-¿Estás bien, kook? -preguntó el rubio en un pequeño murmullo una vez que estuvieron dentro de su apartamento, con sus cuerpos juntos en un cálido abrazo.
No recibió respuesta por parte del castaño, tampoco un movimiento con la cabeza en negación o afirmación, tan solo se quedó inmóvil con su rostro oculto en el cuello del más bajo, sintiendo su relajante respiración.
-Kookie -acarició su cabello y soltó un suave suspiro-... ¿qué le ocurre a los robots que son devueltos?
El oji-marron se separó sin ser brusco, y sonrió levemente a su pareja para demostrar que estaba bien, que no debía preocuparse. Yoongi no supo si era o no su imaginación, pero pudo notar una pizca de falsedad en esa sonrisa; no era una sonrisa genuina.
Acunó el rostro del menor entre sus manos, y acarició sus mejillas con sus pulgares, sonriéndole como una forma de consuelo.
-Son desarmados -dijo luego de un largo silencio, posando sus manos sobre las del contrario-, los desarman para crear otros robot, otros seres. El jimin que conocíamos ya debe estar hecho pedazos...
-No lo digas así, tú mismo te harás sentir peor -se acercó a él y depositó un suave beso en la comisura de sus labios, sacándole una pequeña sonrisa en cuanto recordó que él había hecho lo mismo para tranquilizarlo hacía algunas semanas.
En cuanto Yoongi soltó el rostro del castaño oji-marron, éste le tomó de la mano y lo guió hasta el gran sillón de la sala, donde se sentaron uno al lado de otro. Jungkook pasó su brazo por la espalda baja del rubio y lo acercó más a sí mismo, apoyando la cabeza en su hombro con los ojos cerrados.
-Tu jamás me devolverías, ¿verdad? -murmuró, su voz sonaba como si fuera a echarse a llorar en cualquier momento, y eso le había partido el corazón al adolescente humano.
Giró su rostro hacia él, y le acarició una mejilla con delicadeza.
-No soy tan tonto para renunciar a mi felicidad -le dedicó una bonita sonrisa, provocando un suave rubor en Jungkook.
-¿Te hago feliz? -sonrió, recuperando su actitud de siempre- ¿Soy bueno en eso? -soltó una suave risilla.
-Más de lo que crees, kookie -acortó la distancia en un pequeño beso, y le sonrió-. Te quiero.
-Y yo a ti, Min.
-No me llames Min.
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cien días para estar contigo.
Fanfictionyoonkook : ¿por que aferrarse a algo si sabes que pronto lo perderás? adaptación, todos los créditos a sus respectivos autores. ©