Sentimientos descubiertos

Algo inesperado

Ah, como son de impacientes de veras, así nunca me van a dar ganas de publicar lo que quieren leer, por el simple hecho de que soy mala y quiero hacerlas sufrir :v

Diciembre 15

Eran las 6 de la tarde cuando Hermione abrió sus ojos completamente después de 3 intentos fallidos por estar adormilada.
Severus ya no estaba en la cama, se estiró y bajo, todo estaba oscuro, aunque no tanto, pues la luz del sol daba en las cortinas cerradas tratando de iluminar a través de ellas, así que podía ver perfectamente, se dirigía a la cocina. Antes de entrar piso algo, tal vez agua, pero era sangre. Se espantó, entró corriendo, había más huellas de sangre, de un solo pie.
H:Severus.....Severus
Lo vio recargado en el lavabo, dandole la espalda, volteó su cabeza en cuanto la escucho gritar.
H:Dios mío, ¿estás bien? ¿Por qué hay sangre en el piso? -ya estaba a lado de él. Vio que tenía su pie izquierdo en el aire, solo parado en el derecho.
S:me corte.
H:creí que te había pasado algo malo-dijo casi sin aliento, vio cachos de vidrio en el piso junto con agua y flores regadas, era un jarrón de flores, que posiblemente estaba encima de una bandeja que estaba repleta de comida, era eso, le iba a llevar la comida a la cama.

Estaba pálida, le había dado un susto sin querer. Seguía dándole la espalda.
S:por qué no llevas la comida arriba, en seguida subo.
H:seguro, puedo esperarte.
S:no-contestó rápido, algo nervioso- adelántate, ahora voy, arreglaré todo aquí.
H:esta bien- colocó su mano en el brazo de él y lo apretó un poco. Llevaba una camisa blanca de manga corta. En cuanto desapareció recogió todo con un movimiento de varita e hizo que desapareciera la cortada.
Tenía que resolver su pequeño problema, hace mucho tiempo que no le pasaba eso, y es que pensaba que al ya no ser un adolescente hormonado eso ya no le sucedería, sino que lo podría controlar, pero ahí estaba, en medio de la cocina con una gran erección.

Había tenido 3 en este par de semanas, la primera hace unas noches cuando vomito Hermione, y este día 2 más, una cuando despertó, pudo ir al baño y ducharse con agua fría, le ayudó, después había bajado para preparar el desayuno, pensaba en Hermione mientras lo hacía, en su plática de la madrugada, los eventos recientes, como acabaron juntos, y "vualá" tenía otra erección. Pensó que si ella seguía dormida podría darse otra ducha pero cuando escucho movimiento en la parte de arriba se alteró y golpeó con su codo el florero, cuando ella bajaba las escaleras se inquieto, tenía que disimular, vio el lavabo, era perfecto, le daría la espalda, olvido los vidrios, los piso con su pie pero lo ignoro, tuvo que aguantar decir una maldición para llegar al lavabo.

Ahora no sabía que hacer, el único baño con ducha era la que estaba en el cuarto de ambos, los otros 2 baños solo tenían el W.C.
Tenía que pensar rápido y tenía que subir también o ella bajaría a buscarlo.

Trato de ocultarlo pero era imposible, lo único era subir y meterse en las sabanas como un rayo para que no lo viera.
Subió, abrió la puerta lentamente y no vio a nadie, escucho ruido en el baño, se apuró, casi salto dentro de la cama, ya estaba tendida pero se metió dentro de las sabanas. Poco después salía Hermione del baño. Él sabía que ella se daría cuenta que actuaba raro.

Pero no le dijo nada, se sentó en la cama, no se metió dentro de las sabanas. Desayunaron en la cama, trato de tardarse para que cuando se levantara ya no hubiera rastro de nada pero no se tardó lo suficiente.
H:¿te sientes bien Severus?
S:yo....si.
H:seguro?
Asintió.
Su marido era muy pálido, pero ese día estaba algo chapeado, pareciera que tuviera fiebre. No estaban muy lejos por lo que cuando Hermione se movió rozó la mano de él.
H:estás muy caliente, no tendrás fiebre.- se acercó y pensaba poner una mano en su frente pero él se alejó un poco.
S:no, estoy bien.
H:espera, solo déjame comprobarlo.
Antes de que tocara su frente tomó su muñeca para evitarlo.
S:no tengo nada.

Ella suspiró era tan terco como enojon.
H:hace rato casi me da un infarto al ver la sangre, sin mencionar que ayer pensé que estabas muerto, y ahora no puedo ver si tienes simplemente fiebre.
S:es que no tengo nada, lamento haberte espantado, no quería hacerlo....creo que iré a mi despacho a seguir trabajando...-era su excusa perfecta, se comenzaba a levantar, pero antes de hacerlo recordó porque estaba tapado en la cama, se quedó inmóvil.
H:¿que pasa?
S:eh nada, sólo recordé que ya había terminado lo que iba a hacer.
Ella suspiró, tenía algo pero no quería contárselo.

Ahora estaban de vacaciones, ninguno sabía que hacer. Ya era tarde, habían dormido casi todo el día. Se quedaron en la cama sin saber que hacer, era algo incómodo.
H:tu pie ¿ya esta bien?
S:si....creo que me he vuelto algo torpe.
Ella sonrió.
H:tal vez- hizo que la volteara a ver. Dejo de darle la espalda y se acomodó de nuevo para estar a su lado.
S:tratare ya no espantarte más.
H:te lo agradecería.-dijo irónicamente, cuando sus miradas se encintaron ella sonrió.
Él  la veía, parecía muy entretenido solo haciendo eso. Ambos tenían un efecto calmante sobre el otro sin saberlo.
Como 2 imanes, completamente opuestos se acercaron y volvieron a besarse, se sentía tan bien.
Cada que se tocaban una corriente eléctrica los recorría, ere inexplicable, solo ellos se
entendían.

Creo que así les diré a partir de ahora: pecaminosas.
Pronto se cumplirán sus retorcidos deseos, por lo menos en esta historia.