Capítulo 33

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Capítulo 33



"Larry Lee Lewis"



Estaría genial, primero dormir un poco antes de ver lo que el sobre mostraba, pero es que la curiosidad me mata que hasta puedo ignorar que mis ojos se están cerrando de a poco, que mis piernas tiemblan y que mi rostro estaba mojado de sudor.

Saqué el sobre mediano y blanco...

Lo toqué y parecía que estaba vacío y ahí fue cuando empecé a decir malas palabras porque pensé que había sido todo una tomada de pelo, desde el principio, que ese hombre se burló de mí, que me hizo perder segundos de mi estúpida vida escuchando sus idioteces que no me beneficiaron en nada, es más me hicieron ilusionarme...

Oh dios, he sido tan estúpido.

Tiré el sobre al suelo.

Me arrodillé en el piso helado de mi habitación y ahora si empecé a llorar pero no solo por eso...

Por Cheryl...

Porque todos me tomaban como un idiota.

Por la pelea que acababa de tener... las peleas me dejaban totalmente devastado en todas formas.

Y por mi madre que no me dejaba hacer lo que me mantenía en pie que es cantar... Una vez en la vida que había enfrentado ese miedo escénico que aun tenia pero que no me perjudicaba en la hora de escena porque podía cantar, podía demostrarle a la gente como cantaba. Antes pensaba que cuando estuviera en el escenario no me saldría la voz pero ahora lo he comprobado, he comprobado que todos podemos hacer cosas de las cuales pueden parecernos imposibles.

No tenía humor en estos momentos, para soportar ese tipo de cosas, como que un idiota que está mal de la cabeza, venga con un sobre vacío a tomarte como un estúpido al que puedes engañar con cualquier cosa, porque creí que quizás cambiaria algo entregándome un papel, pero nunca me iba a pasar algo distinto, algo diferente, algo por lo que esté agradecido, porque nací para perder.

Me he dado cuenta ahora mismo...

La frase correcta con lo que me identificaba era esa. Mis ojos estaban empapados de agua, lo que me hacía que mi vista esté nublada, pero no podía parar de llorar, porque y por más que dicen que llorar sirve para descargar yo nunca termino de descargarme porque mis lágrimas nunca se van.

Siempre van a estar conmigo. Son parte de mí.

Soy un niño llorón como decían los demás jóvenes con los que compartí muchos años escolares... con esas personas que nunca me comprendieron y no quisieron tampoco comprenderme, por más raro que sea.

No quiero pensar... porque mi mente es una de esas que hace esos recorridos que a nadie le gustan, porque saca todo lo doloroso y me lo pasa como si fuera una buena película.

Estaba el sobre en el suelo, lo levanté, lo abrí sin cuidado lo que hizo que se rompiera bastante y cuando escarbe en él, puede encontrar algo...

Bueno si había algo...

Pero era algo cuadrado, pequeño, otro papel... que contenía letras.

¿Una amenaza?

Con la pinta que tenía ese sujeto pensaba que podía ser un mafioso que buscaba a un donante de órganos que podía ser yo, pero mejor no pensar, cosas que pasan en películas de terror, pero bueno como vida es una película de horror, pero nada más de hechos realistas, no dé para anormales, podía esperar cualquier cosa.

Los Demonios MentalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora