You're mine

Era tan malditamente correcto que dolía

Capitulo 15:

Estaba frente a mi casa, y aun no podía creer lo que había hecho. Sentía a Min detrás de mi, y agradecía inmensamente que se quedase en silencio porque no me sentía preparada para decir absolutamente nada.

Había hecho lo correcto. No cabía duda. Changjo no podía continuar comportándose de esa manera tan inmadura.

Junté todas las pocas energías que me quedaban para girarme hacia Min y sonreírle.

—Gracias por acompañarme Min.-traté de sonreírle-.

—Esta bien.-me miró preocupado-. Pero tu. ¿Estas bien?

—Sinceramente... no lo se.-dije rendida-. Solo estoy segura de que hice lo que tenía que hacer.

—De eso puedes estar segura. ¿No quieres que me quede contigo un poco mas?

—No creo que sea necesario. Es mejor que vayas a casa.

Min solo asintió y se acercó para abrazarme, y se fue. Esperé hasta que su auto desapareció y entré a casa. La madre de Min obviamente ya se había ido, y no veía a la mía por ninguna parte, por lo que fui directamente hacia mi habitación. Cuando abrí la puerta, no pensé encontrarme con mi madre sentada en mi cama, al parecer esperándome. Sabía que quería preguntarme que había pasado como para que saliese de esa manera tan apresurada de casa, y no sabia si estaba lista para hacerlo.

—Me llamó mi ginecólogo y me dijo que pasaste por su consultorio.-me dijo seria-. Al inicio de verdad me sorprendí y hasta me asusté, pero me dejó muy desconcertada que hubieses ido con una amiga.-bajó la mirada-. Sé que sonara horrible, pero me alegró que no hubieses sido tu. Sin embargo, me desconcertó que esa amiga fuese Krystal.

—¿Tenemos que hablar de eso ahora? La historia es bastante larga, además... estoy segura que muy pronto te enterarás sola y entenderás muchas cosas.

—Quiero que seas tu quien me lo cuente.

—¿Recuerdas a Changjo?.-ella asintió-. Pues él es el padre.

Mi madre me miró sorprendida, pero no dijo nada, por lo que continué.

—Descubrí que Changjo me engañaba cuando fui a una fiesta y lo vi. Ellos se estaban besando y no supe que mas pasó luego, aunque lo intuí. Fue por eso que no quise hablar con él el día en que nos fuimos a de viaje. Pensé que había cambiado, pero no fue así.-dije casi en un susurro-. Cuando regresé del viaje, se extendieron ciertos rumores sobre Krystal, y al inicio no le tomé importancia, pero luego la encontré destrozada, llorando en los baños de la escuela, y entonces si que me importó. Me contó que... estaba embarazada de Changjo y yo... solo me sentí peor de lo que ya me sentía, pero sabía que mi dolor no podía compararse con el miedo y la angustia que podía haber estado sintiendo Krystal en ese momento, por lo que decidí ayudarla aunque no fuésemos amigas. Por unos pocos segundos pensé que ella se lo merecía, pero luego me arrepentí y... no podía simplemente dejarla sola. Sé que soy una tonta idiota al preocuparme por la mujer que lleva al hijo del hombre que amo pero...

No pude decir nada mas pues el nudo en mi garganta no me lo permitió. Sentí los brazos de mi madre rodearme, y me sentí algo mejor, pero el dolor seguía allí.

—Cariño, no eres tonta y mucho menos idiota. Eres una persona estupenda. No creo que muchos hubiesen tenido el coraje que tu tuviste. Imagino que no fue nada fácil. Pero, ¿tiene todo esto que ver con que hayas salido de aquí de esa manera?

—Si.-asentí-. Krystal... me llamó porque.-hice una pequeña pausa para tratar de calmarme-. Changjo quería que ella abortara. Ella no quería y no sabía que hacer, por lo que fui en su ayuda. Mamá, te juro que jamas me había sentido tan enojada y dolida en mi vida. Sé que lo que hice es lo correcto, pero me dolió tanto, me duele tanto...