Capítulo 12 - ¿Que me has hecho Clarke?

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LEXA

Un mes. Ese es el tiempo que ha transcurrido desde que me desperté junto a mi angel. Al principio las cosas iban bien, tonteábamos y nos divertíamos juntas, pero poco a poco, las cosas fueron poniéndose más incomodas. Sobre todo por Costia que no para de seguirme a todas partes. Cada día me resulta más cansina y eso que le dejé claro muchas veces que el beso fue un error y que nunca debía de haber sucedido. Pero como siempre, ella decía que si no hubiese querido, no hubiera seguido el beso, por lo tanto, en algún lugar de mi subconsciencia aunque estuviese muy en el fondo, si quería besarla. A mí ese razonamiento me parece una ridiculez, en todo caso, la bese por celos y no porque sienta algo por ella porque en mi corazón solo hay sitio para mi Clarke. Pero ella ha insistido en que siento algo por ella y me ha dejado muy claro que va ha luchar por mí. Menuda perdida de tiempo. Ni en sus mejores sueños podría llegar a sentir por Costia lo que siento por mi bella Clarke. Clarke es en lo primero que pienso cuando me despierto y lo último cuando me duermo. Con que ella me regale una de sus maravillosas sonrisas soy feliz para el resto del día, ella hace de mis días perfectas. Estoy enamorada de ella ¿Sabéis como lo se? Porque ya no quiero conocer a nadie mas. A NADIE.

Nunca creí en el amor, mis padres me abandonaron y la primera chica con la que estuve me destrozo la vida. Se llamaba Ontari. La conocí en el orfanato un año antes de que me adoptaran. Era guapa pero todo lo que tenia de guapa lo tenia de malvada. Por su culpa me vi envuelta en varios problemas y si no fuera por Lincoln, ahora mismo me encontraría a tres metros bajo tierra. Le debo la vida a mi grandullón.

Todavía recuerdo aquella fatídica noche en la que nos vimos envueltos para no volver ha deberles nada a la reina del hielo y a su hijastra Ontari. Esa noche me trajo muchas pesadillas, pero por suerte, pensar en mi ángel me tranquiliza. Ella me ha hecho ser quien soy ahora. Una persona alegre y feliz, devolviéndome esperanzas y sueños que creía muertos. Por ella me enamoro de mis días, de la vida y de lo que hay en ella. Me cambia de humor con una sonrisa. He tenido mucha suerte al conocerla y estoy agradecida por esto. Estoy agradecida por ella. Porque ella me ha devuelto a la vida sin que yo supiera que estaba muerta.

Hoy es jueves, y como no me apetece ir a clase y tener a Costia pegada a mí como una lapa, he decidido quedarme en mi casa, concretamente hablando en mi habitación. Llevo todo el día durmiendo acurrucada en el mismo sitio donde estuvo Clarke. Se que parece una tontería pero esto me hace sentir más cercana a ella y me gusta esa sensación. Al de un rato, mis tripas empiezan a rugir obligándome a levantarme e ir a la cocina a comer algo. Como no tengo ganas de ponerme a cocinar, independientemente hablando de si cocino bien o mal, relleno un bol de cereales, cojo un Tetra Brik de leche de la nevera y me siento en el sofá del salón para comer mientras veo la tele. Normalmente no me dejan comer en el sofá porque lo pongo todo perdido, pero ¡que les den! Ellos no están en casa para regañarme y además estoy en todo mi derecho de comer donde quiera, sobre todo si me encuentro deprimida.

Una hora más tarde, vuelvo a mi cuarto con la intención de volver a acurrucarme en la cama, pero, al ver la guitarra, mis planes se ven trastocados. Cojo el instrumento, me siento en la silla del escritorio y empiezo a componer pensando en mi angel.

Baby, it's been a long time coming / Nena, ha pasado un largo tiempo

Such a long, long time / Un largo, largo tiempo

And I can't stop running / Y no puedo parar de correr

Such a long, long time / Un largo, largo tiempo

Can you hear my heart beating? / ¿Puedes oír mi corazón latir?

Can you hear that sound? / ¿Puedes oír ese sonido?

Hoy, Mañana, Siempre (Clexa AU) (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora