You're mine

Ya lo se todo

Capitulo 6:

Min conducía y no sabía a donde me llevaba. Aunque le preguntaba una y otra vez a donde íbamos, no me respondía y solo sonreía.

De pronto detuvo el auto y yo solo atiné por mirar a mi alrededor y vaya sorpresa. Estábamos cerca al mar.

—Oppa...

Min: ( cubre sus ojos ) Déjame guiarte ¿si?

—Pero...

Min: ¿Confías en mi?

—Si.

Min: Entonces solo déjame guiarte.

¿Como pude responder tan rápido? Porque era así, yo confiaba ciegamente en Min, si él me decía que la luna era cuadrada, yo le creería.

Caminamos por un buen rato, a cada momento me ponía mas nerviosa y emocionada.

—¿Ya llegamos?

Min: Espera un poco; ya casi.

Minutos después Min se detuvo y quitó sus manos de mis ojos, solo pude cubrir mi boca con mis manos por la sorpresa.

—Oppa, ¡todo es perfecto!

Min: Quiero que esta noche sea especial para dos. Siéntate.

En medio de la playa y bajo la luz de la luna, había una mesa con una deliciosa cena, adornada con flores y pétalos de rosas, todo era demasiado hermoso.

La cena estuvo entretenida, no era difícil divertirse con Min, todo en él era perfecto, para mi él era perfecto.

Min: Megan... hay algo que quiero decirte.

—Dime oppa ( sonríe )

Min: Desde que te conocí, yo creo que me enamoré de ti. El día en el que contaste que un chico que te gustaba se avergonzaba de ti, lo primero que pasó por mi cabeza fue "es un idiota o es ciego" porque tu eras perfecta hasta antes de que quisieras cambiar. Tu forma de ser, tu sonrisa, toda tu me gustas. Antes no me sentía seguro de decírtelo, pero ahora siento que puedo hacerlo. ( saca un anillo de su bolsillo ) Megan, yo-yo te amo.

Sentí como mi piel se erizó cuando deslizó el anillo en mi dedo después de su hermosa confesión. Min había preparado todo eso para confesarme que me amaba, no pude evitarlo y algunas lágrimas resbalaban por mi mejilla, me sentía estúpida al amar a un chico que jamas haría nada de lo que Min hacía por mi.

No pude responderle, así que solo me acerqué a él y lo besé, lentamente, él correspondía y sus manos se posaron en mi cintura.

Los minutos pasaban y yo ya me encontraba sentada en las piernas de Min mientras nos besábamos y tocábamos cuanto queríamos.

La adrenalina corría por mis venas al pensar que alguien pudiera verme de esa manera con Min.

Sus manos subieron un poco mi vestido para que pudiera acariciar mejor mis piernas y mis manos desabotonaban su camisa para después acariciar su pecho.

—Min ( gime ) ¿Y si alguien nos ve?

Min: No hay nadie aquí, es tarde...

Sentí la mano de Min acariciar mi feminidad y tuve que hacer un esfuerzo increíble para no gemir tan fuerte. Por instinto mis caderas se movían mientras introducía otro de sus dedos para sacarlo y meterlo. Solo atiné a besarlo desesperadamente con el intento de no gritar del placer.

—Oppa... voy a... voy a correrme...

Min: ( la besa ) Hazlo, no te contengas...

Aumentó la velocidad de sus dedos y al fin me corrí. Mis piernas se sentían como gelatina y mi corazón estaba demasiado acelerado.