Hoy, Mañana, Siempre (Clexa AU) (pausada)

Capítulo 13 - De madrugada

LEXA

Estoy durmiendo pacíficamente cuando unos golpes en la puerta me despiertan repentinamente. Con toda la pereza del mundo, me levanto de la cama para ver quien osa despertarme ha esta hora tan intempestiva. Al abrir la puerta, me encuentro con mi vecina de en frente. ¡Como no! ¿Que le hace falta? ¿Azúcar?

- Amy ¿que pasa?- hablo adormilada y de mal humor por la hora que es. Las 3:27. Odio que me molesten mientras duermo.

- Lexa, siento molestarte a estas horas pero hay una chica borracha en el portal que no para de llamar a mi telefonillo preguntando por ti. Le he dicho que el tuyo es el cuarto izquierda y no derecha pero al parecer esta demasiado afectada por el alcohol para entenderlo.

- Oh... Lo siento- respondo bastante culpable a Amy teniendo en cuenta que no es su culpa el haberme despertado de mi fase REM, si no de la chica que ha llamado al telefonillo- gracias por avisarme- cojo mi móvil y las llaves de mi apartamento y salgo de casa cerrando la puerta tras de mí.

- ¿Necesitas ayuda?- me pregunta la vecina.

- No tranquila puedo arreglármelas sola- respondo mientras aprieto el botón del ascensor.

- En ese caso me vuelvo a mi casa, buenas noches Lexa- se despide Amy de mí.

- Buenas noches- y se va. Al de unos segundos, se abre el ascensor y entro en el. No puedo parar de pensar quien será la chica misteriosa que ha detenido mis horas de sueño. A lo mejor es Anya y se ha olvidado las llaves, aunque ella se quedaba en casa de Raven por lo que lo veo improbable. ¿Y si es Costia? Ai Dios, espero que no. Aunque... puede que sea... No no creo, aunque... y si... puede que sea Clarke. ¡Dios! Daría todo lo que fuera para que fuese mi ángel.

La puerta del ascensor empieza a abrirse y antes de salir cierro los ojos. Por favor que no sea Costia. Por favor, por favor... Que sea Clarke... Todavía con los ojos cerrados, voy avanzando lentamente a la puerta con los nervios a flor de piel. No se porque estoy tan nerviosa si tampoco es para tanto. Lexa, relájate, respira. Poco a poco, voy abriendo los ojos para encontrarme con una chica sentada en el portal a espaldas de mi. No le veo la cara pero estoy totalmente segura de que se trata de... ¡Esto tiene que ser una broma! Parece ser que mis plegarias no han sido escuchadas y el universo, los ángeles y todos los dioses se han puesto de acuerdo para torturarme con la constante presencia de Costia a mi alrededor. Al principio, estaba bien, éramos amigas pero ahora su presencia es un dolor de cabeza constante.

- Costia- lo que me faltaba, tener que encargarme de ella ¿a caso los Dioses no se han reído lo suficiente de mi? Lo único que me falta es que Costia se abalance sobre mí y me bese justo cuando Clarke pase por aquí para que mi vida se parezca a una telenovela.

- Le-xa....-se gira y me mira sonrientemente- te he ech-a-do d... de me-nos hoy.

- ¿Porque me pasa esto a mi?- digo suspirando de la frustración que siento.

- ¿Q-que?- pregunta ella con los ojos medio cerrados.

- Costia ¿ha que has venido?- digo cruzándome de brazos y viéndola con mirada interrogante.

- A verte- Dios por favor dame paciencia porque esta noche la necesito y mucho y si me das fuerza me parece que voy ha acabar matándola y no quiero ir a la cárcel.

- Mira, esto es lo que vamos a hacer, me vas a dejar tu teléfono y vamos a llamar a tu compañera de piso ¿de acuerdo?

- Pe-ero yo quier-ro qued...rme aquí  contigoo- contesta aferrándose a mis piernas cual Koala a un árbol. Estoy intentando que me suelte pero me es imposible- Costia suéltame por favor.

- Mmmm- me pone cara de cachorrito como si eso fuera a funcionar conmigo. Ella, al darse cuenta de que no va a poder salirse con la suya, o eso es lo que supongo, resopla y se despega de mí.

- Ahora tu móvil- demando con voz autoritaria. Ella al no realizar ningún ápice de movimiento, me tomo la libertad de coger su bolso y hurgar en el para conseguir mi objetivo: el móvil.

Ahora, dispongo de otro problema que no había previsto. Por lo visto, Costia se ha quedado dormida y a parte de que su móvil esta bloqueado, no se ha quien debo llamar para que vengan a recogerla. Con mucho cuidado, agarro su mano y lo acerco al móvil para poder desbloquearlo. Después de solucionar mi primer problema, miro las últimas llamadas y llamo a la primera de la lista: Echo.

Tonos de llamada...

- ¿Hola? ¿Costia?

- Ee... hola soy Lexa, Costia esta borracha a mi lado, te llamaba para que pudieses venir a buscarla.

- Oh esta bien ¿donde estáis?- le doy la dirección de mi portal para que sepa a donde debe venir y me dispongo a despedirme cuando ella me interrumpe repentinamente- yo no puedo ir pero voy a mandar a su compañera de piso en su busca ¿de acuerdo?

- No hay problema.

- Perfecto, un placer hablar contigo Lexa.

Corto la llamada y me siento a esperar junto a Costia. Los minutos pasan lentamente y estoy empezando a desesperarme. Desbloqueo mi móvil para ver la hora. 4:23. Me levanto, doy un par de vueltas y vuelvo a mirar la hora. Las 4:24. Salgo del portal sin importarme el frío y me apoyo en la puerta. Al de un rato, que me parece una eternidad, vuelvo a mirar la hora. Las 4:26. Agghh. Y grito. Grito de toda la frustración que siento. Yo no quiero estar aquí, pasando frío junto a Costia. Quiero estar en mi cama durmiendo o junto a Clarke tumbada en algún lado, en la cama, en el sofá o incluso en el suelo, me da igual siempre y que este tumbada porque en este momento estoy tan cansada que siento que voy a dormirme de pie, aquí junto a la puerta y no podría importarme menos.

Me encuentro medio dormida cuando escucho el ruido de un coche acercarse hasta mi posición. Dentro del coche, se encuentra un hombre de lo más intimidante, alto, corpulento con barba y con una cara de pocos amigos. Le veo salirse del coche y acercarse a mi, me mira como si estuviera estudiándome y se para a mitad de camino.

- ¿Tu eres Lexa?

- Si- respondo un poco incomoda por como me mira pero después de responderle cambia su actitud y se aproxima a mi.

- ¿Y Costia?- me pregunta mirando alrededor.

- Esta dentro- saco las llaves del bolsillo y abro la puerta para encontrarme a Costia en la misma posición que la había dejado- no hagas mucho ruido que está durmiendo- susurro al chico.

- Tranquila- se acerca a ella y la coge en brazos cuidadosamente para no despertarla- ¿puedes coger su bolso?- me pregunta mirando al objeto.

- Claro- lo recojo del suelo- oye, ¿no iba a venir su compañera de piso a recogerla?- pregunto mientras sigo al chico hasta su coche.

- No quería levantarse de la cama así que me a tocado a mí venir- responde el chico indiferente y metiendo a Costia en la parte de atrás del coche, justo en ese momento, el móvil de ella empieza a sonar y como tengo una vena cotilla, miro quién le está llamando. Al ver de quién se trata, me quedo de piedra. Se que el chico me esta diciendo algo pero estoy demasiado afectada y desorientada para prestarle atención y sin darme cuenta, ya se a marchado.

No se cuanto tiempo llevo parada en la calle desde que se han ido. Tardo en reaccionar, el cuerpo me tiembla y los recuerdos empiezan a apoderarse de mí. Esa noche de hace tres años nunca ha dejado de atormentarme. Una vez reaccionado, llamo a Lincoln rápidamente pero no me coge. Lo vuelvo a intentar pero nada. En el fondo no me extraña, estará dormido, por lo tanto, le escribo un mensaje: "Ella ha vuelto"

Hola chicos,
Siento mucho haber tardado tanto en publicar un nuevo capítulo. Voy a intentar actualizar más seguido pero no tengo mucho tiempo libre hasta Marzo
Un saludo y gracias por leer.