Messages»camren

XC

Me:

Lo lograremos juntas, no te rindas chica de los ojos bonitos.

Enviado 2:50pm

6:17 pm. Residencia Jauregui.

— Vamos Lo, tu puedes hacerlo.— animaba la castaña.

— No puedo hacerlo Camila, estoy cansada de todo esto.— comenzó a decir.— Ya no quiero estar aquí, no puedo ir al baño sin caerme, o seguir mis estudios. Soy una inútil Camila.

Esto hizo que el corazón de Camila se aplastara. Meses habían pasado desde que Lauren seguía con su mismo carácter, sus palabras ofensivas hacia ella.

— Pronto dejaras esa silla, lo sabes Lo.— quiso acercarse pero la ojiverde no la dejo.

— No Camila.— la detuvo.— Sus estúpidas palabras de animo y compasión no funcionan, no hacen mas que provocarme un dolor de cabeza. ¿Que no entiendes? No llevo días así, llevo meses Camila, meses.— su voz subía de tono.— Todos creen que pronto me levantare y caminaré como si no hubiese pasado nada, pero no es así, no hay progreso, doy unos pasos y caigo.— sus ojos comenzaban a picar.

— Pero Lo...

— No Camila...

— La terapia funciona, antes no podían ni levantarte...

— Basta Camila.

— Solo tienes que poner empeño en esto...

— Camila, quiero estar sola.

— Puedes hacerlo, yo prometo que-

—¡No! ¡Basta de palabras! ¡Basta de falsas promesas! ¡Jamas volveré a levantarme de aquí! ¡¿Porque no pueden aceptarlo?! ¡Yo lo acepte!.— llevo sus manos a las ruedas de la silla.— ¡Maldita sea!.— grito y dio un golpe fuerte a su puerta.— Solo dejame tranquila.

Lauren empujo su silla con las manos y salió de la habitación.

Camila, con lágrimas saliendo de sus ojos y su corazón latiendo por cada palabra de Lauren, cayó de rodillas. Quedando sentada llevo sus manos al rostro y sollozó en silencio, no quería que la ojiverde volviera y la sorprendiera llorando.

Después de unos minutos, se puso de pie y arreglo su vestimenta, se miro al espejo en la habitación de Lauren y salio. Esto no estaba funcionando.

Algo tenia que hacer y sabía que se lamentaría por esto, ella lo prometió. Y vaya que odiaba a las personas que rompían sus promesas, y ahora ella era una de esas.

Se despidió de Taylor quien hacia la cena, poniendo como excusa que su madre la llamaba. No vio a Lauren, pensó que estaría intentando darse un baño, salió de la casa y se dirigió a su casa.

Subió a su habitación sin saludar a sus padres, se encerró en su habitación y coloco música en su estéreo, la canción de Perfect, Simple Plan, se escuchaba por su habitación.

Sus lágrimas nuevamente no se hicieron esperar, se desvitio y entro a su baño, tomo una ducha y al fin pudo descansar.

Normani:

¿Como esta Lo?

Recibido 10:28 pm

Me:

Lo siento Mani, no puedo seguir con esto.

Enviado 10:30 pm

Has bloqueado a "Normani".

Durmió tanto como pudo, pues su alarma la molesto a las 6:00am, desafortunadamente era un día martes, tenia que ir al instituto.

Llegaba justo a tiempo, entro a su clase y espero a su primera clase comenzara. Dinah entro por la puerta y se sentó a su lado, entregándole una tableta de chocolate.

— Gracias.— le dijo sin mirarla.

— Sabia que lo necesitarías.— le dijo sincera, miro anla castaña y se dio cuenta de que no llevaba maquillaje.

— ¿Puedo pedirte un favor, Cheechee?.— pregunto a su amiga, comiendo su dulce.

— Lo que sea Chancho.—

— Por favor, ya no menciones a Lauren.— casi le rogó.

La polinesia sin saber el porque tan repentino cambio, acepto. El profesor llego y sus clases siguieron normales. No vieron a Normani por ningún lado, hoy tenia entrenamiento de porristas, así que se dirigió al vestidor de chicas, cambiando a su uniforme.

Tampoco vieron a Normani ahí, y era demasiado raro ya que la morena jamas faltaba a los entrenamientos, su vida se basaba en esto.

— Hey Mila, alguien te busca.— le grito una chica con el aatuendo de porristas.

— ¿Quien e-

— Hola mi amor.— un chico con un ramo de rosas salia del escondite, cabello castaño y una sonrisa perfecta para muchas.

— Espero que mandes a volar a este idiota, o yo misma te haré volar.— le advirtió su amiga, quien se fue rápidamente.

— Scott, yo ya no soy nada para ti.— le recordó al chico. Éste solo río irónico y se acerco a ella.

— Pero eso lo podemos agregar Mila.— La tomo de sus muñeca y la acerco a él. Con la mano libre paso un mechon de cabello por detrás de su oreja, ahuecó su mejilla y sin permiso alguno, la besó.

Camila quería separarse, realmente quería hacerlo pero...

Pero su corazón dolía tanto que no lo hizo, siguió el beso tanto como el chico la aprisionaba contra la pared, hacia mucho tiempo que no besaba a alguien, pero sus labios deseaban los de cierta ojiverde. Los labios del chico eran muy ásperos, sin mencionar que su barba picaba mucho y sabia que irritarian su rostro.

Lauren la había lastimado, ella no agradecía lo que hacia, se sentía impotente por no hacer más, pero no era su culpa. Quería a Lauren, pero la ojiverde estaba tan empeñada odiando a si misma que no se daba cuenta que alguien la comenzaba a amar.

— ¿Que dices princesa?.— pregunto el chico al separarse. Le entrego las rosas y Camila, con rodó el orgullo que tenia dentro, hablo.

— Acepto.— una sonrisa fingida se formo, el chico no puso atención a esto y volvió a besarla.

La presionó aun más y con mucho desagrado, Camila sintió un bulto que se formaba en su pierna derecha, el chico la acercaba más a el y pudo sentir el amiguito del chico.

Cerró los ojos y se dijo a si misma que era mejor olvidar habla ojiverde, y concentrarse en cosas más importantes, Lauren no la necesitaba.