You're mine

Bromas

Capitulo 12:

El resto de la tarde nos la pasamos dando vueltas por los alrededores con Venus, quien parecía estar mas que cómoda conmigo. Era increíble como con pequeños gestos, Chunji había logrado hacer que olvidara todo lo malo que me había pasado. No pensé que Chunji fuese de esa manera. En realidad siempre había pensado que era simplemente un mujeriego, pero me había equivocado completamente con él. Me estaba divirtiendo mucho.

—Creo que deberíamos regresar a casa. Se está haciendo tarde.

—Aun no.-dijo como una niña-. Si nos estamos divirtiendo mucho, ¿verdad Venus?

Como si de verdad quisiese responder, Venus hizo un extraño sonido que hizo que tanto Chunji como yo, nos riéramos a carcajadas.

—Es enserio. Además, tenemos que alistarnos para la fiesta de esta noche.-cabizbajo-.

—No te preocupes.- le sonríe-. Trataré de hacer que te diviertas. Y así podrás entender porque mis padres no me llevaban a las fiestas de los grandes cuando era pequeña.-sonríe maliciosa-.

—¿Estas hablando enserio?.-ríe-. No puedo esperar para que sea la fiesta.

Regresamos al establo y dejamos a Venus, para después ir hacia la gran mansión de Chunji. Me acompañó hasta la puerta de la habitación en la que me estaba quedando.

—Entonces, ¿nos vemos mas tarde?

—Dalo por hecho.- le guiña un ojo.-

Chunji se alejó aun riendo, y yo solo cerré la puerta y comencé a buscar algo apropiado para la fiesta. ¿Debía ponerme un vestido? Eso era mas que seguro. Abrí mi maleta, y por arte de magia, había un vestido en ella. De seguro había sido mi madre. Suspiré y me metí al baño para darme una ducha, pero en vez de una ducha, había una bañera. Sonreí y me preparé un baño de burbujas. Me metí y no pude evitar soltar un suspiro, se sentía tan bien. Mi cuerpo se sentía como en las nubes, y tan relajado. No sabía cuanto tiempo había pasado, pero posiblemente era mas de una hora. Salí de la bañera y me envolví en una toalla, para después salir del baño. Ya en la habitación, observé mejor el vestido. No era tan corto, de color marrón con unos detalles en blanco, era bastante elegante. Sonreí ya que me gustó la elección de mi madre y me puse primero mi ropa interior, y luego el vestido. Me miré en el espejo y me pareció mas que perfecto. Me puse unos zapatos altos, un poco de maquillaje, un peinado simple, y ya. Estaba lista. Me di una última mirada en el espejo, y entonces, escuché como alguien tocaba la puerta. Al abrir, una sonrisa se formó en mis labios.

—¿Vienes por mi?

—Wow, estas hermosa.

—¿De verdad?.-sonrojada-. Tu también te ves muy bien.

—Gracias.

Chunji vestía un elegante traje, que lo hacía ver extremadamente sexy. Tal vez por el hecho de que era la primera vez que lo veía en un traje de gala.

—Entonces, ¿nos vamos?

Me indicó que entrelazara mi brazo con el suyo y así lo hice. Caminamos hacia el salón, y cuando estuvimos dentro, no pude evitar sorprenderme. Era increíble, y elegante. Decir elegante era hasta poco. Las demás personas, vestidas con ropa elegante, se paseaban saludando a todo el mundo. Era exactamente como lo recordaba. De niña me encantaba hacerle bromas a las personas. Cosas como, derramar vino accidentalmente en el vestido blanco de alguna mujer, hacer que una mujer le diese una bofetada a algún hombre por tocarle el trasero, o pisar el vestido largo de alguna mujer. Todos esos recuerdos hicieron que una sonrisa se formara en mis labios.

—Estas recordando cosas malas, ¿no es así?

Miré a mi alrededor y divisé, cinco mujeres con vestidos largos, cuatro mujeres con vestidos blancos, y algunas mujeres con el trasero bastante grande, comenzaba a dudar de que fuesen naturales.