Hoy es un día común como el de todos los días. Me desperté con la mitad de mi cuerpo en la cama, e hice mi rutina en modo zombie.No pregunten como lo logre, ni yo lo se.
Lo bueno, es que puedo dormir un poco en la limusina...
— Miranda, ya llegamos a la parada del autobús.— Louis volteo su cabeza y sonrió.
Y puf, la realidad choca contra ami.
Hice una leve sonrisa, le salude y baje. El se fue y yo, cansada, me apoye en el poste de parada, mientras que la brisa pegaba contra ami.
¿Quien invento el hábito de levantarse a las 6 de la mañana?
De la nada, sentí el viento y escuche las ruedas del bus rechinar. Levante mi vista y al abrirse las puertas, subí.
— ¡Miranda, aqui!— Dijo una voz grave junto a una mano que se distinguía entre las cabezas, que apuntaban ami.
Me acerque desconfiada y suspire aliviada cuando vi que era Nahel. El se corrió un poco, pegándose a la ventana y me senté junto a el.
— ¿Como estas?— Pregunto con una sonrisa radiante en su rostro.
— Es lunes, tu que crees.— Bostece y relaje mis hombros.— ¿Y tu?
— Feliz, siempre lo estoy.— Sonrió aun mas y toco su cabello.
— Me pregunto como lo haces.— Agregue y reímos.
— No lo se.— Respondió ingenuo.
— Sabes una cosa...yo, antes pensaba que eras igual que Christopher y que vendrías ami solo por la deuda, pero...me equivoque. Eres muy amable.— Dije entre dientes.
Nahel no contesto y yo solo mire a un punto fijo en el asiento de adelante y mis ojos se cerraban y se abrían por si solos, compitiendo.
— Puedes dormir en mi hombro, si quieres...— El susurro un poco jugando con sus manos.
El sueño me ganaba, por lo que solo apoye mi cabeza en su hombro y cerré mis ojos.
Por lo menos, dormiré un poco...
Algo extraño no dejaba dormirme, por lo que abrí mis ojos y me encontré a el mirándome detenidamente.
— ¿Que haces?— Pregunte inconsciente.
— N-nada.— El se exalto y miro por la ventana.
No le di importancia y solo dormí.
...
Entramos al instituto junto a Nahel y luego de eso, me separe. Fui a mi casillero, lo abrí y deje el abrigo de mi uniforme.
Lo cerré fatigada, fui a mi clase y al entrar, me encontré con "G-F".
Por favor, no empiecen la mañana gritando.
— ¡MIRANDA!—Gritaron al mismo tiempo.
Mierda.
— Hoy tenemos que seguir pagando la maldita deuda.— Megan revoleo sus ojos cansada.
— Ni me lo recuerdes.— Bufe indignada.
De repente, el profesor llegó y fuimos a nuestros ambientes.
La clase comenzó y yo solo me perdí, ya que me percate de mirar a "G-F" en clase.
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Una chica tan invisible (EN PAUSA)
Teen FictionHola, soy Miranda Lerner. Primero, me presento. Tengo 16 años, soy una vaga que esta todo el día en su casa, acostada viendo Netflix y comiendo chatarra, explicación de la cual soy gorda y una sedentaria de por vida. Ademas de que, soy una persona...