Overwatch: El reencuentro y la Saga de Mercy

El Reencuentro (Final): No necesitamos otro héroe

Ambientado tras el corto "Hero": https://youtu.be/aAPcpJkSGBw

El duro calor del desierto rodeaba al equipo de héroes, Genji hincado sobre sus piernas se dejaba llevar por sus pensamientos mientras observaba el comunicador de Angela, tirado en una remota parte del desierto, aunque le extrañara la razón de porque estaba tirado en medio de Irak, no le extrañaba que Angela estuviera por ahí, ella siempre quería ayudar a las personas e Irak al ser uno de los lugares mas pobres y afectados por la guerra parecía el lugar ideal, pero ¿Porqué tiró su comunicador?, él no lo entendía simplemente, Overwatch era su segunda casa para ella, porque abandonarlos de repente justo cuando están a punto de volver a reunirse, no tenía sentido; Angela era la única persona de Overwatch con la que Genji entabló una verdadera amistad y la conoció muy bien; sin embargo no había motivo que el conociera como para dejarlos así sin mas, sin explicación alguna, nada. En eso Genji escuchó el sonido de Tracer teletransportándose atrás suyo.
-Fui a preguntar al pueblo a ver si alguien la había visto pero nadie me hi zo ab so lu to caso.
Antes de que Genji pudiera responder, Winston se comunicó con ellos desde la nave.
-Chicos, vuelvan a la nave, no..., no creerán esto.-Dijo Winston con un gran tono se sorpresa
-¿Y qué hay con Angela?.-Dijo Genji con leve preocupación
-Luego seguimos con eso, ahora tienen que venir a ver esto.
-De acuerdo Winston vamos para allá
Genji y Tracer avanzaron con gran velocidad a la nave, el duro calor apenas era perceptible para Genji dentro de su traje y a Tracer no parecía importarle demasiado pues se movía con gran agilidad en la brillante arena, cuando llegaron a la nave vieron a Lucio, Winston y Törbjorn reunidos frente al monitor principal de la cabina.
-¿Será posible?.- Dijo Törbjorn con gran sorpresa
-No lo se.-Respondió Winston
-Pero si por lo que me cuenta el estaba muerto ¿no?.-Dijo Lucio mientras apuntaba a la pantalla
-Solo colocamos una placa, nunca hubo cuerpo, pensamos que la explosión había destruido todo lo que quedaba de el.-Dijo Törbjorn con cierta melancolía.
-¿Qué sucede?.-Dijo Genji mientras subía las escaleras a la cabina.
-Por 2.- Dijo luego Tracer mientras rápidamente se teletransportaba al lado de Lucio
-Genji no se si lo recuerdes y tu Tracer te debes de acordar, pero parece ser que Jack Morrison, nuestro comandante, sigue con vida.-Dijo Winston mientras volteaba a ver a sus compañeros y apartaba la vista del monitor
-Pero, pero....-Dijo Tracer con cierta tristeza en sus palabras
-El, el murió.-Completó Genji la frase de Tracer
-Nunca encontramos su cadáver.-Dijo Törbjorn con los brazos cruzados
-El punto es que nos llegaron sus coordenadas, no sabemos de quien ni cómo, pero sabemos que esta en alguna parte de Dorado, México.-Dijo Winston
-Puede ser una trampa, que mejor forma de que nuestros enemigos venga n por nosotros que prometiéndonos el regreso de nuestro líder.-Dijo Genji viendo cara a cara a Winston
-Sé que puede ser una trampa, pero si no lo intentamos puede que nos arrepintamos, en estos momentos y con lo que se viene encima, vamos a necesitar alguien capaz de llevarnos a la victoria de la misma forma que lo hizo él.-Dijo Winston
-Por mi esta bien, unidos no podrán vencernos suponiendo que sea una trampa.-Dijo Lucio con cierto ánimo en su voz.
-De acuerdo, hagámoslo.-Dijo Törbjorn igualmente animado
-Allons-y Alonso, vamos allá.-Dijo Tracer mientras ponía una leve sonrisa
Winston miró con una semi sonrisa a Genji quien agachó ligeramente la cabeza para luego volver a subirla.
-Esta bien, hagámoslo.-Dijo Genji de una forma mas seria que los demás.
-Athena, nos harías el honor de llevarnos a Dorado, México.-Dijo Winston mientras volteaba a ver de nuevo el monitor
-Recibido Winston, cargando propulsores, destino Dorado.
La nave tomó vuelo con velocidad, dejando atrás no solo el infernal desierto iraquí sino a su vez la única oportunidad de ayudar a Angela en su lucha contra su mas feroz enemigo.

24 horas antes en un bar de las calles de Dorado
La poca luz que entraba no ofrecía un ambiente acogedor, el suelo estaba cubierto de cerveza rancia, orina, colillas de cigarro, saliva y tequila, sin embargo era el lugar favorito de Ramón Cervantes, nadie hacía preguntas solo tomabas tu bebida, pagabas y te ibas sin causar mayor escándalo, Ramón se sentó en uno de los bancos del local y dejó su sombrero en el banquillo de al lado, pidió lo de siempre, un mezcal proveniente del estado de abajo, Oaxaca, empezó a tomarse lentamente su bebida, secando sus arrugados labios con la lengua, saboreando con despacio cada una de las gotas del picante, amargo y pesado sabor de la bebida, el leve estruendo del vasito de cristal chocando contra la madera le otorgaba un poco de tranquilidad del ambiente en que se metía, al principio se encontraba perdido en sus pensamientos pero entonces empezó a escuchar una noticia en la tele a lo cual agudizó sus oídos y volteó a ver la la tele que se encontraba colgando en una esquina del local.
-Muchas gracias Miguel pues como bien comentabas nos encontramos aquí en el municipio de Dorado donde hace algunas horas tomó lugar una fuerte explosión, algunos de los habitantes del lugar denunciaron a las autoridades escuchar fuertes disparos solo para que unos pocos minutos después un fuerte estruendo proveniente de una explosión causará el pánico entre los habitantes, la cual por suerte no dejó ni víctimas ni heridos, las autoridades ya han acordonado el área e iniciaron las investigaciones pertinentes, el presidente municipal ha solicitado la calma entre los habitantes declarando que los culpables del daño a la infraestructura de la ciudad serán llevados ante la justicia, sin embargo algunos testigos sitúan a miembros de la pandilla "Los muertos" como responsables del atentado puesto que algunos vieron a gente con el rostro pintado de la misma forma que los miembros de esta pandilla; sin embargo las teorías no se han hecho esperar y algunos apuntan a que algunos miembros del apenas existente cártel "Los Mendoza" entraron en conflicto territorial con la ya mencionada pandilla, este cártel es el segundo sobreviviente a la crisis ómnica y para algunos teóricos luce normal que estos quieran retomar el control de sus territorios, sin mas que comentar volvemos contigo al estudio Miguel.-Comentó la reportera mientras detrás de ella había varios carros de policía y cintas de luz de "prohibido el paso" de color amarillo, el lugar lucía en ruinas con múltiples escombros.
El cambio al rostro del presentador fue repentino, el presentador vestía un traje y tenía una cara seria.
-En otras noticias, las investigaciones sobre la masacre ocurrida el día de ayer en los bosques de Rusia....
Ramón dejó de prestar atención, simplemente dio un trago rápido a lo que quedaba de su mezcal y abandonó el lugar sin pagar; el cantinero solamente lo mando a "chingar a su madre" cuando este le dio la espalda, no quería meterse en problemas como su anterior empleado. Ramón empezó a hacer una llamada mientras observaba el mar bajo sus pies, su cara de enfado era evidente.
-Oye güey, tráeme un grupo de hombres, aquí a las afueras del pueblo, me vale madres si están ocupados, los quiero ya, va, nos vemos güey.-Cuando acabo de hablar colgó su teléfono y se repetía a si mismo en voz baja.-vale madres, pinche bronca en que se metieron esos pendejos.
A la par de esto en otra parte de Dorado.
La destrucción del lugar era demasiado para simple artillería, Damián Velasco lo sabía, o mejor dicho, el Detective Damián Velasco lo sabía, simplemente no le parecía lógico que hubiera sido un enfrentamiento entre pandillas, la falta de cámaras de seguridad dificultaba la reconstrucción de la escena, no podían saber con certeza que había ocurrido, solo sabía que los cadáveres en el tejado implicaban claramente a la pandilla "Los muertos", a pesar de su aspecto improvisado y de simples ladronzuelos, Damián sabía que eran hombres de cuidado, no cualquiera podía hacerles frente y sin embargo múltiples cadáveres de ellos fueron encontrados muertos de un simple tiro en la cabeza, una herida cauterizada indicaba que no había sido un arma de fuego, podía ser una de esas armas experimentales del ejército, pero esas era imposible conseguirlas en México, pero no había otra explicación posible, el resto de armas eran de fuego, el fondo del callejón estaba cubierto de agujeros de ametralladora, eso indicaba que si "Los muertos" portaban armas de fuego y el o los atacantes portaban rifles de plasma o de alguna otra clase, atacaron por el fondo del callejón, el fuego parecía ser intenso, pero no había marcas de plasma en las paredes, el que lo había hecho o los que lo hicieron poseían una puntería sin igual, sin embargo había algo que no cuadraba para el, el callejón era muy pequeño para que un equipo táctico pudiera haber entrado, se estarían golpeando muy seguido y las coberturas no había muchas, eso implicaba que aunque pareciera imposible, solo podía ser una persona o un ómnico, esa habilidad nunca la había visto en ningún ser humano, tenía que ser un ómnico, no era un secreto que "Los muertos" tenían pleitos graves con todos los ciudadanos ómnicos, hace poco ocasionaron una importante revuelta en la Ciudad de México enfrente de un centro de reunión importante para los ómnicos, tanto humanos como ómnicos salieron gravemente heridos, para Damián parecía claro que había sido un ómnico, ahora solo tenía que encontrarlo.
-Detective, venga, creo que le gustará ver esto.-Dijo un oficial ómnico ubicado en un muro hasta el fondo del callejón.
-¿Qué sucede?.-Dijo Damián mientras se levantaba y se acercaba al muro
-Parece ser que el escáner detectó unas huellas en la barda y no parecen tener demasiado tiempo
-Excelente, llévaselas al forense, si sabemos quien estuvo aquí puede ser que tengamos o al culpable del tiroteo o por lo menos un testigo.
-Muy bien detective.
Damián empezó a caminar afuera de la escena del crimen, iba a empezar a buscar si había registros de ómnicos que hubieran tenido algún conflicto con "Los muertos" y en especial alguno que tuviera programadas habilidades de combate y en eso vio como algunos oficiales tomaban sus vehículos y salían de la escena del crimen a gran velocidad.
Minutos después en una casa en un cerro cercano.
Soldado 76 ya se había recuperado del combate, la casa que le había conseguido su único contacto en México le permitía descansar entre combate y combate, la operación no había salido del todo bien, pero esperaba que cumpliera su cometido, sacar a la luz al comandante del cártel "Los Mendoza", su contacto quien estuvo tiempo en la organización sabia que "Los muertos" no eran mas que una fachada, eran los que le hacían el trabajo sucio a los del cártel, su pinta de revolucionarios no era mas que para poner una excusa a lo que hacían y la gente no sospechará que realmente lo que muchos consideraban un cártel con poco poder y nula influencia en el gobierno, realmente era quien movía los hilos del poder, al menos eso era lo que su contacto le decía, en eso su comunicador empezó a sonar.
-¿Qué sucede Sombra?.-Dijo el Soldado con una voz gruesa y gangosa.
-Parece ser que causaste un gran escándalo en Dorado, un montón de policías tan por la zona.-Respondió la voz de una mujer joven.
-Opusieron resistencia, un poco mas de lo que esperaba.
-Bueno no importa ekis, de momento no ha habido comunicaciones por parte de "Los muertos" sobre el jefe del cártel, pero con un escándalo de este tamaño y el hecho de que acabaste con un importante cargamento de armas, créeme seguro no tardaremos mucho en tener noticias, mientras no se, descansa, conoce el pueblo, algo así.
-Ya veré que hago, Sombra, como vas con mi parte del trato
-Sombra, como vas con mi parte del trato.
-Bien, no te preocupes, seguro que cuando acabes con el cártel, tengo la información que necesitas.
-Ya lo veremos.
Soldado 76 recogió su rifle de pulsos, empezó a observarlo y le dio una pequeña limpiada, realizó un conteo de los "campos bióticos" que le quedaban, eran su única fuente de sanación en combate, aún contaba con una buena cantidad, por lo menos suficientes para varios combates seguidos, decidió salir de su guarida, tomó su equipo y un par de campos bióticos, cuando salió el sol de la tarde pegaba fuerte, Soldado no reparó en la hermosa vista del pueblo y el océano y empezó a caminar a través de la densa selva con rumbo al pueblo
Mientras tanto en una zona peligrosa del pueblo de Dorado.
El camino apenas pavimentado no era mucho problema para las camionetas de los oficiales de policía, pues al estar flotando levemente sobre el suelo el camino no era mucho problema para ellos, en la camioneta del fondo se encontraba Ramón, solo portaba un chaleco con las letras PGR en blanco y mayúscula, las tres camionetas y los dos vehículos escolta no eran realmente para una operación oficial, sino mas bien algo fuera del trabajo oficial, aunque para Ramón ese era realmente su trabajo, las camionetas y carros se detuvieron frente a un gran edificio que en antaño era una fábrica, los 18 oficiales bajaron de los vehículos armados con rifles de combate estándar, Ramón bajó igualmente y se acercó a la puerta de la fábrica, tocó tres veces y una persona abrió una pequeña rendija.
-¿Quién?.-Dijo arrastrando levemente las palabras
-No te me hagas pendejo, que si quiero los meto a ti y a tu gente al bote, órale, abra la puerta o yo lo hago.-Dijo Ramón con gran velocidad y seriedad
La puerta realizó un fuerte chirrido y lentamente se fue abriendo, el lugar empezaba a apestar a diferentes tipos de droga, hasta se percibía un leve olor a gasolina, Ramón era escoltado por 13 oficiales encapuchados, Ramón solo maldecía en su cabeza al ver a los miembros de la pandilla "Los muertos" drogándose y jugando con pistolas, el lugar estaba casi sumido en la oscuridad, salvó por unas pocas luces de neón, pintura fosforescente en las paredes y las caras de los miembros de la pandilla que brillaban con forma de calavera debido a la pintura fosforescente, Ramón subió las escaleras hasta que llegó una gran habitación, con una muy leve iluminación y un pequeño escritorio en el cual el líder de "Los muertos" reposaba sus pies descalzos y de aspecto deplorable.
-¿Qué quiere ahora oficial?.-Dijo el sujeto con gran dificultad y arrastrando las palabras
-Que que quiero, ja, no me vengas con tus mamadas, bien sabes porque vengo.-Dijo Ramón mientras se acercaba al líder
-Es por eso del tiroteo en Dorado, ya güey no hay pedo, no vuelve a pasar.-Dijo el líder con gran serenidad
-Tu si que estas pendejo pinche drogo de mierda, ¡QUE NO HAY PEDO!, jajaja, además no te atrevas a llamarme güey, soy tu pinche jefe y me tratas con respeto cabrón.
-Que no veo porque el pedo.
-¡Mira pendejo!.-Dijo Ramón mientras de un manazo apartaba los pies del líder de la mesa y los tiraba al suelo.-No se si es la droga o es que estas pendejo, pero tenemos un trato y hace unas horas tus hombres rompieron ese contrato.
El líder se levantó con cierta dificultad
-No rompimos nada, solo fue un leve problema, no pasa de nuevo.
-Pinche puto.
En eso Ramón agarró de la camisa al líder y en un rápido movimiento lo tiró detrás del escritorio y con gran fuerza lo sometió en el suelo mientras el resto de policías solo miraban lo que ocurría, Ramón sacó su pistola y la metió en la boca del líder.
-¡ESA PINCHE OPERACIÓN, ERA SECRETA!, le confié a ti y a tus hombres que la cuidarán, durante estos años yo los he dejado en paz mientras ustedes se drogan y hacen sus cosas de pandillas y no es difícil hacerse la vista gorda en mi cargo, solo si la ganancia era muy buena, Y TU, y tu bola de ¡PENDEJOS! Dejaron que un par de tipos destruyeran uno de nuestros mas importantes almacenes de armas, y quiero que el pendejo que me quitó mas de 30 millones de dólares, no pinches pesos eh cabrón, tenga su cabeza colgada en un puto puente, me estas escuchando.
-Si señor.-Dijo el líder con la voz temblorosa y pistola aún en la boca
-Muy bien, entonces que saben de los que los atacaron.
-El
-¿Qué pendejo?
-Mis hombres dicen que fue solo uno.
-Eso es imposible, tus hombres son pendejos pero no mueren fácil.-Dijo Ramón mientras metía la pistola mas profundamente en la boca del líder.
-Pues no se que decirle patrón, fue solo uno.
-De acuerdo, supongamos que fue solo uno, qué saben de él.
-Solo que los dejó escapar para salvar a una niña.
-¡¿Y cómo se llama?!
-Yo no se, pe..., pero uno de mis hombres si.
-¿Cómo se llama?
-Gui... Guillermo
Ramón hizo una seña a uno de sus policías y de inmediato preguntaron acerca de Guillermo, el cual fue arrastrándose hasta la oficina, hasta que dos de los policías lo agarraron, Ramón le dijo a uno de los policías que mantuviera sometido al líder el solo obedeció la orden sin hacer mas alarma.
-Órale contra la pared.-Dijo Ramón mientras le ordenaba a sus oficiales que colocarán a Guillermo en la pared, lo cuales lo colocaron con gran fuerza mientras le agarraban los brazos.
-Me dicen, que tu conoces a la niña que impidió que a ti y a tus compañeros les rompieran el culo, así que me dices ahora mismo como se llama y dónde vive.-Dijo Ramón mientras colocaba su pistola en la cabeza de Guillermo
-Se llama Alejandra, su... su mamá tiene una panadería cerca del mercado.-Dijo Guillermo con cierta dificultad.
-De acuerdo, tu si cooperaste, última pregunta, que chingados hacía una pinche escuincla en una operación de tráfico de armas.
-Creo que nos siguió, porque, porque.-El nerviosismo era claro en la voz de Guillermo
-¿POR QUÉ CABRÓN?.-Gritó Ramón en el oído de Guillermo dejándolo levemente sordo
-Porque le robamos su... su dinero para molestarla, porfa patrón no me haga daño neta.
-Hijo de tu pinche madre, casi jodes la operación por robarle a una niña que, pinches cinco pesos, ni siquiera dólares pendejo.
-Discúlpeme, solo era una broma, pegarle un susto ya sabe.-Guillermo empezó a sacar leves lágrimas de angustia
Ramón había escuchado ya suficiente, la incompetencia de la pandilla "mas poderosa" lo llevó a un límite, cuando Guillermo acabó de pronunciar estas palabras, Ramón puso la pistola en la sien de este y jaló el gatillo, el estruendo fue sordo, comprimido por la dureza del cráneo que recibió todo el impacto, la sangre, pedazos de hueso y cerebro empaparon la pared de la habitación, un corto silencio le acompañó al asesinato, le ordenó a sus hombres que soltarán el cuerpo, el cual cayó contra el suelo a gran velocidad, quedando con las rodillas dobladas contra la pared, Ramón le escupió al cadáver y posteriormente lo pateó dos veces en la parte posterior del pecho.
-Vas a ir por esa pinche chamaca, y como me falles, no será la sangre de un incompetente la que sea derramada, tienes hasta mañana para traérmela, te perdoné una pendejada, dos, dos ya no.
Ramón abandonó el recinto dejando el cadáver de Guillermo en la habitación y a un líder con la respiración descontrolada y los nervios a tope, se levantó lentamente y rodeando el cadáver de su compañero les dijo a 20 de sus mejores hombres que fueran inmediatamente a Dorado y buscarán a Alejandra y su panadería, los 20 hombres agarraron suficiente munición y armas para librar un combate contra un ejército, agarraron varias camionetas y con el calor húmedo de la tarde partieron, mientras que encima de ellos las nubes empezaban a cubrir el despejado cielo, anunciando que una guerra se aproximaba.