Capítulo 18

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Chad me había había escrito a mi Whatsapp a eso de las 7 de la mañana, a esa hora ya estaba despierto, pues estaba de regreso a mi casa. 

  — ¿Podemos vernos en el parque a las 9? A esa hora termino mi tratamiento de los Brakets.

como no le contesté el mensaje, a los minutos me llamó. Le confirmé mi asistencia a la sita. 

hice un poco de orden en mi habitación. Para mi suerte mis padres no estaban en casa, ya debían estar en el trabajo. 

***

La lluvia no se había ido en toda la noche, y aunque ya es el otro día aun sigue en la ciudad. El clima se veía triste, muy triste. Un cielo gris, posos de agua por todas las calles y sombrillas tan aburridas como la mía. 

Llegué ala entrada del callejón, desde allí pude ver a Chad de espaldas, nuestras miradas se encontraron cuando el se giró tal vez a revisar si ya venía yo. Sus ojos de angustia estuvieron a centímetros mio en menos poco tiempo.

  — ¿Estás bien?   — Afirmé con mi cabeza. Sus manos recorrían con ligereza mi rostro, besaba cada parte de mi cara. — No lo vuelvas hacer. ¿Lo prometes?

  — Está bien...

Chad se subió en un pequeño anden, que lo ayudaba a estar a mi altura, sus brazos se  enrollaron por mi cuello. — Estás loco mi amor.— Entrelazo nuestras manos y salimos del parque de nuevo a casa.

***

Hablamos un poco en el camino. La calle que nos separaba de nuevo nos esperaba. Traía un nudo en la garganta, no sabía cómo hacerlo, no sabía cómo enfrentarlo. 

  — ¿Chad te puedo preguntar algo? 

  — Dime...  — Su mirada se fue al infinito, tan lejos de mí. Yo comenzaba  a suponer que ya sabía de que venía a ser la pregunta.

 — Tomé aire en mis cachetes, mi corazón latía fuerte, a pesar del frío, sentía una gota de sudor bajar por el espinal dorsal.— ¿Por qué lo negaste?

 — ¿Negar qué?

  — Negar nuestra relación.

  — Entonces fuiste tú.

  — No tengo la necesidad de esto,  simplemente caíste en la trampa de mi mejor amigo. Toma...— Extendí una hoja de papel, él la tomó y me fui sin más que decir. 

 


 


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