no le gustan las mujeres? o ¿y si no le gusto yo? Y si.... y si....

El resto del trayecto al apartamento lo hacemos en silencio mientras yo no paro de pensar en mi angel rubio. Si hay esta el MI otra vez... Que le vamos ha hacer soy bastante posesiva y cabezota. Aunque hay un pensamiento que no para de rondarme por mi cabeza...¿La volveré a ver? Espero que si... Necesito volver a ver su sonrisa.

Llegamos al apartamento y nos disponemos a entrar cuando una voz conocida nos llama la atención.

- ¡Linc, Lexa! Dios, ¡como os he echado de menos! ¿Habéis llegado bien? ¿Como estáis? ¿Estáis cansados? ¿...

- Anya, Anya, tranquila, relájate, respira- la interrumpo mientras sonrió- estamos bien aunque estamos un poco cansados.- La abrazo fuerte- me alegro de verte primita- le susurro al oido aunque lo suficientemente alto como para que el grandullón lo oiga.

- Yo también me alegro de verte enana.

- ¿Como que enana? Solo nos llevamos un año!- bufo indignada.

- Por eso mismo, E-NA-NA -me responde Anya.

- He echado de menos vuestras peleas absurdas- interviene Linc en la conversación mientras abraza a Anya.

- Como me alegro de que volvamos ha estar los tres juntos otra vez- digo totalmente emocionada.

- Yo también- me responden los dos a la vez.

- Bueno, entremos dentro- dice Anya mientras abre la puerta del apartamento

Cuatro horas mas tarde, estoy tumbada en mi cama. Estoy tratando de dormir mientras una cabellera rubia no abandona mis pensamientos. Miro el reloj. Las 22:59. Al de diez minutos dando vueltas en la cama, decido salir al balcón a que me de un poco el aire.

Cuando llevo un rato mirando las estrellas, un ruido capta toda mi atención y la vuelvo a ver. A mi angel. Pero esta distinta... rara... su cabello ya no es dorado sino rojo y su atuendo es negro. Y... ¿que es lo que tiene en la mano? ¿un peluche? o ¿una mascota?... Al de un rato, la veo desaparecer en la oscuridad de la noche. ¿Estará metida en algún lío? ¿Puede que mi angel sea un traficante de... algo? O incluso peor ¿Asesina a sueldo? ¿Será un demonio y no un ángel?

Me dispongo a volver a mi habitación mientras mi corazón me dice que debo de tratar de averiguar más cosas sobre mi ángel demonio...

Este es la primera historia que escribo. Madre mía, no sé como me he atrevido ha hacerlo, si ni siquiera soy de letras... soy de ciencias

Bueno... no se si esta bien escrito o si os va a gustar, aunque yo espero que si os guste. Me gustaría mucho que me dejéis un comentario de que es lo que os a parecido el capitulo.

Gracias