La mañana había sido muy tranquila y armoniosa como siempre; los mienbros se preparaban para realizar sus actividades diarias, pero sólo uno había pedido su tarde libre para reunirse y resolver un asunto que lo venía atormentado desde hace dos años.
- Recuerda que si algo sale mal, no dudes en llamar, ok?-le decía un agobiado Hun a su novio.
-Tranquilo Hun, voy a estar bien si?, sabes que para este momento es para el que nos hemos estadado preparando-dijo el otro dedicándole una sonrisa tranquilizadora.
-Si tienes razón, pero no puedes evitar que me preocupe, soy tu novio y me importas mucho, así que recuerda que si tu caes yo siempre estare para levantarte.-le dijo dándole un abrazo a su Yeol.
-Lose.-dijo Yeol respondiendo el abrazo del otro.-por eso es que se que estoy listo, por que se que tu siempre estarás ahí para mi, así como yo también lo estaré.
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Había quedado con "YiFan" (que era la forma en que lo llamaría desde este momento) de reunirnos en un Starbucks que quedaba cerca de la casa en donde vivimos, el lugar era muy bonito y agradable, pero eso no era lo importante ahora, yo estaba situado en el segundo piso del local recargado en el barandal de la terraza que tenía, mientras que tomaba mi rico y siempre preferido café americano, mientras que yo miraba desde arriba ver a la gente "normal", por así decirlo, caminar por la cera, ya sea solos o acompañados, teniendo su perfecta vida normal sin preocupaciones de imagen, fingida apariencia o estar siempre perfectamente, a veces eso era lo que mas extrañaba, mi vida antes de convertirme en un gran y famoso idol del K-pop que estava teniendo una gran tendencia en el mundo, pero tampoco me arrepiento de haber alcanzado mi sueño de ser un gran cantante, ya que eso me trabajó muchos sucesos que me ayudaron a visualizar todo de manera diferente.
Mis pensamientos se vieron interrumpidos por unos largos brazos que se enrrollaban al rededor de mi sintura.
-Que gusto me da volver a verte mi querido Yeol-me giré para poder verlo mejor, y si, justo como me lo imagine el no había cambiado nada, su "estilo" seguía siendo el mismo de siempre, sólo que está vez su cabello iba pintado de blanco y tenía tatuajes sobresalientes de su camisa.
-Hola YiFan-respondí alejando sus brazos de mi sintura.
-Por qué tan formal Yeol?- pregunto haciendo una mueca de disgusto.
-Mira, no estoy aquí para jugar o pasar el rato, tengo trabajo que hacer.
-Wouuu, tranquilo yo sólo quería relajar el ambiente.
-Ajá; mira para no empezar mal, mejor hay que tomar asiento y así me vas diciendo que es de lo que querías hablar con migo-eso fue lo que hicimos y mientras esperábamos a que nos trajeran nuestros cafés correspondientes él comenzó a hablar.
-E venido a pedirte perdón por todo el daño que te hice, se que estuvo mal salirme del grupo antes de considerar tus sentimientos, pero quiero que sepas que todo el peso que la compañía puso en mi era demasiado y yo sólo no podía, y se que te tenía a ti pero no era lo mismo así que ...- no lo deje terminar, lo interrumpi dejando salir un bufido de incredulidad.
-Suho también tenía la misma carga e incluso más al ser el que liderara los dos grupos, pero el nunca se rindió así como tu lo hiciste, el se quedó con nosotros por que ese era su sueño y por lo que le tomo cuatro años de entrenamiento duro, pero al fin lo logró y ese esfuerzo le está dando grandes resultados, así que no me vengas con eso de la carga de liderar por favor.
-Como me dijiste hace tiempo, "cada persona es distinta, por lo tanto sus actos y pensamientos tambien lo seran".
-Ja, esto es ridículo y patético- en eso nos traen el café y de inmediato le doy un trago ya que sentía como mi garganta se iba secando.
-Probablemente lo sea, pero eso que importa, ahora quiero que me des otra oportunidad Yeol, quiero que me dejes amarte de nuevo, como en los viejos tiempos, quiero estar de nuevo a tu lado, quiero que ese chico risueño y alegre, que era llamado "la vitamina de exo" o el "happy virus" me vuelva a sonreír como antes, por favor Yeol regresa con migo, ven a vivir con migo a los Estados Unidos y formemos una familia, esa que tanto quisiste, renuncia a la SM y vive una vida feliz con migo, en donde sabes que no te faltará nada.- me dijo tratando de tomar mis manos posadas sobre la mesa, pero las retiré posandolas en mi regazo.
Lo mire de nuevo, mire su rostro, sus ojos aparentemente inexpresivos pero que me miraban con súplica y amor, mire esos labios carnosos que habían sido mi perdición años atrás, pero que ahora no se me antojaban volver a probar, y así volviendo a posar mi vista en sus ojos, negué con la cabeza.
-No, lo siento o tal vez no, pero no pienso volver a correr el riesgo de dañarme otra vez, y por favor escucha lo que estas diciendo, eso es algo sin sentido, yo te ofrecí eso hace dos años atrás y lo rechazate, así como también rechazaste mis sentimientos hacía ti, te entregue todo YiFan, todo, y aún así eso no fue suficiente para ti, me destruiste por completo, y a este chico frío que vez es lo que Sehun logró rescatar de aquel chico hecho pedazos que dejaste- tenía la respiración ajitada, mis ojos ardían por las lágrimas que estaba reteniendo y mis manos temblaban sobre mi regazo, pero al decir eso, sentí un peso menos en mi corazón, ahora sólo quedaba una cosa y era agradecerle al universo por tener a mi Hun a mi lado.
-Lose y por eso te pido perdón, aún que se que te pido mucho, pero dame una última oportunidad de reconquistar a ese nuevo chico frío que se a creado en ti y déjame ablandarle un poco el corazón.-sus ojos reflejaban tristeza y esperanza, la cual aplaste con mis siguientes palabras.
-Necesito que entiendas una sola cosa-lo mire detenidamente y en sus ojos pude notar como una sonrisa se iba dando paso en su rostro y en sus ojos un brillo surgía desde su interior.
-Dime, mi amado Yeol?.
-Yo ya no te necesito más en mi nueva vida,así que toma de nuevo el avión por el que llegaste y vuelvete a desaparecer, ya que al parecer para eso eres muy bueno-su siguiente expresión de tristeza probable mente hubieran causado un efecto en mi pero no lo hicieron y eso en parte me alegro ya que probablemente ya había aceptado completamente sacar a YiFan de mi vida para siempre.
Me levanté, saque mi cartera y pague por las bebidas consumidas, mientras me retiraba de regreso a casa, en donde probablemente mi querido cara de poker ya me estaría esperando, ansioso por saber que pasó, ya que son darme cuenta eran las siete y media de la noche y yo había llegado ahí a las cuatro, pero los más importante y sin mirar atrás yo Parck Chanyeol había dejado al hombre que me destruyo sentimentalmente hace dos años atrás.
