Ha pasado una semana y Beth no me ha mirado de manera rara, ni nada. No he dormido en toda la noche y tendría que estar saliendo al colegio... Oh, ¡EL COLEGIO! Me visto rápido y salgo para allí. Cuando finalmente llego a la parada del autobús, es demasiado tarde. Tendré que caminar, perfecto. ¿como no me pude dar cuenta que ya era hora de irme?
Está lloviendo y no tengo ningún abrigo como para no agarrar un resfriado. Camino, camino, y ahora sólo faltan 4 cuadras. Mis zapatos se embarraron y tengo demasiado frío, me vendría bien un abrazo... ¿en qué estoy pensando? Que homosexual soy, mis amigos claramente se estarían riendo de mí. Saco mis auriculares y escucho música. Un poco de Arctic Monkeys no viene mal. ''Love is a Laserquest'', ésta canción me hace acordar a ella, no sé por qué, tan sólo lo hace. Mientras tanto, ya he llegado a la entrada; estoy seguro de que me mandarán una nota, o algo, pero no me importa. Apago la música, guardo el celular y entro.
Estaban a la mitad de la clase. Quizás no debería ni haber venido. Maldita sea, quedaré como un estúpido.
-Vaya sorpresa, James. Has llegado un poco tarde, diría yo.
-Sí, y lo siento. No he dormido en estos días.
-Claro. De todos modos, tu lugar quedó ocupado y sólo queda el banco al lado de la señorita Collings, ve y saca tus libros. Rápido. <Me tocaba a mí, justo a mí.>
Me senté y seguí las instrucciones de la profesora, aunque no pude evitar mirarla. Hacía lo que siempre; jugar con su pelo. Sus ojos estaban llenos de delineador corrido y su labio superior tenía una cicatriz de la cual nunca me había percatado. De vuelta al mundo cuando toca el timbre del recreo. Organizo unos papeles en mi mochila, papeles en los que su nombre resaltaba con marcador, cuando siento una mano suave rozarme el cuello. -Te veo fuera- Susurró una voz inconfundible; Beth. No puedo creerlo, ¿que querría? Mejor me apuro, quizás tengamos una conversación. Sí, como lo dije antes, pero ésta vez es distinto.
Bajo las escaleras y allí estaba, con las manos sujetadas a las mangas del suéter. Me acerco y le rozo el brazo.
-Sí, tú. Hola, ¿crees que eres muy malo, sólo por haber llegado tarde?
-No, uhm, no, ¿por qué piensas eso?
-Sólo preguntaba. Siendo tú como yo, quizás podríamos pasar un buen rato, ¿no crees?
-Oh, sí, supongo...
-Sí...
-Sí...
-Sí... ¿me das tu número? Éste fin de semana habrán 3 días seguidos de fiesta en la casa de un amigo, por si quieres ir, te llamo y eso.
-Claro, sí. <Saqué un papel de mi bolsillo, (sin estar consciente de lo que tenía escrito del otro lado) un bolígrafo, escribí mi número de celular y se lo di.
-Luego te llamo, copia del Empire State. <Se alejó>
¿Qué? Empire State... ¿Qué?
Durante las clases sólo pensé en el movimiento de sus labios al hablarme. Sus ojos, me miraron sin desprecio, parecía un sueño. Ahora estoy escuchando música, esperando su llamada...
Esperando
su
llamada.
El teléfono sonó.
-¿Hola? <Dije emocionado>
-¿James?
-¿Max?
-Sí, ¿que hay viejo?
-Nada, pensé que eras otra persona.
-¿Quien? ¿Karen? A mí también me ha coqueteado, pequeña zorra.
-No, no importa...
-Ok.
-¿EN SERIO TE COQUETEÓ? Cuenta, vamos.
-Oh, bueno, no puedo contarte, aquí viene Tim. Luego te hablo.
-Claro, luego.
He estado recibiendo llamadas de broma todo el día, ya estoy cansado de esperar. Me cambio de ropa para ir a dormir y pongo uno de mis discos de vinilo. El soundtrack de la película Submarine, me fascina. Empiezo a cerrar los ojos de apoco, aunque un sonido interrumpe mi sueño. Mi celular.
-Si sigues con éstas llamadas te juro que...
-¿Dallas? Soy Beth, ¿ estabas durmiendo? Jajajajaja. Son las 12 de la noche.
-Oh, hola, lo siento. No, estaba relajado, escuchaba música, ¿que pasó?
-Nada, sólo llamaba para darte la dirección de la fiesta, la de éste fin de semana.
-Oh, claro. Dime.
-Washington 5692.
-Estaré ahí, tú irás, ¿verdad?
- Sí, voy con otros amigos. Debo colgar.
-Está bien. Adiós.
Iré a una fiesta donde estará ella, perfecto. Pensaré temas de charla. Esto avanza.
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Simplemente ella.
Teen FictionJames Dallas es un adolescente normal, no hace nada fuera de tono. Demasiado aburrido, así lo describirían todos. Él, por su cuenta, ha observado de cerca a la chica que es todo lo contrario a él; Beth Collings, la mas rebelde del instituto Bellric...