Mundos Opuestos

Capítulo N°4

Sombras De Un Antiguo "Yo"

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La clase estaba en completo silencio, faltaban solo 10 minutos para el final de la jornada escolar y el profesor de matemáticas escribía sobre el pisarrón los últimos ejercicios de los deberes para el hogar. Todo estaba tranquilo. Excepto por dos jóvenes a los que los nervios los invadían.

#POV Andrew#

-Demonios..- susurré, dejando el bolígrafo sobre el escritorio.

Miré a través del rabillo de mi ojo a Luka. Estaba terminando de copiar los deberes, encorvado sobre el escritorio, con su pierna izquierda moviéndose con nerviosismo.

Una leve risa salió de mi, atrayendo su atención. Al tener su mirada sobre mi, sentí a mi corazón dar un brinco, una sensación cálida me invadió y sentí mi rostro arder.

Una sonrisa de complicidad cruzó su rostro, haciéndome sonreír.

#End POV Andrew#

#POV Luka#

El timbre de final de carcel, digo clases sonó, haciendo que diera un brinco del susto. Di un suspiro tratando de calmarme, no podía evitarlo, estaba terriblemente nervioso.

Mientras guardaba mis cosas, Joseph y Owen se me acercaron.

-¡¡Hey, Luka, vayamos al arcade!!- me propuso Owen animado.

-No puedo, Owen, hoy Andrew va a ir a casa para avanzar el trabajo que nos dieron ayer- me disculpé.

Ambos sonrieron con picardía, Joseph se acercó a mi lado y me dio un codazo poco disimulado, yo intenté esquivarlos.

-No pierdes tu tiempo, ¿Eh, amigo?- me dijo Joseph.

-¡¡DESGRACIADO, nos abandonas  para irte a follar con tu novio!!- se escandalizó Owen.

-¡BAJA LA VOZ, PEDAZO DE IDIOTA!- le grité, avergonzado- No es mi novio, y..

-Pero no negaste la follada, pequeño Lu- me interrumpió Joseph dándome una mirada pícara, secundada por Owen, mientras yo los fulminaba con la mirada.

-Y.. si no dejan de molestarme, les diré a todos lo que ambos hicieron en los baños del recital de ac/dc- los amenacé.

Sabía que ellos durante ese concierto habían aceptado de un desconocido fumar un cigarro raro y luego habían terminado a los besos limpios; yo, que los había descubierto, les había tomado una fotografía y luego, al día siguiente, cuando no recordaban absolutamente nada, les mostré las fotos. Ellos me habían prácticamente rogado que no se los mostrara a Daren ni a Thomas.

Ambos me miraron sorprendidos.

-¡¡NO TE ATREVERÍAS!!- amenazaron ambos.

-¿Quieren apostar?- contraataque.

Ellos sabían que jamás fallaría a mi palabra, pero de momentos lo olvidaban y yo amaba molestarlos (y extorsionarlos) con eso.

Di una profunda inhalación y solté.

-¡Daren, Thomas!-

Ambos corrieron hacía mi, tapando mi boca, y mientras los aludidos venían a mi llamado, Joseph dijo:

-Esta bien, prometemos no molestarte con Andrew de nuevo si no les dices nada- en un desesperado intento por callarme.

-¿No decirnos, qué?- dijo Daren, qué había escuchado el final de lo que Joseph dijo.